Coqueteando Con La Realeza ♔ (Sin editar)

Capitulo 12: Son como niños

Cuando íbamos bajando las escaleras me acorde de algo que tenía rodeándome la cabeza desde hace rato así que detuve a Dylan y le pregunte.

- Porque cuando conocimos a Santiago, me decías que se te hacia familiar y no me dijiste que era un conocido de tu familia o tuyo.

- Porque no lo reconocí al principio, pero luego charlamos un rato y me di cuenta de que era Santiago, aunque el claramente ya me había reconocido porque cuando pregunte él me dijo­ tan fácil de olvidar soy, por favor Dylan y eso me lo confirmo. Solo el Santiago que yo conozco podría decir una cosa así mantenerse serio. -

- Porque no me lo dijiste.

- Porque en esos momentos tenía otras cosas en mente.

- A ver ¿cómo qué?.

- Ganarme unos boletos para maroon 5.

- Es enserio Dylan.

- Sorry Em pero es Adam Levine, era casi un delito negarse - Cierto, no la culpo.

- Payasa vamos a comer.

- Ahhh Em que planes tienes para este sábado - ni idea.

- No sé, supongo que hacer algún deber.

- Bueno procura hacerlo el viernes en la noche y sábado en la mañana, porque nos vamos a conocer a marron 5 - WTF.

- Al menos saco provecho de lo que te ganas a mi costa - me reí.

-Hey, estoy tratando de reivindicarme, no me hagas sentir culpa - dijo esto haciendo pucheros.

-Ok Dylan, te acompaño - dije y comencé a caminar.

Cuando llegamos a la sala, vi que estaba sirviendo Sebastián y Julieta, mientras que Santiago estaba mirando su celular con cara de concentrado, con la mano en su rubio cabello; en cambio David estaba buscando algo en el televisor.

-Bueno, a comer - dijo entrando Julieta con dos platos en su mano, seguido de Sebastián que también tenía dos. Entonces todos nos acercamos a la mesa y nos ubicamos en los asientos.

Julieta coloco el primer plato delante de Santiago y el otro a David. Luego de eso Julieta se estaba retirando pero Sebastián le impidió el paso y le dijo.

-Juls siéntate, yo termino de servir - apenas yo escuche esto mire a Dylan que literalmente quedo con la boca abierta y por el otro lado David tomo un largo trago de agua.

Entonces allí Sebastián ubico uno de sus platos delante de Julieta y el otro lo coloco delante de mí. Luego se retiró a la cocina, mientras eso yo comencé a comer una rica lasaña realizada por una italiana.

Italia se supone que es un país con buena cocina, y lo acabo de comprobar. Pero, creo que me estoy desviando cuando Sebastián volvió solo con su comida. Y la otra mano tenía la jarra de jugo.

Luego de colocarla en la mesa se acomodó en su silla y comenzó a comer, la pobre Dylan no podía creer lo que acaba de suceder. Solo había que ver la reacción de toda la mesa al notar la descortesía por parte de Sebastián y lo tranquilo que se veía como si no hubiera sucedido nada.

Aunque ni en mis más remotos sueños o alucinaciones me hubiera imaginado lo que sucedió después. Os juro que fue la cosa más impactante que había visto y la segunda reacción de agresividad de Dylan en el día o debo decir en menos de 12 horas.

En fin, Dylan se levantó y golpeo la mesa, de tal manera que todos abrimos los ojos de la sorpresa que nos llevamos, ella grito:

-¡esto es el colmo!

Al observar a Sebastián todavía comiendo y que fue el único que no se aturdió con el estruendo provocado por Dylan. Pero eso no fue lo único, inmediatamente Dylan agarro la jarra de jugo y se la tiro. Así de fácil, hizo una reverencia y se fue hacia la cocina.

Allí si reacciono, y no faltaba más estaba todo empapado de jugo de Mora, salió disparado hacia la cocina como el demonio de Tasmania, y creo que eso es una descripción que no le hace justicia.

Todos estábamos perplejos por lo que acababa de pasar delante nuestros ojos.

Se escucharon gritos en la cocina, todos los presentes nos mirábamos los unos a los otros, pero Julieta sentía un poco de culpa, pues si ella no le hubiera hecho caso a Sebastián nada de esto sucedía.

Los gritos seguían, entonces David iba a intervenir cuando Santiago le agarra del brazo y le dice:

-Déjalos que ellos tienen que solucionarlo, ya es hora de que dejen de actuar como niños.-

De pronto los gritos cesaron y un portazo se escuchó. Luego entro a la sala Dylan con su plato, y se sentó en la mesa a comer muy tranquilamente. Todos seguimos su ejemplo y nos sentamos a comer. Luego de un rato estábamos aburridos. Así que a Julieta se le ocurrió jugar un juego un poco interesante.

Al principio yo no quería jugar, no porque no fuera capaz de cumplir las condiciones, solo que digamos no me parecía la ocasión para jugarlo.

-Verdad o Reto. - pregunto Julieta a Santiago cuando ya estábamos sentados en una ronda en el piso con una botella como eje central.

Verdad - respondió el.

-A cuantas tías te has tirado- soltó con un perfecto acento español.

- 9­ - dijo esto sin pensarlo.

Si solo se ha acostado con 9 no quiero ni imaginar con cuantas ha salido. La botella comenzó a girar nuevamente y esta vez el turno fue para el espacio en blanco porque se ubicó entre David y mi persona. Pero rápidamente se volvió a girar.

Esta vez fue mi turno. -Verdad o reto- pregunto Dylan.

- Reto­-

-Te reto a que te beses con David por 3 minutos ­- fácil ­- con lengua - ¡que! - beso beso, si me entiendes.

Allí supe porque lo había hecho era su manera de vengarse de Julieta sin que ella supiera, exactamente.

-Y si no lo hace- pregunto Julieta.

-Se quita una prenda- es en serio

-Bien. Acepto.

Rápidamente me acerque a David le agarre por la nuca y comencé mi reto. Durante este me di cuenta de dos cosas, David es como mi hermano, pero no le quito que sabe besar.

Cuando Dylan dijo tiempo, tome una bocanada de aire y aunque sea irónico respire. Todo se volvió más tensionaste, pues apareció Sebastián y se sentó a jugar. Y entonces la ronda termino así:

David, Dylan, Santiago, Sebastián, Julieta y yo.

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Encontre un poco de inspiración.

Espero que les guste.