Forever |Raura||Adaptada|

Capítulo XXXIII

Damiano:Oh, mi pequeña... -Papá acaricia mi cabello y yo siento que a cada minuto que pasa lo aprieto más a mi, porque siento que pasaran días en sus brazos, pareciera que cada momento y recuerdo pasan por mi memoria.

Laura:Papá, te extrañé -me incliné hacia atrás para mirarlo y toqué su rostro con ambas manos, luego volví a pegarme a él y él rodeó mi hombro con uno de sus brazos, pero aún así no me solté de él. Mamá tomó una maleta y mi profe la ayudó, papá traía un maletín en su mano desocupada, así fuimos hasta afuera.

Profesor:Podría llevarlos en mi auto -Mamá habló con él un momento, no escuché pero papá y yo seguimos caminando, me quité un poco los lentes para secar mis lágrimas y ponerme en frente de él, teniéndo que despegarme para mirarlo.

Damiano:Pequeña, ¿quién es él?, ¿por qué te trajo aquí?...

Laura:Mamá pensó que estaría bien si me olvidaba de un par de cosas, así que no fui a la escuela hoy, mamá dijo que sería genial si me metía a algún taller o algo para... distraerme, así que dije "¿por qué no me metes en algún taller de instrumentaría?", y ella dijo "de acuerdo, pero tendrás que empezar desde mañana, y nada de ir a la escuela ese día, descansa y toma el tiempo que necesites", bueno, dijo algo así... -La verdad es que de acordarme demasiado: no, porque lo dijo tan rápido y apresuradamente, después de ello, sé lo que pasó, ella corrió a su computadora portátil y buscó el lugar más cercano a nuestra casa, un taller, y encontró a mi profesor de piano, ¿debería explicarle que es mi profesor de piano? -Oh, bueno, y papá... él. -dije apuntando a mi profesor -es mi profesor de piano, lo conocí hoy tempranísimo, mamá dijo que en cuanto antes mejor, ya pagó mis clases, y está vuelta loca, quiere que lo más pronto cuando tu llegaras sería que pasaramos un día juntos, pero no estoy segura de eso, papá, ¿podría ser esta vez que no salgamos?, en serio preferiría quedarme en casa... -me rasqué la nuca, y el asintió inclinándose a mi y cargándome, me puso en su hombro y yo reí, pero me agarré fuerte a su camisa sin que me bote, soy muy frágil, delgada y para nada un peso, ok, lo entiendo.

Damiano:Descansarás pequeña, pero con una cosita que te pediré... -Me baja de su hombro y me pone en frente de él, pero esta vez haciendo que yo les dé la espalda a mi profesor y a mi madre, yo sonrío para papá y toma su maletín con ambas manos -¿Me tocarías algo en el teclado en cuanto lleguemos a casa..?

Laura:Pero... no tengo un teclado, ¿qué tal si tu vas a clases mañana conmigo por la tarde y... -papá me interrumpe.

Damiano:Oh, ¿entonces no quieres que te compre un teclado?- Y Salto encima de él haciendo que vuelva a afirmar su maletín en una mano y a agarrarme con la otra, lo abrazo fuerte manteniendo ambos brazos en su cuello para no caer, lo quiero mucho.

*

Laura:Gracias papá, en serio muchas gracias por esto, será mi regalo de cumpleaños adelantado -Le digo mientras recorro el sillón del living y voy hacia él para darle mi décimo o noveno abrazo del día -Muchas gracias -repito y lo abrazo.

Damiano:me gastaré Laura, ¿por qué tantos abrazos? -Me inclino hacia atrás y me aparto de él para tomar la gran caja que lleva el "Electric Keyborad".

Laura:Mmm ¿por que "te amo", papá?... -él me sonríe y me vuelve a abrazar haciendo que la caja caiga de nuevo al sillón y de mis manos.

Damiano:Bien, sácalo de esa caja y enseguida pónte a tocar, quiero escucharte -nos fuimos al sillón con la caja gigantesca.

Saqué el teclado lo más apresurada que pude de la caja, lo enchufé y presioné el botón rojo tal como indicaba en el librito de instrucciones, así que ya estaba encendido, puse las manos en las teclas del piano y me puse muy nerviosa. Miré a papá con una sonrisa tonta.