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A Samantha le toca ayudar a su compañero Raul a subir sus calificaciones en la universidad, pero ¿quién diría que terminaría enamorándose de él? Lo que comenzó como una simple tutoría se convierte en noches de estudio llenas de risas.
...
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Samantha:
Lunes 10:00 a.m.
-Vi los estados de tu papá, Samantha -me dijo Pablo.
-¿Y qué? -lo miré.
-Andaban en el Akron y no me llevaron, órale pues. Pero el día que vaya a la playa tampoco los voy a llevar -se indignó.
-¿A poco y lloras, Pablo? Si no te invité fue porque salió de la nada. Ni siquiera teníamos boletos; Raúl fue el que hizo todo.
-Ah, o sea que ya también me cambiaste por Raúl. Lo peor de una traición es que nunca viene de un enemigo.
-¡Ya! -le pedí-. Además, tú te fuiste al rancho con tu abuelita y ni me dijiste.
-También no manches. Siempre que tú vas, parece que la nieta eres tú y no yo.
-Hay niveles -sonreí.
-Hola, people. Es "gente" por si no saben inglés -Tania entró al salón y se sentó frente a nosotros-. Oigan, vi los estados de tu papá, ¿andaban en el Akron?
-No manchen, ¿mi papá los tiene agregados en WhatsApp? -alcé una ceja.
-¡Claro! -miró a Pablo-. ¡Y tú! No nos invitaste al rancho.
-Sí, ya le reclamé por eso.
-Y yo le reclamé a Samantha por lo del estadio.
-Hay que superar esto, plis. Significa "por favor" por si no hablan inglés -bromeé.
-Bueno, okey. Significa "okey" por si no hablan inglés -Pablo siguió la broma, y rodamos los ojos.
-Descárgate Duolingo -le pedí.
-¿Y cómo te fue en el Akron? -me miraron.
-Bien, todos los jugadores estaban bien guapos, y ya cuando terminó, Raúl nos pasó a vestidores.
-¿Y te desvistió? -Pablo me interrumpió.
-No, wey. También iba mi papá y nos presentó a los jugadores de Chivas.
-¿Y?
-¿Y? -alcé una ceja.
-¿Y ya?
-Pues sí...
-Mmm, ni un "gracias" o un abrazo o un besito -me miró Tania.
-Pues no... solo a la hora de la despedida, abrazo y beso en la mejilla.
