Sempiterno [König & OC]

Capítulo 20

Narra Emily

Él soltó un suspiro y se acomodo aún mejor, ambos estábamos en el sofá y agradezco que este sea los suficientemente grande para que los dos estemos aquí sin problema. Cerré mis ojos quedándome dormida nuevamente escuchando su respiración lenta y los latidos de su corazón.

Los días pasaban, él se había calmado un poco, las pesadillas eran constantes, siempre despertaba en la madrugada y tenía que decirle que todo estaba bien.

— Mi primera misión así fue - lo miré - regrese y mis pesadillas se basaban en el tiempo que dure fuera y cuando regrese a casa... Mis padres no me dieron un apoyo.

Él alzó una ceja.

— Los dos eran militares, con un carácter horrible, me tuvieron solamente porque tenían que tener un hijo - respondí desviando la mirada - el único que estuvo ahí para mí fue Simon.

Su mandíbula se tenso.

— Aunque no lo creas, él es muy diferente en la intimidad - ladee la cabeza un poco - y no me refiero a eso... Sino que, estando solos, es un humano con sentimientos.

Solté un suspiro, recordé ese día, creó que fue el día en que comencé a tenerle cariño a Simón, el día en que se ganó mi corazón.

Años atrás

La misión había terminado pero las imágenes seguían atrapadas en mi mente, el sonido de los disparos y gritos parecía repetirse en un bucle interminable en mis oidos.
Habíamos regresado a la base hace unas horas pero en lugar de sentir alivio, me sentía vacía, abrumada. Todavía no me quitaba el equipo, sentía que si me quitaba el chaleco me quedaría más expuesta a todo.

Camine sola hacia un rincón del hangar, buscando un lugar vacío donde nadie pueda verme. Vi a Ghost apoyado en una pared, estaba fumando, tenía su pasamontañas levantado hasta la mitad de su nariz. Mis ojos estaban vidriosos, apreté mis puños enterrando mis uñas en mis palmas conteniendo las lágrimas. No quería mostrar debilidad, no después de lo que había sucedido la primera vez con mis padres.

Aunque trate de pasar desapercibida Ghost me vio, dejo caer su cigarrillo y camino hacia mi sin decir nada. Cuando se detuvo frente a mí, sus ojos me analizaron por completo, desvíe la mirada.

— No estás bien - dijo finalmente -

Alcé mi mirada sorprendida por su tono suave, no era la primera vez que notaba que algo andaba mal pero sí era la primera vez que parecía importarle.

— Estoy bien - respondí aunque mi voz me delataba - solo necesito un momento.

Simon no respondió nada, en lugar de insistir solamente se acercó más, su presencia era imponente, pero también tenía algo reconfortante en este momento. No podía evitar pensar que había aprendido a ser así, a leer a las personas sin presionarlas, porque sabía lo que era romperse.

— No tienes que fingir conmigo - me respondió con calma - todos tuvimos un día difícil allá afuera.

Sus palabras hicieron que mis lágrimas cayeran, me sentí estúpida por no poder contenerlas, pero antes de que pudiera dar un paso atrás, Ghost hizo algo que no esperaba, me tomo por los hombros y me atrajo a él, abrazándome.
Era un gesto torpe, casi incómodo, pero fue más de lo que nadie me había ofrecido desde que me uni al servicio.

Me quedé inmóvil por un momento, demasiado sorprendida para reaccionar. No sabía cómo responder a esta cercania, especialmente con alguien como Ghost. Pero al sentir que la presión en mi hombros se relajaba y él estaba por soltarme, levante mis manos y correspondi al abrazo, aferrándome a su chaqueta con fuerza.