La luz de la mañana se filtraba por las cortinas de la sala. El sol naciente arrojaba un resplandor cálido que iluminaba suavemente la habitación, bañando el caos de la noche anterior con una luz que parecía mucho más pacífica de lo que se sentía.
Xiao fue el primero en abrir los ojos. Su cabeza palpitaba con el inconfundible dolor de una resaca, y al levantar ligeramente la cabeza, vio a Aether. El rubio estaba dormido en el otro sofá, envuelto en una manta que no recordaba haber visto antes. Xiao sonrió instintivamente al verlo así, tan tranquilo y sereno. Pero, un segundo después, su mente procesó la imagen, y sus ojos se abrieron de golpe.
—¿Aether? —murmuró para sí mismo, parpadeando atónito. ¿Qué hacía Aether allí? ¿Qué había hecho la noche anterior para terminar en esa casa? Su mente todavía estaba nublada por los efectos del alcohol, pero sabía que algo había pasado.
Se frotó las sienes con las manos, tratando de aliviar el dolor, y poco a poco los recuerdos empezaron a volver. La fiesta, el alcohol, la conversación con Venti, la llamada a Aether... y luego la imagen de él desmayándose en la puerta de su casa.
—Mierda, —susurró, el peso de la vergüenza cayendo sobre él como un torrente. Recordaba la preocupación en el rostro de Aether, y lo mucho que odiaba que lo hubiera visto en ese estado.
Justo en ese momento, Aether comenzó a moverse. Su respiración se hizo más profunda, y sus párpados temblaron antes de abrirse lentamente. Xiao sintió cómo la ansiedad lo invadía, su corazón comenzó a latir con fuerza en su pecho. ¿Qué le iba a decir? ¿Qué podía decirle a la persona que todavía ocupaba su mente, incluso después de todo lo que había pasado?
Aether abrió los ojos, parpadeando al principio para ajustarse a la luz. Vio a Xiao, que lo miraba con una mezcla de nerviosismo y algo más profundo. Xiao intentó sonreír, pero le salió un gesto tenso.
—Hola, —dijo Aether con voz ronca por el sueño, mientras se incorporaba un poco. La incomodidad era palpable, pero también había algo en su expresión que sugería que no tenía intención de hacer de aquello un drama.
—Hola, —respondió Xiao, su voz más baja de lo normal. No podía apartar la mirada de Aether, y eso solo hacía que su incomodidad aumentara. ¿Cómo había llegado a esto? Su cerebro seguía trabajando a toda velocidad, intentando encontrar una excusa, algo que pudiera aliviar la tensión.
—Anoche... —empezó Xiao, sin saber cómo continuar—. Creo que hice el ridículo, ¿verdad? —Intentó sonreír de nuevo, pero su expresión era torpe, insegura.
Aether parpadeó un par de veces, estirándose antes de contestar. —Bueno, llegaste a casa de alguien borracho, —respondió, intentando mantener su tono neutral—. Pero ya pasó. Estabas mal y... bueno, no te iba a dejar tirado en la puerta.
Xiao tragó saliva, sintiendo la presión de las palabras que quería decir pero que no se atrevía a pronunciar. Lo miraba, viendo cómo Aether se pasaba la mano por el cabello desordenado, con ese gesto despreocupado que siempre había encontrado adorable.
—Gracias por no dejarme ahí, —dijo finalmente, con voz baja—. No quería que... —Se detuvo, sin saber cómo continuar. No quería que Aether pensara que seguía siendo un desastre, aunque en ese momento sentía que lo era más que nunca.
Aether lo miró con detenimiento, viendo el conflicto en los ojos de Xiao. Sabía que había más detrás de sus palabras, pero no estaba seguro de si quería escucharlas. Habían pasado muchas cosas, y ahora tenía a Scaramouche en su vida. Pero, aunque Xiao seguía siendo parte de su pasado, no podía negar que algo de él aún le importaba, por más que intentara ignorarlo.
—Xiao, —dijo finalmente, su voz más seria—. No entiendo por qué sigues buscándome. ¿Por qué viniste anoche?
Xiao bajó la mirada, sintiendo que su corazón se aceleraba. No había una respuesta fácil. ¿Cómo explicarle a Aether que, por mucho que intentara seguir adelante, nunca lo había olvidado? Que seguía atormentado por la idea de verlo con otra persona, y que no soportaba saber que alguien más estaba ocupando el lugar que él había dejado.
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Golden Hour[Scaraether][Xiaoaether]
FanfictionAether es un prodigio del ballet en el Reino Unido, conocido por su delicada apariencia y su talento deslumbrante. Desde los 4 años, su madre, una exitosa empresaria de productos de belleza, lo obliga a vivir bajo una estricta fachada: hacer pasar a...