BLACK SWAN

12

Ahí sentado bebiendo considere la idea del suicidio, pero sentí un extraño cariño por mi cuerpo, por mi vida. A pesar de sus cicatrices y marcas, me pertenecían.

Charles Bukowski

JENNIE

Capítulo 12

"El corazón dolido, la joven dama"

Me encontraba en mi oficina, organizando algunos documentos, cuando un recuerdo de Jisoo me golpeó con fuerza. Aquella conversación que tuvimos sobre el amor y las relaciones todavía resonaba en mi mente. "A veces las conexiones llegan de formas inesperadas. Solo tienes que ser honesta contigo misma y con ella. Si esto es real para ti, vale la pena explorarlo", había dicho Jisoo con una sonrisa, como si cada palabra tuviera un peso especial. Hablaba con tanta pasión sobre lo importante que era vivir el amor sin miedo, sin importar las opiniones de los demás. En ese momento, me sentí inspirada, pero también un poco perdida.

¿Realmente sabía lo que significaba amar? ¿Realmente esto era lo que quería?

Una semana después

Era demasiado tarde, mientras seguía escribiendo podía escuchar la voz tan clara, podía distinguir esa voz, era peculiar, porque era ella.

— Regresó — mientras seguía haciendo un repaso de los oficinistas, podía escucharla, era ella sin duda. Tomé una pausa mientras ella se acercaba, pero, me ganó el temor de que iba a preguntarme —.

— "Jennie, necesitamos hablar" — mencionó aquella joven, de aspecto dulce pero temeroso. Pero ella no sabía qué en el fondo estaba nerviosa... mi mejor arma fue "fingir no saber nada" —. Jennie, no estoy bromeando. Esto es importante.

Mientras que ella había entrado en mi oficina con una expresión seria, y su energía era palpable. Sabía que algo la inquietaba; podía sentirlo en el aire. Quería hablar de algo importante, y no pude evitar sentir un escalofrío recorrerme. Cuando mencionó que quería comentarme sobre aquella vez que tuvimos sexo, mi corazón se detuvo por un instante.
Volví a fingir. La había escuchado desde el principio, antes que ella entró a está puerta, sabía que era ella. Pero... solo quería asegurarme qué lo que pensaba y lo que hacía, era lo correcto.

— ¿Qué quieres? — La verdad es que no estaba lista para esa conversación. La idea de sumergirme en esos recuerdos me asustaba. Así que, sin pensarlo dos veces, decidí interrumpirla. — Si no tienes nada que decirme, retírate — le dije, mi voz saliendo más fría de lo que esperaba. La vi flaquear ante mis palabras; su mirada se llenó de decepción y tristeza. No quería, no quería enfrentarme a estos sentimientos, desconocía por completo era inmoral.

— Esta bien, me retiro — mencionó aquella joven, con mil dudas en su cabeza, mientras ella se retiraba yo seguía fingiendo no darle importancia. Yo seguía escribiendo, pero realmente solo podía mirarla de manera discreta —.

A medida que se alejaba de mi oficina, sentí el peso de la culpa apoderarse de mí. ¿Por qué había actuado así? Lisa solo quería abrirse a mí, y yo había cerrado la puerta sin darle una oportunidad. La miré marcharse, sintiendo cómo se formaba un vacío entre nosotras. Había sido tan fácil rechazar esa conversación por miedo a lo que podría implicar.

Sentada en mi escritorio, volví a pensar en las palabras de Jisoo: "A veces las conexiones llegan de formas inesperadas.". Quizás había estado tan ocupada protegiéndome a mí misma que olvidé considerar lo que Lisa necesitaba. El amor es complicado, y yo no tenía todas las respuestas.