•Narra ________•
Ahí estaba yo acostada en mi cama mirando hacia el techo y recordando los dulces momentos que viví con él.
La verdad es que el siempre el mejor hombre de todos, era mi príncipe azul. Sonreí. Siempre me conquistaba con pequeños detalles. Todo lo que hacía, lo hacía sólo por verme sonreír. Suspiré. Lo amaba demasiado pero mis esperanzas de recuperarlo estaban por el suelo, después del gran susto que nos dio anoche en casa de sus padres, el prefirió dormir en el cuarto de Yaz y dejarme a mi en el suyo. No voy a mentir. Lloré hasta quedarme dormida por el simple hecho de que durmiéramos aparte, en la mañana actuó normal: frío.
Como sea muy común ahora, estuvimos hasta medio día en casa de los Meza y luego volvimos al departamento, durante el trayecto ninguno habló. Yo manejaba porque él tenía su brazo lastimado y Jorge se lo prohibió.
-Cuando estuvimos en el departamento estuvo todo el día en su computadora y hablando por teléfono con los de la empresa, yo solo lo miraba de lejos y el maldito silencio me torturaba. Le hice la comida y luego me fui a mi habitación, voleé ver la hora y eran las 12 de la noche. Suspiré.
Debía dormir ya que el doctor lo había dicho, si tan solo hubiera algo que me devolviera la esperanza de que el me amaba... Hasta la más mínima me haría luchar por él, pero no tenía ninguna. Cerré los ojos y me acurruqué para dormir.
•Narra Brandon•
No soportaba más, así que me levanté de la cama y caminé había su habitación.
Trate de no hacer ruido y cuando llegue abrí la puerta con cuidado para no despertarla, necesitaba verla. No había sido tan fácil para mi ignorarla todo el día, después de haberla visto tan desesperada por saber que yo estaba bien.
Entré a su habitación y ella dormía, su cabello se dispersaba por la almohada y la luz de la luna reflejaba su perfil. Se veía tan tranquila y reflejaba algo tan angelical.
Deseaba tocarla, acariciarla y tenerla entre mis brazos mientas le susurraba en el oído cuanto la Ana.
Apreté los puños tratando de controlarme, pero en ese momento mi corazón dolido era el que me manejaba, me acerqué lentamente a la cama sin dejar de observarla. Detalle su perfil, sus ojos, su nariz, sus mejillas y sus labios rojizos.
Lleve uno de mis dedos hacia su mejilla y la acaricié lentamente bajando hasta sus labios, pasé saliva. Quería besarla.
Vete de ahí, decía mi mente pero mi cuerpo no respondía. Estaba hipnotizado con su belleza, maldita sensación que ella provocaba en mí. Levanté mi mano hacia mi pecho y me corazón seguía acelerándose con solo observarla. Me estaba comportando como un chiquillo tonto, me di la cueles para irme de ahí, pero no quería hacerlo, la observé por última vez y suspiré. Caminéis regresado había ella maldiciéndome por tanto.
No aprendes Brandon, me decía mi voz interna.
Sin pensarlo dos veces con cuidado me metí a la cama junto a ella, trate deshacerlo despacio para que no se diera cuenta de mi presencia.
Cuando me acomodé por completo en su lado la miré, evidentemente de una vez ella se movió y se acurrucó en mi pecho.
¡esta despierta!
Una alarma se encendió dentro de mi, me quedé quieto sin mover ni un músculo. Enterró su rostro en mi pecho, la miré y no, no estaba despierta creo que es su costumbre. Aún estando dormida cuando me siente a su lado inmediatamente se refugia en mis brazos. Sonreí. La abrace y me recosté en la almohada quedando frente a frente.
La observé una última y cerré mis ojos.
•Nara ________•
Lentamente abrí mis ojos con una esperanza.
Anoche había tenido un sueño maravilloso donde Brandon entraba a mi habitación y me observaba mientras me regalaba algunas caricias. Hasta pude jurar que se había acostado a mi lado.
En fin era solo un sueño y tenía que volver a la triste realidad.
