—¿Hay algún problema Oscar?— preguntó Logan contrariado.
—Si, que vamos a caballo— respondió molesto Oscar.
—Ajá, ¿y?— preguntó Mick mientras Oscar fulminaba a Lando con la mirada, y al notarlo todos se volvieron hacia el británico.
—Oh... no hay problema, llevé clases de equitación... cuando tenía 9 años...— respondió bajando cada vez más el tono de su voz, perdiendo confianza, tenía mucho sin montar a caballo y sin duda estaba nervioso.
Oscar negó con la cabeza cruzándose de brazos.
—¡Fantástico Lando! Yo te puedo ayudar, mi mamá y yo damos clases de equitación y cabalgatas para los turistas en el rancho, así que no será problema, yo te cuido— respondió Mick con gusto tranquilizando al británico.
—Gracias Mick, creo que puedo hacerlo— sonrió Lando mientras acomodaba su tejana.
—A alguien le empieza a gustar usar sombrero— dijo complacido Logan.
—Es lindo, y hay que cubrirnos del sol— respondió sonriente Lando mientras se dirigían todos hacia los establos.
Ya ahí Oscar acomodaba a los caballos para sus amigos cuando Mick sugirió:
—Sabes Oscar, creo que Sally deberia llevar a Lando, es de carácter más apacible y será más fácil en lo que vuelve a acostumbrarse.
—Tienes razón Mick, ciudadano, vas con Sally— dijo Oscar mostrándole a Lando una bella yegua alazana cuya mirada denotaba mucha ternura, y aceptó complacido.
Los cinco amigos se montaron en sus respectivos caballos y partieron hacia el lago siendo dirigidos por Oscar y Logan, Mick iba junto a Lando al pendiente de cualquier situación y Pato hacía trucos con Henry, el caballo palomino a quien consideraba un viejo amigo, en ocasiones yendo a toda velocidad y en otras al ritmo de sus amigos.
El paisaje era bellísimo y Lando disfrutaba de ese paseo, la vegetación cubría el lugar, el aire puro llenaba sus pulmones y aunque en ocasiones tambaleaba un poco o se sobresaltaba cuando parecía que Sally tomaba más velocidad, Mick le indicaba como calmarla y como recuperar el equilibrio. Agradecía tener un buen maestro a su lado.
Alrededor de media hora después por fin llegaban al ansiado destino cruzando un puente que atravesaba parte del lago. Lando había quedado maravillado con la belleza natural de aquel sitio, entre pinos y nogales, el agua cristalina que parecía un espejo, una ligera brisa fresca y los colores de los árboles que indicaban que pronto llegaría el otoño. No podía pedir más.
Afortunadamente había llevado su cámara, por lo que al descender de Sally se dedicó a tomar algunas fotografías del hermoso lugar apartándose un poco del grupo.
El resto de los chicos igualmente descendieron de sus caballos y los situaron en el área de descanso con algo de comida y agua, mientras ellos buscaban el sitio ideal para pasar la tarde.
—Es aún más bello de lo que lo recordaba— habló Logan observando el lugar —fue una excelente idea venir.
—Y el camino no ha estado nada mal, incluso Lando estuvo muy cómodo y lo noté disfrutándolo. Oscar, creo que debes darle una segunda oportunidad a tu primo, se ve que realmente se está esforzando por disfrutar su estadía y ayudar— le comentó Mick con total sinceridad.
—Es cierto Oscar, además es un chico simpático— dijo Pato.
—Cásate con él pues wey— le respondió Oscar, y Patricio se limitó a reírse.
Los amigos anduvieron caminando a la orilla del lago y Lando se les unió, contemplaron el bello paisaje y la plática entre los cinco surgía con facilidad.
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Llévame Contigo 🤎
FanfictionAU Oscar es un joven viviendo una vida sencilla junto a sus padres en un pueblo rural al sur de Estados Unidos. Podría decirse que tenía la vida perfecta, tranquila, llena de amistad y amor. Pero pronto llegaría su primo británico Lando a complicarl...