Capítulo 5: Problemas de familia.

374 28 0
                                    

+P.O.V:SOUL+

Cierro los ojos, dispuesta a la tortura que vendrá ahora. Como Zephyr no está, supongo que ahora Prisk puede ir mucho más allá dentro de mis recuerdos y llegar a herirme realmente al usarlos en mi contra. 

Sin embargo, no siento nada. El rojo no me invade como antes y tampoco tengo la sensación de que alguien se esté introduciendo dentro de mi cabeza. Justo antes de que pueda preguntarme que es lo que sucede, la fuerza que mantenía contra la pared se desvanece tan rápido como llego. 

Caigo de pie en el suelo y abro los ojos para comprender lo que sucede. Priscila mira furiosa a su hermana, la cual la mira con seriedad. 

-¿Qué crees que estás haciendo?- Le masculla entre dientes la más violenta de ambas. Su hermana la mira sin inmutarse y manteniendo su posición. 

-¿Qué no entiendes que lo que pasó ayer fue una advertencia? No debemos lastimar a la invitada del Alpha, ya que puede...- 

-¿¡Eres idiota o qué?! ¿En verdad le crees todo a ese viejo lobo? No puede matarnos por no obedecer una orden. Solo se enfadará y nos dejará en paz, como siempre.- Puedo ver un segundo de terror en los ojos de Prisk. Ella sabe que no es así, sabe de lo que es capaz de llegar Zephyr para conseguir lo que quiere y por eso no quiere arriesgarse a que ni ella ni su hermana resulten lastimadas. 

-Aún así, no debes arriesgarte.- Priscila le gruñe enseñando los colmillos furiosa. Es claro que no quiere comprender lo que dice su hermana. 

-No se que te pasa hoy, pero si tu no me ayudas lo haré sola.- La mujer se vuelve hacia mí, y entonces comienzo a sentir un dolor intenso en mi cabeza, como si estuvieran aplastandomela con kilos de acero.

No obstante, el dolor pronto se detiene cuando Prisk se coloca entre Priscila y yo. Cuando las miradas de ambas chocan, puedo sentir la tensión en el aire. 

-No te atrevas a tocarla.- 

-¿En serio estarías dispuesta a atacarme, hermana mayor?- 

-Claro que lo estaría si es por tu propio bien.- Unos segundos de silencio incómodo siguen. Ambas mantienen su mirada fija, pero al final Priscila gruñe fastidiada. 

-Eres una imbécil.- Ella se va con su grupo de matones y nos deja a las dos completamente solas. Me acerco a Prisk, pero ella solo se aparta enfadada. 

-No te me acerques, niña estúpida.- Con eso se va en la dirección opuesta, y nuevamente quedo sola. Suspiro agotada. No quería que nada de esto pasara, pero supongo que no puedo cambiar el pasado.

-Vaya, vaya. Esto no es algo que se ve todos los días.- La voz del muchacho de ayer me hace saltar del susto. No sentí cuando llegó.

Me giro a verlo y recuerdo vagamente que Noah había mencionado su nombre, pero no me acuerdo bien. Era...

-Lamento haberte asustado. Mi nombre es Axel y soy uno de los lobos de élite en esta manada.- Así que así llaman a aquellos miembros que tienen las habilidades de los símbolos. Supongo que es un término correcto, ya que prácticamente podemos ser más fuertes que el resto de los lobos. 

De golpe recuerdo la advertencia de Noah acerca de este tipo y retrocedo un paso, lista para atacar si es necesario. Axel se de cuenta al instante de lo que sucede y solo sonríe. 

-Hey, no te preocupes. No voy a pelear contigo hoy. Quiero esperar a que te recuperes para así enfrentarnos en nuestro máximo potencial. Estoy seguro de que será muy divertido cuando eso suceda.- Bajo las manos, pero aún no relajo ningún músculo. no puedo confiar en nadie de este lugar. 

Soul: La profecíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora