Capitulo 19

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Miro el reloj, aun faltan diez para las siete, el edificio ya está abierto y admiro a las personas que le dedican casi todo su día a esta empresa.
Saludo a los vigilantes quienes ya están empezando a reconocerme y a aceptar que siempre saludo. Tomo el ascensor antes de que las puertas se cierren entra una cara conocida.

-Buenos días Jazmin – sonríe agradable

-Buenos días – respondo algo sonrojada mientras trato de acordarme de su nombre

-Comienza por A... - comenta

-¿Qué? – lo veo extrañada

-Mi nombre... comienza por A – su sonrisa crece un poco

-¿Adam?... - muerdo mi labio poco segura de que sea ese...

-Si... - sonríe

-Bueno Adam... que tengas buen día – sonrío algo incomoda

Una vez llego a mi planta de trabajo dejo las cosas sobre mi escritorio y enciendo todo, tomo los folios y documentos y me dirijo al despacho de Trevor. Admito que ha sido agotador, totalmente agotador tener que levantarme temprano solo para evitar cruzarme con él en la mañana o para tener que entrar en su despacho a dejar los archivos, eso contando con que no he podido dormir pensando en lo sucedido, en como deje que mi cuerpo fuese de dos desconocidos físicamente, pero de un solo hombro mentalmente.

Tomo las llaves y entro al despacho de Trevor, dejo abierto para evitar malentendidos, abro el archivador y comienzo a acomodar todo, pero entonces el ultimo, ese que no alcanzo a colocar es mi gran problema, aun con los jodidos tacones no alcanzo, y mis piernas tiemblan un poco, me da risa al pensar que fue algo similar el dolor cuando perdí mi virginidad.

Me giro y tomo una de las sillas frente al escritorio y la arrastro hasta el archivador, me subo en esta y por fin estoy a la altura de esos archivos, los acomodo un poco y finalmente dejo el último en su lugar.

Escucho como alguien carraspea su garganta y se perfectamente de quien se trata –Buenos días Señorita Mayson... - su voz es ronca y bastante baja, como si no deseara ser escuchado.

-Buenos días señor Stock – la voz me tiembla

Rápido me bajo de la silla, con la palma de mi mano sacudo el asiento y la vuelvo a dejar en su lugar, acomodo mi falda formalmente y veo que la puerta está cerrada, a mi fortuna y a la vez decepción, sin seguro... No tiene planeado hacer nada.

-Ya le traigo su café señor Stock – susurro por lo bajo dirigiéndome hacia la salida

-Descuida, esta mañana ya me han atendido – lo dice como si presumiese tal hecho

-Entendido – asiento y agarro el pomo de la puerta

-Por cierto señorita Mayson... - hace una pausa dramática – para hoy tengo algunas reuniones, no quiero que nadie me interrumpa puesto que tengo que prepararlas – y no dice mas

-Si señor – asiento y salgo de su despacho

Camino cabizbaja a mi escritorio, es obvio que solo he sido yo la que ha fantaseado en la noche, de seguro cada noche lleva a una mujer diferente a su casa.

¡Idiota! Eso es obvio... y yo fui una de esas... con la única diferencia de que estaba muy ebria como para acostarme con el... creo

"Tú. En mi despacho... ahora
-M. Fitzpatrick"

Pongo los ojos en blanco, no quiero, se perfectamente que lo hace solo para que le comente todo lo sucedido anoche, y aunque muero por hacerlo, por recordar detalles, no es hora de hablar sobre ello.

Suit of Strangers (en edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora