Desde que ella apareció, algo en el ambiente cambió. Tal vez era la forma en que Mi-Suk hablaba, con esa mezcla de nerviosismo y naturalidad que me hacía sonreír sin querer. O tal vez eran sus ojos, siempre brillando un poco más cuando discutíamos sobre cosas que a los demás parecían insignificantes, pero que para nosotros importaban. Como hoy, por ejemplo. Ahí estábamos, compartiendo el almuerzo. En mi lugar favorito sin ruidos ni siguiera sospechas, en las escaleras de la cancha de baloncesto. Mi-Suk estaba concentrada en su comida, y yo... bueno, no podía evitar observarla.
"Entonces... ¿Qué te pareció el cómic?", le pregunté, intentando disimular el nudo en mi estómago. No entendía por qué de repente todo era tan complicado, pero tal vez es porque es mi primera vez hablar con alguien y formas una amistad. Solo era Mi-Suk, mi compañera de clase. Pero cada día que pasaba, sentía que algo dentro de mí estaba cambiando, ¿admiración tal vez?.
Ella sonrió, esa sonrisa que hacía que mi pecho se apretara un poco, pero intentando disimular. "¡Me encantó! No puedo creer que no lo haya leído antes", respondió con entusiasmo. "El misterio, los personajes... ¡todo fue tan emocionante!".
La manera en que sus ojos brillaban al hablar, la pasión que ponía en cada palabra... ¿era normal sentirse así solo porque alguien te hablaba con entusiasmo? Quizás simplemente estaba impresionado por lo bien que conectábamos. Pero esa sensación extraña en mi pecho me seguía molestando.
¿Es solo admiración... o algo más?
Mientras ella continuaba hablando de sus teorías sobre el final del cómic, me quedé pensando en pequeños detalles: en cómo su flequillo le caía sobre los ojos, en la forma en que se mordía el labio cuando estaba concentrada. ¿Siempre había sido así? Nunca antes me había fijado tanto en alguien. Al menos, no de esta manera... pero ese cabello ¿me recuerda a alguien?.
"Ji-ho, ¿me estás escuchando?" La voz de Mi-Suk me sacó de mis pensamientos, haciéndome parpadear varias veces para volver a la realidad. Me di cuenta de que la había estado mirando sin decir nada durante varios segundos.
"Sí, claro", respondí rápidamente, rascándome la nuca con nerviosismo. "Perdón, estaba pensando en... bueno, en lo que dijiste."
Ella me miró con una ceja levantada, pero no dijo nada. Solo sonrió, como si supiera algo que yo no. Eso me puso aún más nervioso. Nos quedamos en silencio un momento. Yo jugueteaba con mi comida mientras Mi-Suk observaba las plantas e incluso sintiendo la brisa del viento. Todo parecía normal, pero no podía dejar de preguntarme... ¿Qué era lo que realmente sentía por ella?. pensaba mientras un aire fresco que soplaba suavemente, agitando el cabello de Mi-Suk de una manera que me distraía más de lo que quería admitir.
"¿Qué libro te encantaría leer?" me preguntó de repente Mi-Suk, con una curiosidad genuina que siempre me desarmaba un poco.
Me rasqué la cabeza, pensando. "Creo que uno de drama... algo que te haga sentir y pensar al mismo tiempo."
Ella sonrió y asintió, como si aprobara mi respuesta, mientras mordía un trozo de su almuerzo. Yo la observaba, sin decir nada, pero esa sonrisa suya me hacía sentir algo raro. Mientras hablábamos, Mi-Suk no paraba de reírse de las cosas torpes que hacía, como cuando casi dejé caer mi bebida al intentar abrirla y se le cayo a un compañero accidentalmente o cuando estaba con mi mamá y se nos arruino un pastel para papá y ella contándome como que estaba comiendo ramen con su papá y viendo una película y al estar riéndose de lo que papá hacia un fideo de ramen se le subió a la nariz y se rieron más.
Sus risas eran contagiosas, y aunque yo no solía reírme mucho, en ese momento me descubrí sonriendo e incluso soltando algunas risitas. Era extraño... nunca me reía así con nadie más. Estábamos en un momento cómodo, el silencio entre nosotros no era incómodo, y fue en uno de esos instantes cuando, sin pensar, levanté la mano y toqué un mechón de su cabello. Lo enrollé entre mis dedos por un segundo. Suave. Más suave de lo que esperaba.
ESTÁS LEYENDO
Lim Mi-Suk esconde un secreto
RomanceEn una nueva escuela, Lim Mi-Suk, una chica de quince años que guarda un secreto profundo, lucha por encontrar su lugar en un mundo que a menudo se siente hostil. Mientras intenta lidiar con su identidad y el miedo al rechazo, un encuentro inesperad...