Afrodisíaco | T.R

33 4 2
                                    

(Última parte)

(Su perspectiva)

------ ⋆★⋆ ------

El frío habitual de la habitación me recibió al abrir los ojos. La piedra gris del techo parecía burlarse de mi constante lucha por el control. Cerré los ojos por un momento, permitiéndome un respiro antes de enfrentar el día. Pero los recuerdos insistieron en regresar. La sensación de su piel, el sonido de su voz al susurrar mi nombre... T/n. Esa maldita chica.

Suspiré profundamente y me levanté de la cama. No era momento de permitir que pensamientos irracionales me distrajeran. Caminé hacia el baño, dejando que el agua fría despejara mi mente. Cada gota parecía arrastrar la intensidad de los eventos de la noche pasada, pero su imagen permanecía, como una marca imborrable. Después de vestirme, salí al dormitorio.

La sala común estaba vacía, lo que no era sorpresa después de la fiesta. Los estudiantes, con sus prioridades patéticamente simples, aún estaban en sus camas, recuperándose. Por un momento, me pregunté qué hacía T/n ahora. ¿Pensaba en lo ocurrido? ¿O lo había descartado como una simple distracción? Sacudí la cabeza, molesto conmigo mismo por siquiera considerarlo.

Salí al pasillo, caminando sin rumbo fijo, permitiendo que el eco de mis pasos llenara el silencio. Fue entonces cuando lo vi: Mattheo. Era casi ridículo encontrarlo despierto a esa hora, especialmente con un cigarrillo entre los dedos.

"¿Fumando tan temprano?" le pregunté.

Él dio un respingo al verme y apagó el cigarrillo. "No pude dormir" respondió, su tono despreocupado intentando disimular algo más.

"¿Por qué?" pregunté, aunque ya intuía la respuesta.

"Por tu comentario de anoche" admitió, sus ojos evitando los míos. "Dijiste que teníamos que hablar, y... bueno, ya sabes cómo eres."

Ahí estaba. La chispa de mi irritación se encendió nuevamente, alimentada por el recuerdo de su estupidez. Mi mirada se endureció, y Mattheo lo notó.

"¿Qué?" preguntó, claramente incómodo. "¿Qué hice ahora?"

"Oh, no finjas ser inocente" dije con sarcasmo. "Quizá... ¿poner afrodisíaco en mi bebida anoche?"

Su expresión pasó de la confusión a la realización, y luego, a la risa. Tuvo el descaro de reírse.

"¡Eso! Vamos, Tom, fue una broma inofensiva."

"¿Inofensiva?" le corté, mi tono mortalmente frío. "Te lo advierto, Mattheo. Si alguna vez vuelves a hacer algo semejante..."

"Relájate" me interrumpió, levantando las manos en señal de rendición. "Pero ¿a quién engañas? ¿Acaso no la pasaste bien con alguna chica?"

Mi silencio fue suficiente respuesta. Él arqueó una ceja, incrédulo. "Espera... ¿Es en serio? ¿Quién fue la valiente? ¿O la amenazada?"

"No fue amenazada" respondí con firmeza, cortando cualquier insinuación.

"Oh, esto se pone mejor. ¿Quién fue?" insistió con una sonrisa burlona.

Finalmente cedí, sabiendo que no iba a dejar el tema. "T/n."

El asombro en su rostro fue casi divertido. "¡¿T/n?! ¿Cómo demonios...?"

"Fue casualidad" le corté. "Y la única que podía ayudar."

Mattheo estalló en carcajadas. Mi paciencia estaba al borde. "Cállate ya, o te juro que soy capaz de lanzarte un Crucio..."

"Bien, bien. Solo digo que deberías agradecerme."

Slytherin boy's reactDonde viven las historias. Descúbrelo ahora