¿Contigo? Hasta el infinito

Capítulo 32 - Otra vez no

Yo: Gracias -agarré el pesado pomo y tiré. Este no se abrió- Ahora, después de todo este maldito juego, abre la puerta.

-sin apenas darme cuenta su cuerpo volvía a estar en frente mía. Su mano estaba presionando la puerta para que esta no se abriera.

Jaxon: No cariño...-sus frías manos volvieron a rodear mi débil cuerpo- El juego solo acaba de empezar.


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Yo: ¡Suéltame! -le empujé hacia la pared haciendo que sus manos soltaran mi torso- Ni se te ocurra volver tocarme Jaxon.

Jaxon hizo una mueca de dolor tras el fuerte golpe recibido en la espalda.


Jaxon : -sacudió su chaqueta- no sabes lo que has hecho.
Yo: -me mantuve firme- Lo sé perfectamente, he impedido que tus sucias manos vuelvan a tocar mi cuerpo. Y lo volvería a impedir todas las veces que fueran necesarias -mis ojos se clavaban en los de él, mostrándole ira y odio- Me das asco Jaxon, jamás pensé que alguien pudiera ser así, y mucho menos tú -mi dedo índice le señaló con desprecio- nunca hablabas, de tu boca apenas salían palabras, pensaba que eras tímido, cada vez que nos reuníamos en la hora del almuerzo apenas se notaba tu presencia, solo te limitabas a escuchar y a mirar.
Jaxon: Mirarte -dijo con rapidez- Te miraba a ti.






Yo: ¿A...-trague salva- ¿a mi?

Jaxon asintió.




Provoqué un silencio. No sabía esa faceta de Jaxon, no sabía que él tenía sentimientos hacia mi, es decir, Jaxon es un tío de muy buen físico, sus ojos color avellana te hipnotizaban, sus labios gruesos te tentaban a morderlos
Yo: Como sea -dije al fin- Pero Jaxon, por favor, se acabó la broma. -mis ojos empezaron a brillar- Yo se que tú no eres así, no sé que diablos ha pasado dentro de ti -me fue acercando cautelosamente hacia él- algo o alguien te ha cambiado, pero tienes que despertar Jax, tú eres una persona increíble...


Mentira, todo lo que salía de mi boca era pura mentira, todo falso. Solo intentaba distraerle y actuar como una amiga, como alguien que le comprendiese. Trataba de ganarme su confianza, pensaba que escuchando mis finas palabras ablandaría ese agujero negro que tenía por corazón. Quería escapar de ese asqueroso tugurio y no volver a verle nunca más, aunque tuviese que convertirme en una perr*a falsa.


-mis pies rozaban la punta de sus zapatos. Sabía que me estaba arriesgando demasiado, pero la adrenalina que corría por mi cuerpo era superior a cualquier miedo.-

Yo: Jaxon, Jaxon McCain -mi mano temblorosa se fue acercando a su rostro- Déjame ir, déjame regresar con los demás -lamí mi labio inferior- te prometo que no diré nada, olvidaré todo esto -mi mano por fin acaricio su mejilla, esta estaba caliente.-


Sentí como los músculos de todo el cuerpo de Jaxon se tensaron. Tragó saliva con dificultad, sus ojos estaban fijos en mis labios. Esto estaba funcionando.



Yo: Por favor... -susurré- Te lo suplico.. -susurré aún más suave en su oído.














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{Ding, dong}



Ross: ¡EL TIMBREEEEEE! -gritó desde el sofá del salón con una bolsa de patatas sobre su abdomen y sus brazos sobre su cabeza.

Rocky: ¡Ross abre tú que yo estoy poniendo la mesa! -gritó desde el comedor.
Ross: ¡Yo no puedo! ¡Estoy ocupado!
Rocky: ¿Haciendo qué?
Ross: ......-hubo un breve silencio- ¡me duele la espalda, no me puedo levantar, a si que abre tú!
Rocky: ¡Agh está bien!






Para ir hacia la entrada había que pasar por el salón.


Rocky: ¿En serio Ross? -le miraba incrédulo- ¿¡En serio?!
Ross: ¿qué pasa? -se encogió de hombros a la vez que metía la mano en la bolsa de patatas y se la llevaba a la boca.

{diiiiiiing, doooong}


-Rocky rodó los ojos y fue a abrir.




Rocky: ¡Vaya! ¡HOLA ___________(TN), por fin vienes! -gritó desde la puerta.



Y en menos de cinco segundos Ross voló hacia donde estaba Rocky.

Ross: ¿____________(tn)? ¿¡Dónde?! -empezó a mover la cabeza en todas direcciones.
Chloe: Hola a ti también Ross -rió.
Ross: -miraba a Chloe con las cejas arqueadas- ¿En serio Rocky? ¿¡En serio?!
Rocky: ¿Qué pasa? -se encogió de hombros a la vez que una sonrisa burlesca se escapaba entre sus labios.
Ross: -entrecerró los ojos- Me engañaste... No es ___________(tn), es Chloe -suspiró disgustado.
Chloe: Oh vaya -puso sus manos sobre sus caderas- Si quieres me voy eh -dijo con tono de enfado.
Ross: -la miró con la cabeza agachada- Lo siento Chloe -rió leve- Hace tres horas que no veo a ___________(tn) y pensé que....bueno..-rascó su nuca- eras tú..-se encogió de hombros.
Chloe: -le sonrió- No pasa nada rubito -desordenó su cabello- Sé lo que se siente al echar de menos a alguien...


Los dos suspiraron a la vez.


Rocky: -carraspeó su garganta- Yo solo quería demostrar lo falso que es mi querido hermano -rió.
Ross: ¿Falso? -arrugó su frente- ¿¡por qué?!
Rocky: -arqueó su ceja derecha- ¿Dónde está ese dolor de espalda que te impedía levantarte y abrir la puerta?

Ross: Ehhh....Chloe pasa, no te quedes fuera hombre -estiró su brazo indicándole que pasara.
Chloe: ¡Pensé que no me lo dirías nunca! -rió.

Rocky rodó los ojos y rió.







Ross: ¿Y cómo va todo? Hace mucho tiempo que no nos vemos -decía mientras cerraba la puerta.
Chloe: ¡Espera! ¡No cierr---

La puerta se cerró del todo.




Xxx: ¡Eh!


Se escucharon unos gritos tras la puerta.


Ross: ¿Pero qué diablos....?-volvió a abrir.


Xxx: ¡Muchas gracias por cerrarme la puerta en las narices! ¡Eres una persona encantadora! -decía mientras se restregaba la mano sobre su dolorida nariz.

Ross: Lo-lo siento -intentó aguantarse la risa- no te vi.
Xxx: ¡Ya, me lo imagino, no creo que lo hicieras a posta! -su voz era un poco incómoda, demasiado fina y aguda.
Ross: Amm...-arrugó su entrecejo- ¿y tú eres...?
Chloe: Ups, lo siento -se puso entre medias de los dos- Perdón por no avisaros antes, pero todo fue demasiado rápido, mis tios regresaron de San Francisco esta misma mañana y me dijeron que me llevase a mi prima para enseñarle la zona y-----

Ross: Espera, espera. ¿Tú prima? -la miró de arriba abajo.

Dannae: Dannae Johnson, encantada -le tendió la mano.



Dannae era una chica de 17 años, un año mayor que __________(tn). Su cabello era corto, a la altura de los hombros, era de color castaño muy claro que cuando le daba el sol parecía rubia. Sus ojos eran grandes y redondos de color verde. Tenia brackets, pero pronto se los iban a quitar, sus dientes ya casi eran perfectos. tenia bastante pecho, pero también tenía algún kilo de más. Vestía con unos vaqueros desgastados, una blusa color cereza y unas botas negras.


Ross: Encantado -le estrechó la mano- Yo soy Ross Lynch.
Dannae: Ya sé quien eres, el que sale en la serie esa de Disney channel -rió cual niña infantil- Vaya, eres mucho más guapo en persona que en televisión Austin.
Ross: Amm, prefiero que me llames Ross.
Dannae: Como quieras -se encogió de hombros y entró a casa.





Ross: Chloe -la paró- Tu prima es un poco....
Chloe: ¿Incómoda? ¿Molesta? ¿Irritante?
Ross: -la miró incrédulo- Bueno, yo iba a decir infantil..
Chloe: -rió- No te preocupes, en verdad se le coge mucho cariño -sonrió- Ya verás como en menos de 3 días ya la estás queriendo como una hermana.
Ross: Sí, claro...-murmuró.







Cerró la puerta.


Chloe: Vaya, ¡esta casa es increíble! -dio vueltas sobre sus propios pies.
Ross: Somos unos tipos con suerte al tener un amigo como Kevin eh -rió.
Chloe: -se tumbó en el sofá- Y que lo digas -rió.
Ross: ¡Eh! ¡Que ahí estaba yo! -se tiró encima de ella!
Chloe: ¡Quitaaaaa! ¡Que tu trasero es demasiado gordooo! -reía
Ross: ¿Gordo? -rió- ¡Gracias por el piropazo eh! -reían como locos.
Chloe: ¡Tregua, treeegua! -rió y consiguió escapar de Ross- ¡Por fín! -suspiró- me moría de calor ahí abajo.
Ross: Eso es porque estoy muy caliente -le guiñó el ojo.
Chloe: ¡Cállate! -rió y le golpeó leve en la cabeza- Oye, ¿aquí no falta alguien? -se acomodó en el sofá y miró por los alrededores.
Ross: Oh sí, tu querido Ryland está en el sótano con las pesas, se quiere poner fuerte para ti -movió sus cejas de arriba a bajo.
Chloe: No idiota -rió- Me refiero a tu princesita, a la que hablas de ella tooooodo el día, a tu amor.
Ross: ¿Te refieres a ti?
Chloe: -rodó los ojos- Hablo de _________(tn) -rió.
Ross: No lo sé Chloe -le miró de reojo- Se supone que se fue a correr, pero aún no ha vuelto..-suspiró soltando todo el aire de sus pulmones.
Chloe: Eh.-acarició su hombro- No pasa nada, se abrá entretenido con cualquier cosa, ya sabes que ____________(tn) ama la naturaleza y puede pasarse las horas muertas contemplándole el bosque y sus animales..-le esbozó una reconfortable sonrisa- ¿A que hora se fue?

Ross: A las once de la mañana.
Chloe: ....¿y qué hora es ahora?
Ross: -la miró- Las ocho de la tarde.

















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Jaxon: Vale...-dijo apartándose de la puerta.
Yo: ¿¡En serio?! -mis pupilas se dilataron- ¡Muchas gracias Jaxon! ¡Sabía que tú no eras así!

Corrí efusiva hacia la puerta, mis esperanzas de salir de ahí se multiplicaron por mil. La felicidad volvió a mi.

Había funcionado, actuar como una falsa perr*a funcionó. Por fin volvería a ver a los demás, por fin iba a salir de ese maldito lugar al que nunca más regresaría. Por fin volvería a ver ha Ross.


Todas esas emociones iban a estallar dentro de mi.


Pero no.


Fue una completa estúpida.



Me emocioné demasiado.


Y demasiado pronto.




Otra vez el pánico volvía a ser mi peor pesadilla.


Esto nunca acabaría.



Nunca.





Yo: ¿¡Y AHORA POR QUÉ NO SE ABRE?! -empezé a zarandear con todas mis fuerzas la puerta.


Jaxon no hablaba, probablemente porque la risa no le dejaba escupir ninguna palabra.



Yo: ERES UN HIJO DE PU*TA. ¡ME ENGAÑASTE!

Su risa me producía nauseas, mi estómago empezó a doler, quería vomitar.


Yo: ¡ABRE LA MALDITA PUERTA! -la golpeaba con todas mis fuerzas- ¡ABRELA JODER! ¡ABRELA! -las lágrimas no podían aguantarse más- ¡POR FAVOR! ¡ABRELA! -me volví histérica, cada segundo que veía a Jaxon en una oscura esquina ahogándose de la risa era una tortura- ¡MALDITO DESGRACIADO! -mis manos estaban llenas de heridas, las uñas estaban en carne viva, pero no me importaba, no me dolía.



No me dolía nada, no sentía nada.


Hasta que lo inevitable sucedió.


Un sonido escalofriante hizo que parara de inmediato, toda la histeria y locura que tenía se esfumaron. Un "crack" se adueñó de la sala.No me podía estar pasando esto, otra vez no.















Yo: Mi....mi pierna.