Capitulo 15

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Me despierto tan rápidamente que un ligero dolor se activa en mi cabeza, rápido quito las sabanas de mi cuerpo e instintivamente escucho la ducha y asimilo que Emmet se esta alistando, miro la hora y queda un poco más de media hora para las siete. ¡Mierda! No puedo darme el lujo de esperar a que Emmet se termine de duchar, pero tampoco estoy interesada a ir con el cuerpo así de sudado y con cara de "folle anoche" al trabajo.

Rápido escojo mi ropa, odio tener que llevar la misma pero algo me ingeniare para que no lo noten, dejo la ropa sobre la cama, a un lado de esta, y con total vergüenza entro al baño en donde Emmet no se ha tomado la molestia de cerrar la cortina.

-Jaz... -luce sorprendido mientras enjuaga su cabello y retira la espuma de este

-Lo siento, se me ha hecho tarde... - empiezo a disculparme

-Descuida... si quieres entra - se hace a un lado y deja el chorro de agua libre

Mis mejillas deben estar perfectamente sonrojadas, pero primero el trabajo antes que nada y después de lo de ayer no creo que Trevor sea muy asequible para mí.
Entro en la ducha y rápido dejo que el agua recorra por todo mi cuerpo y mi cabello.

-Te ayudo - antes de que logre decir nada Emmet esta lavando mi cabello mientras yo enjabono mi cuerpo. La verdad si me es de total ayuda que haga eso... me regala al menos un par de minutos de ventaja.

No tardo mucho y ya estamos los dos fuera de la ducha, seco mi cuerpo y cabello, enrollo la toalla a mí alrededor y salgo tras Emmet para encontrarme con una bolsa sobre la cama.

-He mandado a comprarte algunas cosas... cuando desperté y vi la hora supe que yo debía llevarte al trabajo - dice con naturalidad secando su cabello y dejándome verlo completamente desnudo

No es que en la ducha no lo hubiese visto, solo que todo el tiempo le di la espalda, además ahora tengo una linda vista de su trasero mientras toma la ropa que usara.

-Cuando tenga mi primer paga te devolveré el dinero - hablo con tono seguro para que no se tome la molestia de contradecirme

Miro la bolsa y hay una blusa color rosa pastel, una falda azul oscura y un conjunto de interiores blancos. No dudo mucho en colocarme esa ropa y tomar mis tacones, guardo mi ropa en la bolsa y miro mi cabello... debí no lavarlo...

Me hago una coleta a lo alto y trato de acomodar todo. Tomo mi celular, que Emmet había puesto a cargar y mi cartera libremente ubicada en el taburete de desayuno. Miro la hora y el tiempo está a mi favor... veinte minutos para las siete... creo que hoy el día me quiere ayudar.

-¿Vas a desayunar? - Emmet señala la cocina en donde una mujer ya está sirviendo algo

-Un poco de jugo estaría bien - sinceramente, aun sabiendo que tengo tiempo, estoy totalmente afanada

La mujer saca de la nevera jugo de naranja y lo sirve en un vaso junto al cual pone un sándwich que luce bastante apetitoso.

-Toma asiento... estarás cinco minutos antes de la siete en tu trabajo... descuida... sabes más que nadie que yo odio la impuntualidad y...

-Ya se Emmet - odio cuando se pone redundante y me fastidia infinitamente que trate de calmarme

Nos sentamos juntos frente a la mesa de desayuno, tomo rápido mi jugo y como el sabroso sándwich que tan pronto lo termino mi bocota se abre y es el hambriento de mi estomago es el que habla.

-¿puedo llevarme uno de estos?

La mujer sonríe orgullosa y me responde con un - claro cariño, te guardare dos para llevar - y me quedo gustosa viendo como dos deliciosos sándwiches son empacados solo para mi

Suit of Strangers (en edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora