Demon Hunters

T1E18 Arachne-X

En una sala llena de herramientas y tecnología avanzada, los cazadores trabajaban sin descanso en la reparación y mejora de Arachne-X, la araña mecánica que había sido clave en la batalla reciente. Chispas volaban mientras ajustaban cables, reforzaban su armadura y optimizaban sus sistemas de combate.

Luna, observando el progreso, se acercó a la araña. Con una suave sonrisa, acarició su cabeza metálica, admirando el trabajo que había hecho. "Hiciste un buen trabajo, pequeña," murmuró con afecto. La araña, casi como si comprendiera, emitió un suave zumbido de activación, sus ojos luminosos parpadearon levemente.

Jack Wolf y David, junto a otros cazadores y Guardianes de Hierro, discutían mejoras estratégicas para enfrentar la creciente amenaza demoníaca. Sabían que el tiempo corría en su contra.

"Si logramos reforzar su sistema defensivo, Arachne-X podrá aguantar más tiempo en el campo de batalla," dijo uno de los ingenieros, mientras ajustaba los mecanismos de las patas de la araña.

Luna se unió a la conversación. "Esta vez no podemos subestimar a los demonios. Arachne-X es fuerte, pero también necesitamos estar listos nosotros."

De repente, el sonido ensordecedor de una alarma de peligro rompió la atmósfera tensa del taller. Las luces rojas parpadearon mientras una voz robótica anunciaba: "Alerta máxima. El demonio jefe ha sido detectado en la ciudad. Todas las unidades, prepárense para el combate."

Los cazadores se miraron entre sí, la preocupación reflejada en sus rostros. El líder demoníaco, Malakar, había llegado. La amenaza que habían temido durante tanto tiempo estaba ahora en sus puertas.

Jack fue el primero en reaccionar. "¡Todos a sus puestos! Este es el momento por el que hemos estado entrenando. ¡No dejaremos que domine la ciudad!" gritó, tomando su Bloodreaver y liderando a los cazadores fuera del taller.

Luna, con determinación, se preparó para el enfrentamiento. Sabía que este combate sería diferente a todos los anteriores. Miró una última vez a Arachne-X, ahora completamente operativa tras las mejoras. "Vamos, pequeña. Es hora de mostrarles de lo que somos capaces."

Mientras las tropas se movilizaban, la ciudad de Noctis temblaba bajo la sombra oscura de Malakar y su ejército de demonios. La batalla decisiva estaba a punto de comenzar.