VIENES A MÍ
~Franchessco~
El auto que tengo en casa de Nia va ha toda velocidad por la ciudad rumbo al castillo de Tomasso, qué será pronto de Alessandro y mío. Ese maldito ya no existirá.
La velocidad del auto me hace sentirme en la película de rápidos y furiosos.
El aire frio golpea mi cara tan fuerte que siento que habré pequeñas heridas.
Ese maldito pagara toda mi frustración. Por su culpa me dejo Nia, por su culpa murieron mis madres, perdí mi infancia completa, mi libertad. No permitiré que siga quitándome más cosas.
Esta a nada de amanecer. Me la pase toda la noche en la casa de Evania. No quería salir de ahí. Su presencia sigue en esa casa, su olor... La extraño y no han pasado ni veinticuatro horas que estoy lejos de ella. Ni siquiera en los días que no podía verla la extrañaba tanto.
En cuanto acabe con ese mal nacido iré por mi mujer. Y la tendré junto a mí para siempre, sin nadie que nos impida estar juntos y por fin tener la paz que ambos necesitamos.
Busque el celular que tenia en la casa de Evania, para anunciar que hoy va arder la puta troya.
—Hoy.
—Señor aun no tenemos a todos los guardias de nuestro lado —replicó con susto Fiore.
—Levanten a mi hermano —me dio igual lo que dijo— dígale que voy en camino a acabar con todos los que no estén dispuestos a servirnos. Protejan a Hanna.
—Como diga —no le quedo de otra más que obedecer—. Que muera quien tenga que morir.
—Tengo un plan para eliminar una gran cantidad de hombres de un tirón.
—Dígame.
—Veinte minutos despues de alertar a mi hermano, dile a Tomasso que voy en camino a matarlo. Enviará a sus hombres mas fieles a la entrada y ahí eliminaré una gran parte y solo quedarán unos pocos. Ninguno de nuestros hombres debe de estar en esa línea.
—Eso es muy arriesgado señor.
—Yo sé lo que hago. Apresúrate.
Colgué la llamada.
Mire la parte trasera del auto asegurándome que la bomba estuviera bien asegurada.
Exactamente en diez minutos estaré en la entrada y ahí explotara. Y el tiempo restante lo usaré para prepararme para entrar.
Todo tiene que acabar hoy. Tiene que.
No soporto más días bajo si yugo. No voy a soportar más de un día sin mi Nini.
Ella tiene que volver conmigo. Ella es mía y yo soy suyo. Nos pertenecemos el uno al otro. No podemos estar separados. Ella no puede estar con nadie más que no sea yo, y yo no soy capaz de pensar siquiera estar con alguien más y perderla.
Desde el primer instante que la vi supe que estaría junto a ella toda mi vida.
Tres años atrás...
—¿En que momento sirven el postre?
—Ya cállate la puta boca, Franchessco. Si no querías venir te hubieras quedado encerrado en el maldito castillo.
Mi hermano es la persona más amargada que pueda existir en este planeta.
—Yo con mucho gusto me hubiera quedado encerrado, pero nuestro progenitor se empeño en traerme.
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El Magnate -[Si No Puedes Vencer El Mal, Vuélvete El Mal]©
Random"¿Qué oculta la mujer a la que le salvaste la vida? ¿Qué secreto esconde detrás de su mirada asesina?" Hela Klein, una belleza letal, y Alessandro Lombardo, el próximo jefe de la mafia dorada. Cruzan sus caminos después de tantos años, años donde su...