Mi sorpresa al ver al hermano de Naoki es evidente, pero él permanece impasible. Entre ambos hay una tensión palpable, como un cable a punto de romperse. Sin embargo, parece que toda esa tensión proviene de Naoki, mientras que que su hermano, sentado frente a nosotros, se muestra cómodo, casi despreocupado, con una copa de cava en la mano.
Naoki no pierde el tiempo y le habla sin rodeos:
—¿Qué quieres, Shinobu?
—Vaya, vaya... —responde, fingiendo estar ofendido—. ¿Esa es la forma de dirigirte a tu hermano mayor? El mismo que solo vela por tu seguridad y bienestar.
—No necesito tu protección —responde Naoki con un tono cortante.
Me doy cuenta de que, pese a haberme dicho que se pondría del lado de su hermano, las cosas no parecen ir en esa dirección. Y eso es un problema. De forma instintiva, le agarro la mano que descansa junto a la mía en el reposabrazos, dándole un pequeño apretón, una señal para que se calme. Shinobu nota el gesto y una sonrisa sutil, casi imperceptible, cruza su rostro. Una sonrisa que no me gusta nada.
—Así que es cierto... —dice, con esa sonrisa aún en los labios.
Naoki me devuelve el apretón, sujetando mi mano con más fuerza.
—Mi hermanito se ha enamorado. Pensaba que aquella vez solo querías molestar a nuestro padre —añade Shinobu con tono burlón.
La mirada de Naoki es fría como el acero.
—Y hablando de nuestro padre —continúa Shinobu, con una voz más seria—. ¿Has decidido ya en qué lado de la historia quieres estar?
Naoki guarda silencio por un instante, y yo tengo que contenerme el impulso de saltar sobre Shinobu. Si no fuera por Naoki, ya habríamos salido de aquí, pero me obligo a permanecer quieto.
Finalmente, Naoki rompe el silencio:
—¿Qué pasa con Yumi?
—Yumi hará lo que yo le diga. Igual que tú.
—Entonces, ¿por qué me preguntas? —responde Naoki con una ceja alzada.
Shinobu sonríe, pero hay un filo en su expresión.
—Porque quiero darte la oportunidad de elegir sabiamente. Cuando nos reunamos con el consejo, ellos también querrán escuchar tu opinión. Eres miembro del consejo, después de todo, y debe sonar creíble.
Naoki vuelve a quedarse en silencio unos segundos, mirando por la ventanilla de la aeronave, como si estuviera considerando sus palabras. Finalmente, dice:
—Estaré de tu parte, pero con una condición.
La sonrisa de Shinobu se ensancha, triunfante.
—Lo que quieras.
—Dejarás a Lazarus al margen de todo esto.
Shinobu aspira profundamente el aroma de su copa, cerrando los ojos como si estuviera disfrutando de un manjar exquisito.
—Podréis tener vuestro felices para siempre si así lo deseas, Naoki. Puedes tirarte a quien te dé la gana, no es asunto mío.
—Entonces déjalo marchar —insiste Naoki.
Antes de que pueda contenerme, intervengo:
—¿Qué? Ni hablar.
Shinobu deja escapar una risa breve y, para mi sorpresa, parece estar de acuerdo conmigo.
—Creo que estoy con tu hombre en esto, hermanito. Lo siento mucho, pero tu "trocito de tarta" está dentro de la ecuación.
Naoki frunce el ceño, mirándolo como si intentara leer algo en su mente que yo no alcanzo a comprender.
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Cyberboyd - SIEMPRE JUNTOS
RomanceLazarus Callahan es un agente de la SNC con muy mal carácter. Desde la pérdida de su madre a causa de una de las drogas más letales de la galaxia, se ha dedicado en cuerpo y alma a capturar a quienes trafican con ella. No tiene otra motivación ni ob...