Percico de Locos

Parte 27

Nico entró a la regadera dejando que el agua lo terminara de relajar, miró el collar que Anteros le había regalado, la rosa estaba medio abierta ya, faltaban unos tres pétalos por abrirse, eso lo alegró un poco, estaban cerca de completar su misión, aunque también significaba que sus días junto a Percy terminarían, lo cuál no le gustaba tanto

¿Al terminar su misión volverían a sus cuerpos? Nico esperaba que si, estar en el cuerpo de Percy era increíble, pero extrañaba sentirse él mismo

Suspiró saliendo del baño, se puso una bata del hotel que era color rosa mexicano y regresó a la habitación

— ¡Nico por los dioses! Vístete—Nico miró a Percy adquirir un par de tonos rosados en las mejillas

— Oh vamos Jackson, este es tu cuerpo, tú lo conocer mejor que yo—el semidios iba a argumentar algo, pero nada salió de su boca

— ¡Bien! Haz lo que quieras—se cruzó de brazos antes de irse a bañar él también.

Nico se sentó en la cams y suspiró mirando alrededor, el lugar era precioso, había dos camas individuales con cobijas delgadas de diversos colores, estaban bordadas, supuso que a mano, con flores y un paisaje que asemejaba la playa, la pared de detrás de las camas era rosa y las demás de color crema, el suelo era de madera y había una enorme ventana que daba al mar. Agradeció la inexistencia de plantas en la habitación, solo había una lámpara de alebrije en el buro en medio de las camas y una televisión frente a ellas

Caminó hacia la ventana y vio el mar, era impresionante lo clara que era el agua, tenía distintos tonos de verde y azul, la arena era blanca y había algunos turistas caminando o disfrutando del agua

— Podemos ir al mar después de descansar—su propia voz lo asustó un poco, miró a Percy que se notaba ansioso por bajar al mar y pasar la tarde

— Primero debemos hablar—se sentó de nuevo en la cama.

Percy había decidido tomar la misma decisión y salir del baño en bata, se sentó frente a él

— Tú también lo has notado ¿no? —Percy suspiró y asintió con la cabeza

— No nos hemos encontrado con monstruos, dos en una misión son muy pocos—Nico asintió con la cabeza

— Además... Dicen que no olemos como semidioses—Percy asintió y suspiraron—  ¿será por el cambio de cuerpo? ¿o tiene algo que ver con la misión?

— No sé, la misión en si es extraña, solo somos dos, las misiones son de tres

— Aquí hay gato encerrado—Percy no pudo sino estar de acuerdo, las cosas eran demasiado raras

— Hoy descansemos y disfrutemos del lugar, ya mañana regresaremos a modo misión—Nico lo miró antes de sonreír y asentir con la cabeza, de cualquier manera no tenían fecha límite para la misión, lo cual ya por sí solo era muy raro, pero lo usarían a su favor en aquella ocasión.