Capítulo LXXIV

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Ross se inclinó hacia atrás y sentí sus manos presionar un poco mi cintura, sus manos fuertes y duras me rodeaban y me hacían sentir cosquillas en mi estómago, como miles de mariposas volando ahí dentro, reí en voz baja y sonrió al estarme viendo, sus ojos, sus espléndidos y bellísimos ojos, sus ojos miel... me lograba completamente perder en ellos, me reflejaba también en ellos, sus pupilas estaban dilatadas, su sonrisa me decía más que mil palabras, esos labios carnosos, y algo rosados..., dejé de sonreír para abrir un poco mi boca, me sorprendía la clase de chico que pudo haberme tocado, jamás pensé que debía de haberme conseguido a alguien como él, nunca pensé que él llegaría a mí...

De pronto se fue inclinando hacia adelante, chocó despacio su frente con la mía mientras me observaba fijamente y reía tímidamente, me sentí algo nerviosa, ¿algo?, bueno: mucho. Muy nerviosa, su risita me decía que tramaba algo, pero podría confiar en él, siempre y cuando no hiciese nada muy arriesgado, me reí ante mi pensamiento, Ross jamás querría romper las reglas de nada, pero entonces dejé y alejé cualquier pensamiento que llegara a mi mente y me pegó a sus labios así de simple. Besarlo era como la primera vez, y siempre me enamoraba una y otra vez, cada día que estábamos juntos, sus palabras me animaban siempre, y me contenía el llorar diariamente por él.

Laura:Quiero esconderlo -le dije encima de sus labios. Él no abrió los ojos, pero yo lo hice, frunció el ceño ante mi propuesta y él negó con la cabeza, volvió a depositar un besito en mis labios.

Ross:pero yo no -dijo con voz firme y muy fuerte.

Laura:Quiero hacerlo, quiero esconderlo, ¿qué problema hay con que me concedas este pequeño deseo? -él rió.

Ross:¿Por qué debemos esconderlo después de lo que pasó?, todos saben que la que estaba en la foto eras tú -dijo abriendo sus ojos y mirándome con admiración -y yo te tomaba de la mano... no podemos seguir fingiendo, al menos yo ya no puedo... -me tomó de las manos y ladée mi cabeza, ¿ocultarlo o serle de frente?

Laura:¿Ya no puedes ocultarlo? -me puse rojiza de los nervios y la ansiedad. Él asintió y bajé mi cabeza, luego la levanté, sentía calor en mis mejillas y no quería que me mirara porque creo que me veía ridícula, entonces empezó a reír, con esa sonrisa característica que él tiene. Sonreí y me tapé el rostro con las manos mientras él se hacía hacia atrás, separándose de mí para mirarme, pero como me había tapado el rostro, él dejó de reír para reír en voz más bajita, se acercó hasta a mí de nuevo, porque logré mirar sus pies acercarse, entonces me quitó las manos de mi rostro, y besó cada una de mis manos.

Ross:No te avergüences -me dice riendo -si alguien llega a reírse de ti, pues dímelo y le patearé el trasero -sonreí.

Laura:Pues tú te has reído de mí -Él me abrazó, descansó su mejilla en mi hombro y me susurró al oído.

Ross:Pero sabes que me río de todo cuando estoy contigo... Tú alegras mi día, y me animas a seguir, reparas mi sonrisa, y actualizas mi humor..., como sea, siempre me apoyarás, estarás a mi lado para lo que sea, y siempre reiré... no por humillarte, sino porque me alegras siempre -Suspiré.

Laura:Fue Trixie -dije sin pensar en lo que dijo -Trixie Trinket ni más ni menos, ella hizo esas fotos, pero Denisse sabe la verdad, y son sólo fotomontajes, siento haber desconfiado de ti -Me agarré de sus hombros cuando me tomó de la cintura y me levantó para colocarme en la mesa.. Wow... decir "lo siento" y "lo lamento" me fuerza de cualquier manera... -él asintió y no dejó de mirarme -¿por qué me miras tanto?, ¿por qué no dices algo?, ¿tú sabías que esas fotos eran mentira, cierto?, ¿por qué no me regañas diciéndome "te lo dije"? -preguntaba y él no dejaba de mirarme con una sonrisa -Vamos, Ross, dime algo.

Ross:Te amo -Dijo algo, era muy lógico.

Laura:¿por qué jamás te enojas? -me pregunté para mí misma, pero no me había dado cuenta que lo dije en voz alta.

Forever |Raura||Adaptada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora