MI JEFA (BILLIE Y TU) GIP

CAP 7

POV BILLIE

Son las 11 p.m. y ___ ya está recogiendo sus cosas para irse. La miro mientras guarda sus papeles, y solo me lanza una mirada triste, llena de enojo y frustración. Es como si esa mirada me atravesara el alma. Joder, eso me duele más de lo que debería. Una parte de mí quiere correr hacia ella y preguntarle qué demonios está pasando, pero la otra parte sabe que no puedo hacer eso.

Después de que se va, me quedo sola en mi oficina, el silencio pesa como una piedra. Y ahí es cuando me empiezo a cuestionar: ¿estoy volviendo a mi pasado? ¿Es esto lo que quiero? Me follo a chicas y las dejo tiradas por ahí, como si fueran solo un maldito pasatiempo, una distracción para ocultar lo que realmente siento.

Mierda, ¿qué estoy haciendo? Me esfuerzo por parecer la jefa dura y desinhibida, pero por dentro, me siento como una completa pendeja. Estoy usando estas noches de locura para esconder mis verdaderos sentimientos hacia ___, y eso me jode.

Me muerdo el labio, pensando en cómo he sido en el pasado. Siempre buscando esa jodida validación en cada cama que comparto, en cada beso robado. Pero nada de eso me llena realmente. Solo me deja sintiéndome vacía y perdida, y ahora me doy cuenta de que lo único que quiero es a ___ a mi lado.

—Esto no puede seguir así —murmuro para mí misma, frustrada. Si sigo con este juego de mierda, me voy a perder lo mejor que tengo. No puedo seguir dándole la espalda a lo que realmente siento.

El problema es que, aunque me excite la idea de salir y encontrar más diversión, cada vez que lo hago, lo único en lo que puedo pensar es en ella. En su sonrisa, en cómo se ve cuando está concentrada en su trabajo. Es un jodido desastre emocional, y estoy a punto de volverme loca.

Me dejo caer en la silla, dejando escapar un suspiro pesado. Es hora de que enfrente mis sentimientos, pero también tengo que encontrar una manera de arreglar esto. No puedo seguir dándole la espalda a lo que realmente siento. Es hora de ser honesta, aunque eso signifique meterme en una montaña de problemas.

—Maldita sea —digo en voz baja, sintiéndome más confusa que nunca. Pero sé que tengo que hacer algo.

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Otro dia 

POV ____

Otro día más en la oficina y, joder, si Billie estaba distanciada conmigo. Solo me hablaba de trabajo, como lo había hecho desde un principio. La tensión entre nosotras era palpable y, aunque intentaba no pensarlo, no podía evitar sentirme frustrada. Estaba atrapada en un mar de sentimientos contradictorios, y eso me estaba volviendo loca.

Estaba sentada en mi oficina, concentrada en algunos documentos, cuando de repente escuché un golpe en la puerta. Oh, no. No. No. Tenía una mala corazonada. Miré hacia la puerta, y para mi horror, era mi ex, Fernanda.

—¿Qué demonios hace ella aquí? —murmuré para mí misma, sintiendo que el estómago se me revolvía. ¿Cuándo había venido a Los Ángeles? No quería volver a verla, y menos ahora.

—Hola, ____, ¿puedo pasar? —preguntó con esa voz que siempre me ponía incómoda.

—Eh... claro, pasa. —intenté sonreír, pero sabía que no me saldría natural. La vi entrar, con esa actitud de "aquí estoy, el mundo gira a mi alrededor".

—Wow, no te esperaba tan ocupada. —me lanzó un comentario que no sabía si era una broma o una puñalada.

—Sí, bueno, la vida no se detiene solo porque tú aparezcas. —le respondí, sintiendo que la tensión aumentaba.

—Vaya, mira quién habla. La que se mudó a la ciudad por un trabajo de mierda. —se rió, y me dio ganas de romperle la cara.

—No tengo tiempo para tus juegos, Fernanda. —le dije, con los dientes apretados. No podía creer que tuviera que lidiar con ella de nuevo.