Cap. 11 "No mires atras"

20 6 6
                                    

A petición y dedicado para: @FreenRuiz0390
Espero te guste.

Como siempre, ya saben, dejen comentarios, yo los leo y respondo.

-Entonces, ¿Cuándo piensas presentarnos a tu...?-
-Novia, mamá. Ya somos novias.-
-A tu novia.-
Estaba apenas iniciando la cena en casa de sus padres cuando la pregunta a quemarropa y sin aviso por parte de su madre, puso a su padre a moverse incómodamente en su silla, como si hubiese brasas ardiendo bajo su asiento. El juez Armstrong hizo una pausa con los cubiertos, cruzó los dedos colocando los codos sobre la mesa y miró atentamente a su hija, quien comenzó a tragar con dificultad dando un sorbo a su copa mientras buscaba las palabras correctas para usar en la mesa frente a sus padres.

-Hija, nos vamos a ahorrar los sermones: ¿Tres años jugando con Dan para terminar mofándote de forma tan monumental no solo de él sino de toda su familia y de paso tomarnos por sorpresa de esta manera?. Espero tengas una coartada convincente, señorita, y lo digo como tu padre.-
-¿Quieren la versión larga mientras cenamos, o la versión corta para poder cenar después?.-
-La que traigas para contarnos-

Becky tomó con dificultad el cubierto con su mano izquierda y continuó su cena. Les contó la verdad, omitiendo los detalles de sus encuentros con su "ahora novia" mientras su madre abría la boca sorprendida y emocionada una que otra vez, y su padre trataba de asimilar lo más serenamente posible cada parte de la loca situación.

-Los arrebatos en ti son prácticamente como los tréboles de cuatro hojas hija, y me intriga que hayas cometido uno de esta magnitud. Sobre todo por que el haber cambiado el rumbo de tu vida tan drásticamente era algo que, por lo mucho que te conocemos y por la seriedad del asunto, no cometerías a la ligera.-
-Lo sé papá. Por lo pronto nos estamos conociendo y después de "todos esos baches habituales de una relación, sabremos si es algo a largo plazo.-
-¿Cómo es que apenas iniciaron y ya tienen "pequeños baches" Rebecca?- Su madre cada vez más curiosa.
-pues, ya saben: un intento de asesinato con un auto bomba por aquí, un asesino en serie perfilado para acabar con una de nosotras por allá... "Baches".-

Su padre se atragantó y su madre fue a auxiliarlo mientras se ponía de pie.
-¿Entonces el atentado en Francia te tenía como objetivo a ti?, ¿Por qué rayos no nos dijiste nada?, ni tú ni la embajada ni el departamento! Alguien va a tener que explicarme esto.-
-Papá, es parte de una investigación, y yo lo pedí así para no preocuparlos.-
-Pues a partir de ahora pediré que te reasignen a otro caso.-
-Eso no sería muy neutral de su parte, juez Armstrong.-
-Estas pisando hielo delgado, comandante Armstrong.-
-¡Basta ambos!: Will, no puedes interferir en una investigación en la que probablemente te toque ser juez, y Becky, tampoco es muy neutral de tu parte dar a pensar que hay conflicto de intereses. Por tanto, yo sugiero que si te vas a mantener en el caso sea de forma indirecta, y sugiero también que tu padre tome en cuenta tu edad y tu preparación profesional y deje de intentar colocarte un biberón y arrullarte. Mientras ustedes dos se pelean como adolescentes, la única que va a sufrir si algo les ocurre a cualquiera de los dos es la que está mirándolos.-
Ambos guardaron silencio y retomaron la compostura, volviendo a sus asientos y respirando suavemente para apagar un poco las chispas encendidas por el roce del carácter de ambos.

-Solo espero que todo se resuelva pronto y por favor, cuanto antes.-
-Si mamá, créeme que estoy poniendo todo de mi parte, como en cada caso que me ha sido asignado.-
-Confío en que se cuidarán.-
Ambos asintieron y la cena pudo terminar en paz. Al despedirse de ellos, ambos la abrazaron fuerte acompañándola hasta la puerta.

En el trayecto a su departamento, Rebecca no se percató de que alguien la seguía. Por un momento lo imagino, pero la motocicleta se siguió de largo echando abajo su ataque de paranoia, además, el casco evitaba reconocer al piloto. Subió la escalera, dando las buenas noches al dependiente detrás del mostrador de la recepción, quien la saludó y no pudo evitar sorprenderse al ver la muñequera en su izquierda.

Tras sus huellas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora