14 Veranos

17. Peter Pan

VERANO, HACE 9 AÑOS

Después del beso que se dieron la última noche del anterior verano, aparentemente todo seguía igual. Seguían escribiéndose y llamándose como si nada hubiera pasado durante el curso escolar, siempre más pendientes de las notificaciones de lo que admitirían, con el sonido de los mensajes distinto para reconocer instantáneamente cuando era el otro el que escribía. Ese año, incluso había aumentado el número de veces que hacían videollamada para que Juanjo ayudara a Martin con las matemáticas de tercero que ya se le empezaban a atascar. Comenzaban las llamadas con derivadas y terminaban hablando de cualquier otra cosa, era lo más cercano que tenían a la compañía del otro durante esos meses. Martin le hablaba de su hermana, sus padres y sus amigas, aun con cierto recelo cuando mencionaba a Ruslana, y Juanjo le escuchaba para después hablarle él también de lo que estaba ocurriendo en su vida.

Sin embargo, aunque todo parecía igual o incluso mejor, ese año, en el trayecto en coche hasta el pueblo, Juanjo estaba más inquieto que de costumbre. Hacer como si nada hubiera pasado desde la distancia era fácil, tener a Martin justo delante cada día sería otra cosa. Durante ese año había notado un fuerte desarrollo personal, había cumplido los 16 años y por primera vez sentía que empezaba a hacerse mayor. Esa incipiente madurez le hacía ser más consciente del significado de las cosas, un beso podía no ser nada, pero también podía serlo todo. Le daba miedo llegar y que Martin y él no supieran actuar con la misma normalidad de cada año, no quería tener que darle veinte vueltas a cada cosa que hacía o decía, pero lo sentía inevitable. Sentía que desde ese beso toda acción o palabra podría tener interpretaciones, puede que no para Martin, pero tal vez sí para él.

Las voces en su cabeza pasaron de gritos a susurros cuando vio a Martin sentado en su puerta esperándole como siempre hacía.

Se dieron el fuerte abrazo de cada año con el que casi se asfixiaban, deshicieron juntos la maleta de Juanjo sin hablar mucho y se fueron directos al bar de la plaza para empezar de nuevo un verano de disfrutar de la compañía mutua. Empezaban los meses en los que podrían perfectamente ser confundidos por una sola persona.

—¿Qué os pongo chicos? —preguntó la camarera, la conocían de vista, tenía cinco años más que Juanjo y era la hija del dueño del bar, había pasado los últimos veranos trabajando allí.

—Un agua con hielo y limón y una CocaCola —contestó Martin por los dos.

Siempre era lo mismo, la respuesta ya salía sola de su boca sin ni siquiera tener que mirar a Juanjo para preguntar, por eso, cuando su amigo abrió la boca para corregirle le tomó tanto por sorpresa, era una estupidez, pero le gustaría pasar todo el año con él para así aprenderse al instante esos pequeños detalles que cambiaban. Ese simple acto le hizo sentirse más distante de lo que probablemente debería.

—Cambia la CocaCola por un tercio por favor —dijo Juanjo seguro de sí mismo. Allí nadie le iba a poner problema, nadie iba a pedirle el DNI a un chico de 16 años que quisiera tomarse una cerveza.

La elección de bebida no ayudó a Martin, que fue más consciente que nunca del año que les separaba. Él solo le había dado un sorbo a una cerveza de su padre una vez y le había sabido a pis.

Juanjo no era el único que le había estado dando vueltas al tema del beso, Martin lo recordaba como un momento mágico que repetía en su mente cada vez que subía al mirador, pero no había pensado hasta ese momento que pudiera significar nada más que una noche tonta bajo la luna llena. Ahora, con Juanjo delante, siendo consciente de que era mayor y de que probablemente después de este curso ya tendría más experiencia que él en estos temas, esa cerveza que había pedido tenía un significado distinto para él. Esa cerveza era un cambio en lo de siempre, no solo era un cambio en sus gustos de bebida, simbolizaba mucho más para Martin. Él no quería que nada cambiara, quería que todo siguiera igual. Su Juanjo que bebe CocaCola y que no para de hablar ni un segundo del día.