Parte 6

49 7 0
                                    

— No puedo creer que tengamos que hacer esto—Percy y Nico llevaban cerca de dos horas fuera del campamento, Nico no sabía que iba a hacer estando más de una semana con Percy, es más ¡ni siquiera sabían cuanto tiempo iba a durar su misión!

.

**Flashback**

Ambos semidioses fueron llevados a la casa grande junto al dios, este miraba a Nico con una tierna sonrisa, Percy no sabía porque aquello le molestaba tanto

— Bien Anteros ¿Qué debemos buscar?—Nico fue el primero en hablar, tenía una relación con aquel dios, el contrario a su hermano Cupido no lo había tratado mal, pero siendo él el dios del amor correspondido no podía recordar las millones de veces que le había rezado para que Percy sintiera algo por él. Aquellos ruegos habían terminado después del Tártaro cuando se dio cuenta de que ningún dios le iba a ayudar. Había noches incluso que había considerado rezarle a Cupido para que lo flechara con una de sus flechas de plomo para así olvidar a Percy.

— Mi arco y mis flechas han sido robadas—ambos semidioses soltaron un sonoro suspiro, eso no podía estar pasando ¿más cosas robadas? Percy solo deseaba que aquella vez eso no iniciara una nueva oleada de eventos desafortunados

— Imagino que no tienes idea de quién lo hizo—el dios negó con la cabeza.

Percy había notado varias cosas en el dios que antes en la obscuridad de la noche y el bosque no había podido, primero. Sus alas no eran de un ángel, eran más de mariposa lo que lo hacía ver como una de las películas de barbie que su madre le ponía a Stelle en algunas ocasiones.

Segundo, el dios era muy amable con Nico, pero a él no lo trataba del todo bien, aunque tampoco era grosero

Tercero, no recordaba a quién le recordaba ese dios.

— Está bien, supongo que no queda de otra—Nico se levantó y salió de ahí, Anteros suspiró y lo siguió, Percy sintió de nuevo una opresión en el pecho

— Nico, no creas que he olvidado tus ruegos—lo detuvo el dios— eres la persona que más me ha rezado y de los pocos semidioses que recuerdan mi existencia, por favor confía en mi—tomó la mano del chico y le sonrió

— Anteros... yo entiendo que no hayas podido hacer nada por mi, hay algunas cosas que no se pueden cambiar

— Y otras que pueden mejorar, Nico confía en mí una última vez y no te defraudaré—el menor miró al dios y asintió con la cabeza

— Lo haré

— ¡Bien!—sacó un collar de su bolsillo y se lo puso en el cuello. El collar era un capullo de rosa— irá floreciendo conforme te acerques a tu objetivo, te ayudará a saber que tan cerca están—y dicho eso se separó— cierra los ojos—Nico de inmediato hizo caso antes de sentir una ligera brisa y un calor en su rostro, cuando abrió los ojos frente a él ya no había nadie

**Fin del Flashback**

— ¿Cómo viajaremos?—Percy miraba la ciudad sin saber a donde estaban yendo, o que deberían hacer

— Supongo que la primera parada será Pensilvania, espero llegar ahí antes de que anochezca, llamaré a mi chofer—sacó su teléfono, pero pronto notó que ese no era de hecho su cel, maldijo en griego antiguo antes de ver a Percy— saca mi celular Jackson

— Ahmmm ¿tu qué?—Nico sintió un tic en su ceja

— ¡¿No lo trajiste?!—el pelinegro negó rápido con la cabeza

— ¡No sabía que tenías!—el menor soltó un suspiro antes de seguir caminando

— Esta misión será más larga de lo que pensaba—se quejó

Percico de LocosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora