+P.O.V:SOUL+
Miro al cielo oscuro sobre mi cabeza y lloro. No... Keith... todo es mi culpa. Todo fue mi error. Debí irme apenas tuve la oportunidad. Si ellos me hubieran dejado morir, entonces él no estaría sin vida.
Caigo sobre el césped oscuro bajo mis rodillas. No es normal, sino que algo negro como alquitrán lo recubre. Solo quiero desaparecer, dejar de existir. Así nadie estaría muerto, nadie sufriría ¿por qué yo les causo tanto dolor al resto?
Siento mi cuerpo enfriarse, aún cuando no hay nieve en este ambiente de sueños. Casi puedo percibir como mi sangre se congela bajo mis venas y arterias, y como este congelamiento va provocando una agonía en mi interior. Solo quiero morirme.
De pronto, la cosa negra que manchaba el pasto desaparece frente a la presencia de alguien. Abro los ojos y veo unos zapatos masculinos frente a mi vista. No me importa, de hecho, es mejor que me mate. Aunque sería inútil. Después de todo, todo esto es la dimensión de los sueños. No puedo morir aquí.
El hombre se agacha y me mueve un mechón de pelo detrás de la oreja, sin tocarme. Con debilidad muevo mi cabeza para ver de quien se trata y casi al acto trato de levantarme al ver a Blake ¿otra vez en su sueño? ¿por qué?
Sus ojos verdes me analizan y veo preocupación en ellos, como antes.
-¿Por qué lloras, pequeña?- Me limpio las lágrimas y me alejo de él, sentándome y comenzando a arrastrarme hacia atrás. Sin embargo, él rápidamente me atrapa contra el suelo con su cuerpo. Este no es el momento para sus juegos e intentos por volver a conquistarme. Yo no volveré con él, aún si lo quisiera. No puedo dejar que él cuide a mi hijo.
Se acerca a mí y me remuevo nerviosa y asustada bajo su cuerpo. Tengo que odiarlo después de lo que hizo, pero.... mi unión con él no me permite odiarlo desde el corazón. Simplemente no puedo. Es como si negara una parte de mi misma al tratar de hacerlo.
Acerca una de sus manos a mi rostro, pero yo la golpeo antes de que me toque. No quiero sentir su sensación de electricidad, porque me recuerda a su abuso.
-¿Por qué hay sangre en tu rostro?- ¿sangre? Subo mi mano hacia mi mejilla y entonces veo como mis dedos se manchan de sangre. Olfateo el líquido carmesí con cautela y las lágrimas inundan mis ojos al reconocer el olor de Keith. Él era mi amigo... y... no pude salvarlo.
Coloco mis manos sobre mi cara y lloro otra vez. No quiero que me vea débil, no quiero volver a llorar frente a él, no quiero que siga teniendo una conexión conmigo. Me está volviendo loca todo esto. Mi mundo se tambalea de lado a lado por cada paso que doy. En un momento estoy cerca de la muerte y en otro, un amigo muere por mi culpa.
Las lágrimas humedecen mis manos ¿por qué? ¿por qué tengo que sufrir tanto? ¿por qué la Luna me hace esto?
Las manos grandes de Blake agarran las mías y me las aparta del rostro a la fuerza. Lo miro con los ojos llorosos. Maldita sea. No tiene que saber lo que me sucedió, no es parte de mi vida.
Su rostro me ve apenado, aún bajo esas duras facciones que siempre a tenido.
-¿Viste morir a alguien? ¿Un amigo?- ¿Cómo lo sabe? ¿Cómo es capaz de saber lo que pasa por mi mente? Me enfurezco, me enoja que tenga que saber lo suficiente de mí como para saber que me sucede. En el fondo, se que quiere ayudar, pero no está bien que esté a su lado. No es lo correcto.
<<No quiero hablar de eso....>>
-Crees que fue tu culpa de nuevo, ¿verdad?- Aprieto los dientes y desvío mi vista.
-Soul... no puedes volver a hacer lo mismo que con tu familia. No puede echarta la culpa de todo y cargar tu sola con el peso. Era tu amigo, pero ya no está. Lo único que puedes es mantener vivo su recuerdo.- Gruño.
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Soul: La profecía
Hombres LoboLibro nº3 de la Saga de Soul La vida de Soul después del clan sombra se ha convertido en una tortura día a día. Apenas puede mantenerse consciente de vez en cuando y cuando lo está, lo hace solo para acatar con odio las órdenes de Zephyr o para come...