DE DYLAN.
Brooke.
Si esto fuese una carta de amor te diría que la única droga que he probado ha sido tu piel, si lo fuese te diría que tus labios son mi mayor vicio. Que tocarte es como sentir el mundo entero en mis manos, que ver tu sonrisa es como ver la octava maravilla del mundo. Pero nada se puede comparar con la música que sale de tu boca cuando te ríes de verdad, cuando te ríes conmigo.
Ese sutil movimiento que haces con la nariz cuando algo no te gusta. Como enarcas la ceja izquierda, porque nunca supiste alzar la derecha. La forma en la que tienes de pestañear justo antes de mentir. Como colocas el mechón rebelde de tu pelo rozando levemente tu oreja. Me enamoré de cada pequeño detalle tuyo, de cada parte de ti.
Por favor solo quiero que te quede una cosa clara, yo te he amado, te amo y lo seguiré haciendo. Porque tú fuiste quien me salvó, vivía en mi propio mundo de confort y tú llegaste a descolocarlo por completo haciendo que te viese. Y cuando te vi, no sabes el escalofrío que recorrió mi cuerpo cuando realmente miré tus ojos, porque veía dentro de ti. Tu alma.
Pero no es una carta de amor, es una carta para pedirte perdón y para despedirme.
Hoy voy a acabar con todo esto. No creo que nos volvamos a ver, pero espero estar haciendo lo correcto y que al menos uno de los dos pueda ser feliz. Todo sacrificio tiene su recompensa, y la mía es que vivas. Que vivas siendo tú, la Brooke de la que me enamoré.
Lo siento princesa, yo rompí tu corazón en miles de pedazos. Me prometí a mí mismo arreglarte, pero no puedes arreglar algo que no está roto. Descubrí que ya no eras mía, que alguien más había arreglado ese increíble corazón. Ama Brooke, ama con toda tu alma, porque nadie podrá amar tanto como tú.
Solo quería contarte por mí mismo que nunca quise hacerte daño. Fuiste un encargo al principio, pero te juro que te protegí todo lo que pude. Siento lo de tu padre, pero eras tú o él y claramente elegí hacerle daño a él. Ahora sé que muchas cosas fueron una trampa, que en realidad querían que entrases en esto, pero Brooke no hay nadie tan inteligente como tú. Puedes con ellos, puedes con el mundo, porque eres la persona más fuerte que he conocido. Y aunque a veces dejes de creer en ti misma, piensa que yo siempre creeré en ti.
¿Recuerdas el seis de junio? Sí yo también. Ese día casi te pierdo, ese día me di cuenta de que lo que sentía por ti superaba el trabajo o la amistad. Cuando vi la pistola en tu mano, mi corazón volvió a latir. No fui yo quien te la di y me arrepentiré de ello toda la vida, pero no sabía lo que tenía a mi lado hasta que vi que te perdía.
Sé que ya no tiene mucho sentido que me explique y más después de ver que nunca podremos estar juntos. Lo entiendo, nunca podrás fiarte de mí , aunque parte de tu ser me ame. Pero te pido por favor que me perdones. Siempre quise enseñarte a no tener miedo a nada, pero más concretamente a no tenerme miedo, porque temes amarme y lo entiendo. Yo tenía miedo de enamorarme de ti, aunque ahora sé que es lo mejor que me ha pasado en la vida.
Perdóname princesa. Siempre estarás en mi corazón, por eso me lo tatué. Desde que estuve contigo nunca pude pensar en nadie más, eso no lo dudes nunca. Mi corazón es solo tuyo.
Te quiero, te amo y sé feliz Brooke.
Hasta siempre,
Dylan.
A veces para salvarse a uno mismo, es necesario salvar a la otra persona. Esa que tiene tu corazón.
Al menos eso es lo que pensó Dylan antes de recibir la bala que era para Brooke.
Pues es el final. Me ha costado mucho hacer este epílogo, así que como no os guste me matáis lentamente...
No todo en la vida tiene un final feliz y hay cosas que nunca se averiguan.
Espero que os haya gustado al menos un poco la historia de Dama. Quiero daros las gracias por leer, por aguantar mis fallos en la escritura (me da pereza releer), por comentar siempre que queréis (porque es lo que más me gusta) y por votar a la estrellita.
Esta es mi historia favorita y solo quería compartirla con vosotros. No pretende hacerme una escritora profesional, solo entretener.
Gracias por vuestro apoyo a todos y cada uno de vosotros. Me quedaron muchos sin mencionar, pero os agradezco todo lo que habéis hecho por mí. Esto llega a su fin... Un beso a todos y espero que leáis la nota que subiré luego... Con la pregunta del millón.
