—¡Ya voy mamá! —grito mientras termino de poner mi suéter para tomar mi mochila y bajar,puesto que, se me hacía tarde para ir al instituto. La hora de entrada era a las 8:45am y eran las 8:12 y Sant Patrick está a unos 20 minutos de aquí.
Bajo y entro a la cocina de inmediato y tomo un sorbo de jugo de fresa y llevé una de las tostadas de pan a mi boca, y me despedí de mi madre para luego salir y emprender el camino al instituto.
Iba en el auto de mi padre, ya que el mío estaba con el mecánico. Crucé un par de avenidas hasta llegar a mi destino, a parqué mi auto en el estacionamiento y entré al instituto. Miré mi reloj de muñeca y eran las 8:40am y el aula de química se encontraba al otro lado, así que por lo tanto si no corría, llegaba tarde.
Apresuré el paso caminé a mi casillero y saqué el libro de química, dejé algunas cosas y corrí como nunca antes, lo sé, soy muy perezosa. Estaba a sólo un pasillo para llegar a mi salón y poder ver la clases cuando de la nada apareció un chico con el cual casi choqué pero me detuve.
Me hice a un lado para seguir mi camino pero él se movió en mi misma dirección, así que opté por la otra, pero fue lo mismo y así sucedió dos veces más, y me estaba obstinando.
Su mano fue directamente a mí frente y me dio fuertemente con el dedo, causandome molestias.
—¡Oye, ¿que te pasa?, ¿eres idiota o que?! —dije enojada mientras me sobaba el lugar.
—Es lo que buscas por meterte en mi camino—escuché una voz arrogante y gruesa, me levanté de puntillas para enfrentarme al idiota que se atravesó pero al ver debajo de la capucha que tapaba casi todo su rostro, las palabras murieron en mi boca. Ya que el chico, es nada más y nada menos que Connor Rowling, el chico más popular del que todos hablaban. Este sólo sonrió, seguro por mi mueca de espanto y se dirigió a un lado para seguir su camino. Quedé en estado de shock y miré la hora de nuevo, 8;46am, maldición, llevaba un minuto retrasada, corrí hasta el salón.
Eso fue extraño, pensé.
Una voz chillona llamó mi atención.
—Llegando tarde, señorita Tyler —miré a la mujer de unos 50 años, de tez morena y cabello rubio en el cual se podían ver ya unas cuantas canas.
—Lo... lo siento —dije tartamudeando.
—Pase que hoy estoy de buen humor, y además también llegué tarde —suspiré aliviada y entré junto con la profesora de química, hoy no me tocaba compartir esta materio con Kevin ni con Chloe, así que pasé toda la clase aburrida.
Después de concluir la tediosa hora me dirigí a la cafetería donde se encontraban mis amigos, caminé y me senté junto con ellos, conversamos de cosas locas como siempre.
—-Y eso que no viste como la directora se fue con un chicle pegado en su trasero —dijo Chloe mientras tragaba una papita frita, reí.
—Por eso odio cuando nos toca clases distintas —hice pucheros, cuando pasó Connor junto con James, su mejor amigo. Noté como Connor me lanzó una mirada matadora y no pude evitar ponerme nerviosa.
—Ok, ¿que fue eso? —dijo mi amiga con la boca abierta.
—¿Que cosa? —quise evitar el tema.
—Eso —dejó un rato su desayuno para mirarme— Connor, Connor Rowling; el chico mas temido de Sant Patrick te quedó mirando mal. ¿En que problemas te has metido April?
—Yo... yo no he hecho nada —llevé mi vaso con jugo a mi boca para beber un poco.
Por cosas como estas y por las que pasé, evito congeniar y hacer amistades con personas como Connor. Que a leguas gritan; peligro.
ESTÁS LEYENDO
"Intercambiando diferencias"
Roman pour AdolescentsTodos tenemos grandes diferencias, grandes pasados, grandes secretos y aunque la vida se trata de sanar y seguir; el destino se encarga de hacerte una nueva jugada. April Tyler, un pasado, un viejo amor, un nuevo comienzo. Connor Rowling, una person...