HAUNTED ♰ scream. ✔

06 ♰ are you okay, honey?

Suelto un suspiro mientras estoy apoyada en el sofá viendo una película de terror con el resto de los amigos de Stu que decidieron quedarse a seguir un poco más la fiesta dentro de la casa. Aunque en realidad no le estoy prestando demasiado atención, sólo sé que los hombres están hablando sobre querer ver las tetas de Jamie Lee Curtis, y me hace pensar que claramente son unos idiotas.

Soy la única chica que queda allí en medio de un montón de chicos hormonales que parecen nunca haber visto unas tetas en toda su vida. Lo cuál me hace pensar que en realidad es así.

Aun así mi mente aun sigue distraída por el hecho de que Sydney y Billy están arriba hace demasiado tiempo, mi mirada está puesta sobre la entrada mientras las voces suenan de fondo en mi cabeza.

—¿Acaso no saben las reglas para sobrevivir a un asesino?— La voz de Randy me hace sccar de mi ensoñación girándome a verlo.

—¿Qué reglas?— Pregunta Stu con la voz arrastrada, ya se puede notar que está afectado por el alcohol.

Randy, completamente ofendido, pone en pausa la película y se para para ponerse al lado de la televisión para dar alguna clase de discurso sobre todo lo que a aprendido de sus películas de terror. Cruzo mis brazos mientras le presto atención.

—Hay ciertas reglas para poder sobrevivir con éxito en una buena película de terror. Por ejemplo, la número uno, es no tener sexo.

Todos allí comienzan a reírse y a lanzar palomitas en su dirección, mientras que yo me río de la situación, aun bastante interesada por lo que está diciendo Randy.

—¡Es un gran 'no'!— Grita él sacudiendo su mano para esquivar las cosas que le lanzan.— Sexo es el equivalente a muerte, ¿De acuerdo?

—Claro, porque el sexo es un pecado.— No puedo evitar decir con sarcasmo, a lo que ladeo mi cabeza con una sonrisa cínica en mis labios.

—Número dos, no puedes beber o usar drogas, nunca.—Luego de la segunda regla, todos levantan sus cervezas entre risas brindando, dándose cuenta que acaban de romper una de las reglas. Niego con la cabeza, entretenida por el camino de esta conversación.— ¡Es la extensión de la número uno! ¡Todos son pecados!

—Entonces el asesino se podría llamar un cazador de pecadores, ¿no es cierto?— Elevo una de mis cejas en lo que me enderezo y doy un paso lejos del sofá.

—Llámalo como quieras, Elodie, pero sabes que tengo razón.—Randy me señala con su cerveza, a lo que ruedo los ojos sonriendo un poco.— Pero continuando, la regla número tres, es nunca pero nunca digas "enseguida vuelvo" porque nunca volverás.

—Voy a buscar otra cerveza, ¿Quieres otra?— Stu se levanta del sofá del sofá mirando a cada uno de los presentes allí, yo digo que 'no' con la cabeza enseguida.

Ugh, cerveza.

—Si, claro.— Contesta con simpleza Randy.

—Enseguida vuelvo.— Dice Stu de manera burlona en lo que camina hacia atrás moviendo sus brazos al frente.