Nunca Dije Nada {NDN#1}

Capitulo XXIII

Capitulo 23 - Lo importante es el interior...

-Es allí, Daniel. -Dije y este se soltó de mi mano para ir corriendo hacia la tumba de Alejandra. Apreté más fuerte la mano de Lucian y caminamos hacia él.

-...Y mis hermanos se llamarán Elián y Elliot. ¡Hoy los vi! Parecen dos manchas pero papi dice que es porque aun son pequeños. -Sonreí recordando lo que había pasado esta mañana.

*Flashback*

-¿Cómo se encuentran?

-Bien. -Respondí sintiendo el frío del gel sobre mi barriga.

-Si, ya veo que bien. Estos bebés cada vez crecen más. -Dijo encendiendo el monitor y pasando aquel aparato por mi barriga.

-Si, tendrá cuatro meses pero parece de seis. -Dijo Lucian sentándose a mi lado con Dan en sus piernas.

-Es normal al ser un embarazo múltiple. No tienen porque preocuparse. -Lucian y yo asentimos.

-¡Ya quiero ver a mis hermanitos!

-¡Daniel! -Lo regañó Lucian y tanto el doctor como yo reímos.

-Pues... Aquí están tus hermanitos, jovencito.

-¡¿Dónde?! ¡Yo no los veo!

-Mira aquí. -Él doctor apuntó a la pantalla. -Efectivamente, los bebés son varones.

Sonreí y luego me giré hacia Lucian y Daniel. Ambos miraban el monitor maravillados. -Aun tengo una duda...

-¿Cuál, campeón?

-¿Cuál es Elián y cuál es Elliot? -Lucian miraba de Dan a mi, y de mi a Dan sin saber que decir.

-Pues ahora no se sabe, pero el primero que nazca será Elián y el segundo Elliot.

*Fin del Flashback *

-... Y te traje estas flores. -Daniel se giró hacia nosotros. -Mami, las flores.

-Ah, si. Toma. -Le pasé la bolsa con las flores que habíamos comprado cuando salimos del hospital.

Lucian se agachó y retiró unas flores que ya estaban marchitas y Daniel puso las nuevas junto con una foto de él.

-¿Traiste la carta?

-Si. -Dije sacando la carta de mi bolsillo trasero. Todos los años Lucian y yo hacíamos una carta donde cada uno escribía lo que sentía y luego la quemabamos aquí.

Este año le había hablado de como mis sentimientos hacia Lucian habían cambiado y que a pesar de que aun no lo amaba lo quería más. También de los comportamientos extraños de Daniel y de mis bebés.

-¿Lista? -Asentí y rascó la cerilla para que esta se prendiera. Junté el papel con la cerilla y los tres vimos como los papeles se quemaban junto a la tumba de Alejandra.

Feliz cumpleaños, Alex.

•••

-¡Ay, pero que monadas! -Gritó Paula haciéndome reír. -Gracias por la foto. ¡Me encanta!