Mase
Mis ojos van abriéndose de forma lenta, mi visión es borrosa que tengo que pestañear varias veces hasta que el rostro de Dan es completamente claro —al fin carajo.
—¿Qué pasó? —pregunto sintiendo una jodida rasposidad en la garganta mientras voy enderezándome, noto como mi espalda duele al moverme y al ver mis nudillos el recuerdo del suceso en la oficina me vuelve y mi cabeza va hacia Dan rápidamente, su expresión está llena de rabia contenida.
Sin más me levanto por completo y me dirijo hacia fuera encontrándome con una Melina con las mejillas mojadas y la mirada perdida, un Richard con su computadora tecleando sin parar sin notar mi presencia —tu padre y tío están en el jardín —dice Dan detrás de mí y vuelvo a caminar hacia fuera de mi propiedad encontrándome con más destrozos, manchas de sangre y hombres retirando cuerpos sin vida.
Al abrir la puerta corrediza oigo claramente los gritos de mi tío —¡LA HABIAS ENCONTRADO, DAVID!, ¡LA ENCONTRASTE Y NO INFORMASTE NADA!
—¡NO ERA SEGURO QUE FUERA HIJA DE ELENA! —un golpe y mi padre termina en la grama.
—A mí no me mientas, perro asqueroso —jamás había oído ese tono en mi tío y menos que le hablara así, le agarra la mandíbula acercándolo a su rostro —podrás engañar a todos, menos a mi —mi padre agarra su muñeca mostrando la señal de dolor —tu sabias bien quien era ella y mandaste a matarla.
—¿De quién hablan? —intervengo y mi padre me mira, pero mi tío no. Este lo suelta y siento que está conteniéndose de golpearlo mucho más, pero ninguno habla —hice una pregunta y espero una respuesta.
—Dile —arremete mi tío, pero mi padre solo escupe sangre y limpia su labio, su mirada no muestra ninguna señal de voluntad de querer hablar, más bien tiene esa postura cuando su rabia está en los puntos más altos —dile quien es realmente su novia —frunzo el ceño cuando mencionan a Alexandra.
—¿Qué tiene que ver Alexandra en todo esto? —miro entre ambos y mi padre cerrando sus ojos se levanta comenzando a hablar.
—Ella es una Bernardi —dice mi padre y siento como si todo el calor se haya ido de mi cuerpo —tu novia es el niño que durante todos estos años hemos estado buscando en secreto.
—¿Alexandra...es una Bernardi? —miro a mi tío —¿ella es...?
—Mi sobrina —aclara, aunque puedo notar cierto odio cuando lanza esa respuesta —es hija de mi hermana —la cabeza me duele que busco una silla y me desplomo en ella.
—Ustedes me dijeron que no todos habían muerto... —digo mirándolo y esta vez mi tío me devuelve la mirada.
—El día del ataque mi hermana estaba fuera de Italia —me explica —solo tuvo un día para disfrutar del ser que había traído al mundo cuando decidió por su seguridad enviarlo lejos —su expresión decae —desgraciadamente ella murió ese día —noto como sus manos se cierran en puños —apenas pudiendo escapar y tener que movernos entre sombras descubrí que mi hermana había tenido un varón —una sonrisa melancólica se forma en los labios de mi tío —Luca Bernardi Ciprianno, ese es el nombre que le dio y con el cual nos movíamos en su búsqueda.
—Pero... ¿entonces como...? —miro hacia mi padre y este suelta un suspiro antes de volver a mirarme.
—Cuando supe tu interés en esa chica, mande a investigarla —una parte de mi se enoja al escucharlo —necesitaba asegurarme que no te traería problemas —se pasa una mano por el pelo en señal de frustración —fue cuando vi su foto que me di cuenta de quien era —mira a mi tío —pero yo no tuve que ver con su accidente —asegura —¿Por qué carajo la mandaría a matar? —se palmea el pecho —yo también apreciaba a Elena, maldito imbécil y sino dije nada y reaccione a su relación con mi hijo es porque quería evitar que algo como esto pasara —me levanto parándome en su delante.
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MI OBSESIÓN
RomanceLIBRO 1: SAGA REENCUENTROS Y SECRETOS Fui criado para gobernar, mi padre toda la vida me enseñó como tenía pensar y actuar para conseguir lo que deseo. Me guío y dictó cual camino debía seguir para conseguir y recuperar una grandeza pasada que nos f...