Mi Destino A&A (Historia Original)

Capítulo 12

Una hora después Dulce seguía conmocionada por la noticia de Anahi. La había abrazado, había llorado con ella y había maldecido a James. Y se había jurado que en el momento en que ese hombre regresara a Longlake haría que fuera a la cárcel.

—Vamos amiga—dijo Dulce suavemente pasándole un té a Anahi que estaba con los nervios a flor de piel—. Tomate esto te hará bien.

—Perdóname—Dulce negó con la cabeza—. Quería decirte pero me daba tanta vergüenza.

—Jamás debes sentir vergüenza de decirme las cosas Anahi—la abrazo—. Me siento tan impotente de saber que ese hombre pudo hacerte algo así. Voy a matarlo con mis propias manos.

—Fue hace más de un año—susurro—. Teníamos seis meses de casados.

—Es una bestia un tipo inmundo que no merece llamarse hombre. Dime que lo denunciaste Anahi dime cualquier cosa que me impida no salir a donde quiera que se encuentre y matarlo.

—No encontré fuerzas—susurro—. No sabes cómo es James, Dulce no pude salir de la casa en dos semanas porque me estuvo encerrada esperando que se pasaran los golpes. Yo no quería ni salir a la calle y me dijo que si no lo hacía me iba a matar.

—Pero debiste hacerlo Anahi—dijo Dulce suavemente—. No debiste dejar que pasara tanto tiempo ahora entiendo tantas cosas. Te golpea y te hace todo eso.

Anahi vio a su amiga con palidez sentía un peso menos en su cuerpo de poder hablarlo. Dulce era como su hermana y sabia que podía contar con ella siempre. Siempre había estado a su lado y jamás la abandonaría. Necesitaba decirle lo que le pasaba y compartir con alguien su dolor.

—Cuando tiene relaciones conmigo le gusta golpearme—Dulce cerro los ojos—. Dice que ver mi sangre le provoca placer.

—Maldito canalla—grito Dulce—. Voy a matarlo, voy a denunciarlo para que se pudra en la cárcel como la vil rata que es y aun así estoy ofendiendo al animal.

—La estúpida soy yo por dejar que las cosas dejaran a tanto—dijo con dolor—. Me arruino la vida Dulce me arruino toda mi vida desde que permitió que abusaran de mi.

— Anahi tienes que dejarlo—dijo su amiga—. Tienes que divorciarte de él antes de que te mate.

—Él dice que muchas mujeres disfrutan de lo que él me hace—dijo suavemente.

—Pero desde que a ti no te gusta eso es una violación te esta humillando como mujer Anahi no puedes permitir eso, ¡No debes permitirlo!

—¿Y qué hago Dulce? —susurro—. Le tengo pavor y yo lo único que siempre he deseado es una familia. Yo quería una familia a quien amar Dulce.

—Vamos a pedir ayuda Anahi—dijo suavemente—. Estoy segura que la policía nos puede ayudar a detenerlo y tú necesitas una ayuda podemos buscar un psicólogo que te ayude con tus miedos. Sé que es difícil lo que te paso y créeme que si pudiera retroceder el tiempo yo misma lo hubiera matado Anahi.

Anahi suspiro apretando la taza de té y suspirando. Dulce era una buena amiga pero no entendía que las cosas no eran tan fáciles. Que ningún psicólogo podría borrar el hecho de haberse visto atada, golpeada y violada de la forma más cruel y horrible.

—Un psicólogo no servirá de nada—susurro—. Yo jamás podré olvidar lo que me paso Dulce, nunca.

—Cuando regrese tienes que divorciarte de él Anahi—Anahi bajo la cabeza—. No permitiré que ese hombre siga abusando así de ti.