Querido Andy:
No tengo demasiadas fuerzas para escribir esto, las enfermeras no querían pero era mi deber... Casi no puedo hablar, realmente creo que mientras estoy escribiendo esto es la primera vez en casi un mes que no estoy tan drogado.
Necesitaba decirte todo lo que te amo, y darte las gracias por todos esos momentos...
Creo que lo que más me gustaban eran las discusiones ya que siempre acabábamos igual, llámame viejo pervertido, pero amaba realmente verte rojo, como fruncías el ceño y como te cruzabas de brazos.
Gracias por haberme ayudado al criar a nuestra hija, porque es nuestra hija, te quiere muchísimo, y no es por nada, pero hasta creo que te quiere más que a mi, hahaha.
Lo único que te pido es que no enseñes esta carta a nadie.
En un primer momento, quiero hablarte de nuestra pequeña familia, empezando por Ruby.
Ella es la mejor hija que podríamos haber tenido, lista, guapa, educada, decidida... Me da mucha pena que se separara de su marido. Siempre ha sido mi todo junto a ti. Creo que hicimos un buen trabajo. No le pudimos dar todo lo que quiso, pero le pudimos dar unos estudios, y ver que hace lo que le gusta me hace muy feliz. Nunca quise que se fuera de casa, solo tenía 19 años cuando se fue a Washington para estudiar, pero no me quedaba otro remedio... Ahora esta feliz, estando con sus dos no tan pequeños niños...
Mark... Mark es tan guapo, no es por ser arrogante pero es idéntico a mi, hahaha, y pensar que hace nada lo tuve en brazos por primera vez y acaba de terminar de estudiar música, como hice yo... No me creo que ya tenga 22. Odié ver como me perdí los 4 primeros años de su vida, pero cuando volvieron a Nueva York estaba siempre en casa jugando, me hacía muy feliz escuchar salir la palabra abuelo de sus labios, cuando era joven nunca pensé que lo oiría.
Y luego llegó el pequeño John, (no es por nada, pero hay más de un millón de nombres en este mundo y la niña eligió los nuestros para llamarles hahaha) que ya es todo un hombrecito, tiene toda una vida por delante con tan solo 17 años, creo que para mi, era mi favorito, pero tu silencio, el cada vez que venia a vernos no me quería dejar, siempre se agarraba de la puerta para que sus padres no se lo llevaran de casa, amaba que hiciera eso ya que luego se quedaba a dormir y por la noche veíamos películas los tres juntos mientras cenábamos comida basura. Y ahora está apunto de entrar en la universidad y yo sin poder ver ni siquiera su graduación del instituto... pero siempre estaré ahí con el.
Por último, al más importante, mi vida entera, creo que si fuera la situación al revés, me tiraría por la azotea de algún edificio porque no podría vivir sin ti. Andy, eres mi vida entera, te amo más que a nadie, mientras ya estoy escribiendo esto, tu estas tumbado en ese sillón, que se ve tan incomodo, solo porque quieres estar conmigo todo el tiempo posible, tienes ya 77 años, no estás para estas cosas, pero no me quieres hacer caso, ni a la niña, eres un viejo cabezota, no me merezco que hagas todo esto por mi. Gracias a ti he tenido la mejor familia que nunca hubiera podido desear, gracias por haber estado todo este tiempo a mi lado, gracias por cuidarme, gracias por soportarme, y esto último sobre todo, hahaha y gracias por amarme tanto como yo a ti, por no decir más. No te he recompensado lo suficiente por haber estado ahí siempre. Y me arrepiento en que mi cuerpo sea tan estúpido como para que no soporte más mi edad, y eso que soy más joven que tu, eso es por la carne, todo es culpa de la carne, hahaha. Andy te amo, no lo olvides. Eres mi todo.
Te amo,
Joe.