Pluto: Tales Of The Stars Love

23-La verdad

Desde que supe la verdad, no podía dejar de sonreír y vivir en mi propia burbuja rosa. Me aferré a Metavee como esos recién casados. Eramos como los polos opuestos que se atraían entre sí. No hacíamos nada en todo el día excepto besarnos...

Ah. Parecía estar un poco preocupada. Pero qué podía hacer... No sabía cuánto duraría este precioso tiempo. Cuando pensé en esto, suspiré como un anciano cuyo pariente lo ha internado recientemente en un asilo de ancianos.

[Si tu relación con Metavee va bien, creo que será mejor que le digas la verdad.
Eres la que está en su memoria; ella no se enojará contigo. Confía en mí.]

Pang, que lo sabía todo, me aconsejo en una llamada VDO antes de que ella volara esa noche. Estuve a punto de decirle a Metavee la verdad muchas veces, pero todavía tenía demasiado miedo para hacer algún movimiento porque las cosas iban muy bien en ese momento.

Temía que decirle la verdad nos quitaría el precioso tiempo que nos quedaba.

¿Qué pasa si a Metavee no le gustaba que la hubieta engañado? Pelearíamos y ella me odiaría...

—Cada vez que sonríe, me quedo sin palabras.

[Caray. Déjala estresarse un poco. Eres demasiado cobarde. Esto no es propio se tí, la sinvergüenza. Creo que a May le sorprendería más que su primer amor de cachorro, que era tan travieso, ahora sea tan tímida.]

—Tienes una boca tan grande.

[Dile a ella. Confía en mí. Es mejor que ella lo sepa por otra persona.]

—¿Cómo quien?

[Aobe-Aum. Me dijiste que tu gemela recuerda que Metavee es su amante, ¿no?
Su memoria aún no está actualizada. ¿Qué pasa si quiere ver a su amante una vez que se sienta más fuerte? La verdad saldrá a la luz... Quizás ya hablaron por teléfono.]

—Loca. —Entré en pánico porque nunca había pensado en eso. —El teléfono de
Aum está conmigo.

[¿Ella no te lo ha pedido?]

—Le diré que se dañó en el accidente... No recuerda que no se lo llevó.

[Hay muchas maneras en que Aobe-Aum puede contactar a Metavee: ten cuidado. Eso es una bomba de tiempo. Antes de que suene... debes confesar para que se reduzca tu castigo.]

—¿Me odiará?

[¿Y qué si lo hace? Simplemente besate con ella para reconciliarte.]

—Sabes demasiado.

[Las marcas rojas en todo tu cuello que no pudiste ocultar cuando visitaste lo
dicen todo.]

—Tú...

Apresuradamente me toqué el cuello y busqué un espejo para comprobar que no había marcas rojas. Parecía que Metavee había mostrado una agresión más linda hacia mí últimamente. A ella le gusta dejarme marcas y decía que era ..

"Para que todos sepan que eres mía"

Cuando escuché su razón, no pude enojarme con ella.

Después de consultar a mi amiga, colgué y volví a la habitación especial para pacientes internados para estar con mi gemela. Aobe-Aum estaba de pie junto a la ventana, mirando sin pensar. Me aclaré la garganta para llamar su atención.

—Gemela.

—Ey. —Mi gemela menor, con quien me llevaba bien estos días, tenía una mirada triste. —Has vuelto tan pronto después de conseguir comida.

—Ah, olvidé que iba al 7/Eleven —Tenía la intención de ir a comprar jugo, pero Pang llamó, así que lo olvidé: —¿Tienes hambre? Iré ahora

—¿Puedo ir contigo?