Traté de levantar mi rostro ya que lo tenía hundido en mi almohada o eso creía yo. Podía jurar que era el aroma de Brandon el que estaba en ella. Levanté mi rostro lentamente y me detuve de golpe al ver que unos brazos me rodeaban. Abrí mis ojos como platos ¿no había sido un sueño?
Mi corazón se aceleró, el estaba ahí dormido y yo estaba acurrucada en sus brazos como siempre había acostumbrado hacerlo. Estaba inmóvil con miedo de hacer un mínimo movimiento y despertarlo, lo observé y se veía hermoso. Amaba verlo en las mañanas dormir. Mi corazón latía amenazando con salirse en cualquier momento.
Él se movió e inmediatamente cerré mis ojos, él se movió aún más y me di cuenta que se había despertado.
Me quedé quieta con los ojos cerrados estando de que mi respiración no me delatara.
Dios... dije en mi mente. Lo sentí moverse otra vez y lentamente fue quitando su brazo de mi alrededor. Él creía que aún dormía. Luego se levantó y caminó en silencio hay la puerta y la cerró con cuidado. Cuando lo hizo me volteé y solté la respiración que hasta el momento había aguantado.
¡Había dormido conmigo! gritaba mi mente con emoción. ¿Eso significaba algo? Sonreí.
Tenía esperanza, si eso era. Justin aún sentía algo por mi aunque fuera lo más mínimo aun sentía algo. La emoción me invadió y me levanté, caminé hacia el baño, me mire en el espejo con una gran sonrisa.
Era como si hubiera rejuvenecido, reí ante mis ocurrencias. Me quité la dio y entré a la regadera abriendo la llave, esperé que el agua tomara temperatura y entré en la cortina de agua que mojaba mi cuerpo. Sin poder evitarlo comencé a cantar.
(....)
Entré a la cocina para hacer el desayuno tenía una gran sonrisa y mi ánimo había subido. Empecé a prepararle el desayuno, quería consentirlo así que hice hot cakes con huevo revuelto y un poco de fruta y por último jugo de naranja.
Él entró a la cocina y se detuvo al verme.
-Buenos días.- le dije sonriendo.
-¿Buenos días?- dijo moviendo la cabeza hacia un lado. Yo reí.
-Te preparé el desayuno.- dije sirviéndolo sobre la mesa.
-No, debo irme, además no tengo hambre.- dijo negando.
-¿Ah si? ¿Entonces a que venías a la cocina?- dije sonriendo, él hizo un gesto extraño y un gruñido de estomago lo delato provocando mi risa. Él me vio y se puso rojo y sonrió, hace mucho que no lo veía sonreír.
-Creo que mejor me voy.- dijo
-Claro que no señor no te moverás de aquí hasta que desayunes. Además es tu desayuno favorito.- dijo con voz de niña inocente. Él volvió a sonreír, me senté y tomé un sorbo de café sin dejar de mirarlo, suspiró y luego se sentó a desayunar.
-Y ¿hace mucho que estas despierta?- preguntó mirándome con cierto nerviosismo.
-No, la verdad no.- mentí con una sonrisa maliciosa.
-Ahhhh Okey.- dijo comiendo.
-Es que anoche no sé, caí como piedra y puedo jurar que dormí como hace mucho no lo hacía.- dije y él se atragantó. Reí.
-Que bien.- dijo después de tomar un poco de jugo, entrecerré los ojos. No podía evitar sonreír con malicia, quería gritar "te descubrí". -Será mejor que me vaya, voy tarde.- dijo levantándose, tomó lo que queda a del jugo y se puso el abrigo.
-Ten cuidado con el brazo.- le dije. -Y no puedes conducir.
-Lo sé, iré en taxi.- dijo llegando a la puerta.
-Más te vale.- dije amenazándolo con gracia. Él sonrió y luego salió
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Hello, por fin nuevo cap😂, espero que les haya gustado.
Si lo sé, tienen todo el derecho de odiarme por no actualizar😔, pero ya hay nuevo CAP😌. Les prometo que pronto habrá maratón✋🏼🙊.
Gracias por leer, votar, comentar y esperar. Las amo❤️
