La vida después de la muerte

¡No!

POV' Trent

Sobreviví tres días hasta hoy. No puedo más, quiero morir, pero luego recuerdo a lo que me queda de familia y recuerdo que tengo que vivir.

Daniel, Tatiana, Travis. Son mi prioridad, si muero será por ellos. No así.

Aguantamos dos dias más, matamos a un Tavi más y comimos y bebimos la carne y sangre de todos los humanos. Ahora hay dos abrigos para la noche y nuestra esquina, nuestro territorio esta sellado.

Después de una semana solo quedaba un Tavi vivo, el resto o lo matamos nosotros, o murió de hambre. Vomité al comer. No puedo.

Me estaba muriendo, estaba desmayandome, tenia una herida infectada. Y solo perdí la conciencia.

****

Desperté. Estaba en la piel donde antes había desvanecido, la puerta estaba abierta.

Me paré como pude. No habia nadie, ni Tavis, ni el marino.

Caminé apoyandome en la pared y salí del lugar tan rápido como pude. Me estaba volviendo loco.

-¿Hola?- pregunté. No hubo respuesta.

Vi otra reja, la luz era roja y estaba abierta. Entre como pude.

Al parecer no fuimos el único grupo que pasó por eso.

En esta jaula habían también, Tavis muertos y gente muerta.

Pase con la mirada para luego marcharme... pero vi algo que... Dios.

Mi cara palideció, tenia un nudo en mi garganta.

-¿Travis?- tartamudee y lagrimas cayeron por mis ojos.

-¿Trent? ¿hermano?- decia Travis desde el suelo... un hilo de vos. Estaba en el piso, desangrándose y sin una pierna.

Lágrimas cayeron de mis ojos y me postré a su lado.

-Vas a estar bien, lo prometo. Lo juro, hermanito- me desesperé, lagrimas aun me empapaban, el solo asentia con debilidad.

Su pierna estaba arrancada, su hueso afuera. ¡Esas bestias! Comieron su pierna.

-¡Ayuda!- grite tan fuerte como pude. Me arranqué la camisa e intenté parar el sangrado.

-Te quiero, hermano- dijo con voz seca, Travis.

-Y yo a ti- sollozaba y temblaba mientras hacia lo que podia.