Mi Destino A&A (Historia Original)

Capítulo 22

Anahi respiro entrecortamente al sentir como Alfonso se entregaba a ella con lentitud lo dirigió a la cama sin dejar de besarlo y con un leve empujón Alfonso termino en el colchón soltó una risita y Anahi le sonrió enamorada.

—Me empujaste—dijo sonriéndole enamorado Anahi le sonrió dulcemente.

—Perdóname mi amor—dijo subiéndose al colchón y quedando frente a él—. ¿Estás seguro de esto? —dijo Anahi insegura—. No quiero fallarte ni que te avergüences de mí—le acaricio la mejilla a Alfonso—. Te quiero tanto.

Alfonso respiro hondo y se dio la vuelta quedando boca arriba en la cama puso sus brazos tras la cabeza y suspiro relajado luego le dio una mirada invitadora a Anahi.

—Soy tú fiel esclavo—susurro viendo los ojos de Anahi brillar—. Soy todo tuyo princesa.

—Me gustas tanto—dijo Anahi volviendo a besar su pecho dejando un línea de besos hasta su cuello Alfonso respiro hondo tratando de contener su propio deseo de acariciarla.

—Y tú a mi princesa—dijo Alfonso jadeando Anahi sonrió y lo beso en los labios.

—Tienes unos ojos muy bonitos—dijo Anahi dulcemente y Alfonso suspiro al sentir que se apoyaba en él para poder verlo a los ojos—. Me gustas tanto mi amor eres el hombre más hermoso que vi en mi vida—Alfonso la vio enamorado.

—Parece que quieres enamorarme—dijo mientras Anahi le daba suaves besitos en el rostro y acariciaba el poco vello de su pecho enredando sus dedos en él.

—Quiero amarte—dijo Anahi suavemente—. Te deseo tan profundamente y me gustaría que pudieras ver dentro de mi corazón y ver que te amo mucho—Alfonso cerro los ojos sintiendo los besos de Anahi.

Anahi entrecerró los ojos llena de pasión por Alfonso él verlo acostado para ella sin exigirle nada sin pedirle nada la hacía enamorarse más de él. Había esperado treinta años para sentir ese amor parecía que había pasado una vida entera. Odiaba el sexo pero amaba al hombre que estaba ahí le parecía irreal que él la amara. Le parecía precioso tenerlo para ella, solo para ella. Beso desde el cuello

—¡Dios mío! —dijo Anahi pegando su frente a la mejilla de Alfonso y respirando profundamente—. Ven acá—le movió el rostro y lo beso profundamente.

Alfonso sintió como Anahi lentamente se ponía sobre él y puso los brazos a su costado sintiendo dolor por tocarla. Sentir la suavidad de sus labios y la ternura de su lengua era mágico. Anahi le tomaba el rostro con una pasión increíble y las manos de él picaban por acariciarla y sentirla suya. Pero con ese beso ella le estaba entregando mucho más de ella.

—Me encanta tú sabor—Alfonso le dijo contra los labios para besarla de nuevo profundamente. La lengua de Anahi se enredó con la suya y la escucho suspirar.

Saber que la mujer de tú vida estaba sobre ti besándote con ese amor hizo que el cuerpo de Alfonso reaccionara a sus caricias Anahi lo sintió y sus miradas se encontraron. Los ojos de Anahi estaban casi celestes, llenos de pasión y tenía los labios hinchados por los besos.

—Te amo—dijo Anahi suavemente y Alfonso le sonrió dulcemente—. Perdóname me gustaría tanto poder...—Alfonso negó con la cabeza y subio sus manos para tomarle el rostro pero se detuvo había prometido no tocarla. Anahi suspiro y tomo su mano para ponerla sobre la mejilla y Alfonso lo hizo tomando su rostro con dulzura.

—Reacciono porque te amo, porque el amor de mi vida esta sobre mi no te niego que me muero por hacerte el amor. Pero se que aun es muy pronto para nosotros. Tú necesitas romper muchas barreras y yo te ayudare.