Siempre que lo recuerdo, me siento atrapada, atrapada en mí, como si mi interior fueran telarañas y yo me enredara en ellas para no escapar de sus ojos, sus lindos y redondos ojos. Siempre que sucede, mi final es un llanto desalentador. ¿En qué momento me equivoqué tanto...?

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La soga
AcakNo se puede evitar algo que nunca se quiso pero se actuó para que sucediese.