Giros Inesperados

Capítulo 42

Dedicado a mi gran amigo Isaac, te quiero Mi Bio.
Gracias por leer y tus cumplidos.

Alejandro está despierto cuando Will y yo llegamos a su habitación, ha recuperado el color y se le ve contento aunque en el fondo está desarmado por la maldad de su madre.
Nuestro padre le ha comentado lo ocurrido, su aparente muerte, los planes de Regina, etc.

-Me alegro que estés bien, hermanita -dice al verme.
-Yo estoy muy feliz por ti, aunque enojada, por mi culpa estás postrado en esta cama -le contesto.
-Y con gusto recibiría otra bala si eso te salva, querida.

Sus palabras me conmueven y me resisto a llorar.

-Ambos estamos bien, que es lo importante -interrumpe mis pensamientos- y ¿dónde está Wen? deseo verla.
-Vendrá pronto, iré a buscarla, estuvo en observación, anoche se desmayó de la impresión, mucha sangre -le respondo ocultando el embarazo, esa sorpresa no me corresponde darla.
-¿Está bien? -pregunta.
-Sí, fue un simple desmayo, ya regreso.

Salgo de la habitación mientras Will y Alejandro charlan animadamente.
Llego al cuarto de Wendy, y le están quitando el suero.

-Buenos días, amiga, ¿Cómo te sientes? -saludo mientras abro la bolsa que traigo con alguna ropa para ella.
-Yo estoy bien, pero Alejandro, ¿ya despertó?.
-Lo acabo de ver, está muy bien y ansía verte.

Un suspiro de alivio escapa de sus labios y la enfermera nos deja a solas.

-Fui a comprar algunas cosas para ti, ropa limpia, cepillo, y demás.
-Gracias, Mel, eres un amor.
-Amor el que te espera pronto -río a su lado.

La ayudo a vestirse, un vestido ligero hasta la rodilla, peino su cabello dejándolo lacio sobre su espalda, la emoción de ver a Alejandro le ha tornado las mejillas de un rosa tenue que no es necesario maquillarla.

Sujeta mi mano con fuerza mientras caminamos por el pasillo que dirige al cuarto de Alejo.
Desde el otro de la puerta escuchamos la voz de Alejandro y es cuando Wen no se resiste y entra emocionada. La sigo de cerca y ya está entre los brazos de Alejo prodigandose amor.

-Amor, tenía tanto miedo -dice Wen con lágrimas en los ojos.
-Yo también mi Wen, pero jamás te dejaré.

Mi padre y Will se acercan hasta a mí y todos nos encaminamos a la puerta, hay que darles espacio a los tortolitos, antes de salir los tres escuchamos claramente:

-Eres mi único amor, siempre estuviste a mi lado a pesar de todo y no quiero que nunca te vayas, casate conmigo -suplica Alejandro y todos nos quedamos esperando la respuesta de Wendy, ella llora en silencio con una sonrisa en la cara- no es la propuesta que toda mujer se espera pero te amo y anoche estuve a punto de perderte...

No termina de hablar porque Wendy le estampa un sonoro beso.

-Es la propuesta perfecta, sí quiero casarme contigo, te amo -responde entre besos, estallamos en aplausos, de verdad nadie se esperaba esto.
-Aunque... no sólo te casarás conmigo -balbucea Wen nerviosa.
-¿Cómo? -pregunta Alejo.
-Estoy embarazada -dice Wendy.
-Mi hijo, tú, yo, una familia contigo es todo lo que deseo -le contesta Alejandro feliz, creo que esto le ayudará a superar lo de su madre.

En este momento salimos, ya precensiamos lo que queríamos.

-Ver a mis dos hijos felices es mi felicidad -dice mi padre y solo puedo responderle con un abrazo.
-Te amo tanto, papi, tener a los tres hombres de mi vida aquí, es mi felicidad -murmuro conteniendo las lágrimas, a diferencia de muchas que he derramado, estas son de felicidad.

☆☆☆

Regina fue internada en la zona psiquiátrica de la cárcel, quedó trastornada después de lastimar a su hijo; Acosta fue condenado por complicidad y secuestro, muchos años lo esperan en prisión.

La noticia de mi padre vivo fue desconcertante para muchos, pero después de 5 meses todo ha vuelto a la normalidad, la constructora está a cargo de los hermanos Keaton, mi padre dijo que su tiempo de trabajo ha terminado, es algo nuevo para mí manejar una empresa pero con la ayuda de Will y mi padre lo estoy logrando.

Wendy está radiante, su enorme barriga resalta sobre el vestido de novia, decidió casarse encinta, se unirá la familia completa y me encanta su elección.
Estamos en una hermosa playa de Cartagena, la ciudad natal de Wen, quiso casarse con el mar y la playa de testigo, su cabello suelto en ondas que tardamos horas en hacerle contrasta con su vaporoso vestido, pies descalzos y un suave maquillaje combinan a la perfección su atuendo fresco y el cálido atardecer.

Will y yo somos los padrinos de boda, acompañaré a Wendy al altar, me eligió un vestido azul marino, mi cabello negro sobre la espalda.
Camino a unos pasos delante, ella detrás, del brazo de su padre, muchos invitados pero sólo puedo ver a Will en el altar, al lado de mi hermano y mi padre, son mis hombres, los amo tanto; miro la argolla de compromiso que unos meses atrás Will me dio y la manera como lo hizo.

Flashback William.

La amo tanto que no es suficiente, Melissa puso todo en su lugar, se adueñó de mis días, de mis defectos, empezó corrigiendo males al azar, cirugía para curar las heridas que dejó el pasado sin sanar, y en el caos de mi infierno instaló su gobierno, fue imperceptible, con pasos de a poquito, colocó una bandera inamovible, fue ganando con saber perder, sin afanes de imponer.
Ella es la mujer de mi vida, encontré el anillo adecuado para ella, un aro de oro con diamantes diminutos incrustados y uno de más quilates en el centro, no sabía la proposición, quería que fuera excelente, inolvidable, se lo merecía; sabía que adoraba leer, pero nada se me venía a la mente, le gustaba la música de Arjona, entonces supe lo que tenía que hacer.
Un par de llamadas y todo estaba listo, al cabo de unos días íbamos rumbo a Guatemala, un concierto de su cantante favorito, ella estaba emocionada, era la primera vez que lo veía, la caja donde estaba el anillo pesaba en mi bolsillo, mis manos sudaban, luego Ricardo empezó a cantar y todo fue más fácil, al final, la invitó a la tarima, cantó 'Te quiero'

-Ese hombre de ahí, te dedica esta canción -decía el cantante señalandome. En ese momento subí y me incliné:

-No voy a rebuscar en la academia, palabras para ver quién me las premia, si este mundo cabe en dos palabras: Cásate conmigo -terminé de decir y todos estaban expectantes.
-Claro que sí -respondió mientras todos aplaudían, y la abracé, no con mis brazos, sino con todo mi amor.

Todo resultó maravilloso.

No se cómo hizo para armar todo eso, pero fue increíble, en unos meses el me esperará en el altar.

Wendy y Alejandro hacen sus votos y son declarados marido y mujer.

No veo la hora de ser la Sra. Dawson.

FIN.