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Libro tres: Revolución espiritual

Rescate

Parte 1

¿Cuál era la mejor forma de describir el panorama actual? Emiliano leía los nuevos informes y saber que sus mejores guerreros cayeron por ese espíritu anónimo le provocaba sentimiento ambivalentes. Podía sentir un gran escalofríos recorrer por su piel, su corazón latía con emoción — Es más que perfecto ¿No lo crees Enzo? — preguntó con una gran sonrisa causando un poco de miedo en el menor.

— Supongo, señor — se limitó a responder, hizo una leve reverencia antes de retirarse.

Emiliano no despegaba su mirada de esos pergaminos antiguos leyendo acerca de Yun, un antiguo maestro tierra; conociendo acerca de sus habilidades extraordinarias gracias a un espíritu a quien devoró, adquiriendo gran poder y control en sus poderes. Se levantó y caminó hasta la ventana admirando todo el paisaje de su país, sonriendo ante la idea que llegaba a él ¿Y si devoraba a ese charro negro? Podía inclusive adquirir otro poder elemental, la poca información reveló su nacimiento dentro del gran volcán Popocatépetl.

O tal vez podría viajar a Perú y consumir el de otro gran espíritu. 

La lluvia caía con fuerza en Perú y agradecían la ayuda de algunos guerrilleros en esconder a su bisonte. El avatar era esperado para poder realizar un golpe de estado al menos de una forma discreta para no exponerlo, pero era algo difícil. Todos se quedaron en silencio cuando Messi y David se quedaron observándose fijamente con una expresión seria.

— ¿Qué hacen aquí? — preguntó enojado el británico.

— Nos enteramos de la captura de Pedro y solamente queremos ayudar. — respondió tranquilamente Lionel.

— ¿A cambio de qué? — intervino Beckham mientras se acercaba al avatar — No estarías dispuesto a ello sin algo a cambio; jamás te hemos agradado y... —

— Cállate — interrumpió Javier y no dudo en chocar frentes con Beckham iniciando un tensión — Estamos aquí sin pedirte nada, queremos ayudar a Pedro y liberar este país. Emiliano nos está pisando los talones y busca extender todo su poder militar en el continente, lo último que deseamos es ver caer todos los países latinos e incluyendo mi país. — explicó Javier con una expresión de pocos amigos.

— Eso podría traer un desequilibrio al mundo. Batallas sin fin, como lo hizo la nación del fuego en la época del avatar Aang. — terminó de comentar Messi y se mantuvo firme entre ellos dos para evitar alguna pelea innecesaria.

— Eso es verdad, Beck. Podemos aprovechar el apoyo para liberar a Pedro y de alguna forma contribuir con todo el país. — Scaloni se asomó al escuchar todo aquellas voces ante la tensión creada, no se imaginó encontrarse tan pronto con el avatar; no pudo evitarlo buscaba a Guillermo y es que el temor de observar nuevamente la crisis del británico le causaba mucha preocupación.

No lo negará, se sintió aliviado al no encontrarse con su presencia.

David solo desvió la mirada y cruzó sus brazos ante ese comentario. Ni siquiera respondería y prefirió darles la espalda para retirarse a sus aposentos, esperaba que al despertar de su siesta ya no estuvieran presentes — Hablaré con él. Has llegado en buen momento Lionel — comentó nuevamente Scaloni.

— ¿Por qué? — preguntó algo preocupado el avatar.

— Nos hemos enterado de que el día de mañana ejecutaran a Pedro y planean atacar el santuario de Machu Picchu para despertar al espíritu que esta durmiendo ahí. — respondió el Scaloni.

— ¿Para qué desean hacer eso? ¿Buscan morir? — preguntó Javier algo sorprendido.

— Aún no sabemos con qué fin. Emiliano llegara mañana para presenciar la ejecución y dirigir el ejercito al recinto sagrado. —