Kara Zor-El, la heroína conocida como Supergirl, se enfrenta a la tragedia más grande de su vida: la muerte de Lena Luthor, su amada. Consumida por el dolor y la desesperación, Kara toma una decisión radical: alterar el tejido del espacio-tiempo par...
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"Cuando la oscuridad me acecha, tu amor es el faro que marca el caminó a casa" 🌹🌹🌹
POV Kara Danvers
Un presagio oscuro recorrió cada palmo de mi piel. El recuerdo de aquella pesadilla regresó a mí con una fuerza brutal, solo que esta vez era demasiado real.
El sudor frío empapaba mi cuerpo, aún aturdida por el incertidumbre. Era como si flotara fuera de mí misma, ajena a todo salvo al dolor punzante y al miedo que me oprimía el pecho. ¿Qué sería de mí si volviera a perder a Lena? La idea era insoportable, un abismo oscuro que amenazaba con tragarme. Pero también estaba el instinto de supervivencia, la lucha por seguir viviendo. ¿Por qué el destino se ensañaba conmigo justo cuando había encontrado un rayo de esperanza? Las lágrimas resbalaban silenciosamente por mis mejillas, calientes y saladas, como una herida abierta.
Estaba en un galpón abandonado, el aire viciado y cargado de polvo me molestaba. Las cadenas, frías y húmedas, se incrustaban en mis muñecas, dejando surcos sangrantes. Cada movimiento era una agonía, cada respiración un quejido ahogado. La oscuridad era tan espesa que parecía tangible, envolviéndome, lamiendome la piel. ¿Cuánto tiempo había pasado? ¿Dónde estaba? Las preguntas se arremolinaban en mi mente, atormentándome.
Las luces brillantes y cegadoras se encendieron haciendo que un dolor penetrante entrará por mis retinas. Sacándome de mis pensamientos.
- "¡Aaaah!" - el látigo corto el aire y se impacto en mi espalda. Dios jadee ante el dolor siniestro. Un dolor demasiado familiar, no supe en qué punto de mi tortura me había desmayado.
Una risa oscura lleno el espació estallando como un eco en las paredes.
- Veo que despertaste - Dijo el Dominador con aires malvados- empezaba a aburrirme y el juego anterior fue bastante divertido.
- Eres un maldito despreciable.- desde que llegué en la madrugada me había golpeado infinidades de beses con sus látigo de muerte. La piel de mi espalda y mis hombros se sienta en carne viva.
- ¡Oh! Dijo la que arranca cabezas - comentó con desden y sorna al mismo tiempo, disfrutando de su momento como juez y ejecutor de mi castigo.
Levanté la cara pará verle. La luz era brillante y aún dolía en mis pupilas. La Kriptonita seguía demasiado cerca de mi, mi cuerpo estaba debilitado al punto de hacer que respirar resultará un esfuerzo extenuante.
- ¿Que demonios quieres? - "matarme por los visto".
- ¿En serio no tienes idea? - inquirio mostrando los dientes - Sabes la otra Kara por lo menos era divertida, tu fuiste tan facil de atrapar, eres una burla.
