🍪Capítulo 17🍪

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Siempre hay una razón por la que conoces a alguien

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Siempre hay una razón por la que conoces a alguien. Ya sea porque tu los necesitabas a ellos para cambiar tu vida o tú eres quien va cambiar la suya.
«Narra Jimin»
Diecisiete años


Mi corazón se agitaba de incertidumbre, las clases estaban pasando rápidamente pero mi cabeza solo pensaba en ese pelinegro, se encontraba sentado al lado de Taehyung, no los veía hablar como normalmente lo hacian. De hecho llegué a pensar que tal vez estaban enojados, pero esa idea se desmoronó cuando Taehyung llegó a la casa el día anterior y se había llevado a Jungkook. ¿Por qué? Aún no lo sabía.
De lo único que estaba enterado es que Jungkook tenía un nuevo trabajo, tampoco sabía dónde ya que sus padres habían sido demasiados meticulosos al respecto y al preguntarle a Tae-Yul cambiaba de tema inmediatamente. Dánae tampoco estaba enterada sobre ello, cuando le pregunté había actuado como si fuera la primera vez en escuchar aquello.
Suspiré frustrado y quise poner atención en la actividad que el libro indicaba, leí y leí y siendo honesto no lo comprendía.
Cuando terminaron las primeras clases todos salieron, incluido Jungkook, miré a mi lado pero ese pelinegro no estaba ahí, estás dos semanas habían sido una tortura para mí ya que Jungkook me ignoraba de una forma no cruel, pero lo hacía ver qué en realidad le importaba pasar tiempo conmigo y a la vez como si no le importara.
Habíamos salido en dos ocasiones está semana, y a pasar de haberla pasado como al principio, al otro día parecía que Jungkook no vivía en esa casa. Después del colegio se iba por otro lado y llegaba a tantas horas de la noche, llegando se encerraba en el estudio de su padre o iba directo a su habitación, sin merendar y por supuesto sin desearme buenas noches.
Se que a lo mejor estaba exagerando, pero debo admitir que su presencia se había vuelto necesaria para mí, había jugado con mi corazón de una manera horrible, si efectivamente estaba exagerando. suspiré al verlo entrar por la puerta, traía su charola de comida, tomó asiento a mi lado y comenzó a almorzar.

-¿Estás aquí?- pregunté, se que había sido algo estúpido.

-Supongo que si.- dijo con simpleza mientras tomaba de su leche de plátano. Saque mi lonchera y la abrí para sacar mi emparedado, estaba tan acostumbrado a ellos que me eran necesarios todos los días, exactamente como a este hombre.- ¿Gustas?

Estiró la mano para entregarme una manzana, la recibí y la puse en mi lonchera, quizá la comeria al terminar.

-¿Me podrías decir dónde trabajas?- pregunté directamente, Tae-Yul me había aconsejado que no preguntará ya que era la intimidad de Jungkook, pero no me interesaba, este pelinegro queria casarse conmigo, pues tendría que decirme todo.- Quiero saber y me dirás ahora.

-Estoy en capacitación con el Abogado Kim Namjoon, pronto será el examen de admisión para la universidad, asi que quiero estar preparado.- Asentí no muy convencido.

-¿Quién es ese Abogado Namjoon?- Jungkook suspiro y me quitó una bolsa que traía en mi lonchera, contenía tres galletas de chocolate que obviamente tenía planeado dárselas.

🍪GALLETAS DE CHOCOLATE🍪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora