Red Light [GTOP]❤️

Capitulo 6. ¿Qué es lo que te pasa?

POV GD

Desperté por el ruido de los claxons sobre la avenida, ya era de día pues el sol se hacía notar por la tela fina de las cortinas, me removí en silencio, Seung se encontraba aún a mi lado, dormido y atractivo, todo de él era mágico y excitante, quite un mechón de cabello que se asomaba sobre su frente, casi llegándole a los ojos, no me pude contener y bese su frente, no sé porque lo hice, instinto quizás, me levante de la cama y me di un baño, debería de haberlo despertado cuanto antes, si Taeyang llega a enterarse de que pase la noche con este hombre y sobre todo sin cobrar me mata.

Pero no lo hice, su compañía me hacía sentir tranquilo, además de que era mi primera vez pasando la noche con alguien que no fuera Seungri y de manera sexual, salí de la ducha y comencé a secar mi cabello al salir a la habitación, ahí estaba él mirándome tiernamente.

-Buenos días- le sonrió.

-Buenos días.

Comienzo a tomar un bóxer de la cómoda, tanto en casa como aquí tenia cambios por si algo sucedía, sentí los brazos de Choi rodearme por la espalda me confundía, y fue cuando llegue a darme cuenta de que nada de esto estaba bien.

-Suéltame por favor.

No dice nada y se aferra más a mi cuerpo, me remuevo fingiendo molestia, es algo que realmente no siento pero tengo que hacerlo.

-Te he dicho que me sueltes.

-No lo haré.

-Te lo digo de una puta vez ¡suéltame!

Choi se separó de mi bruscamente, escuche el sonido de la hebilla de su cinturón subiendo.

-No sé qué lo que te ha pasado.

Volteó y lo veo remangando las mangas de su camisa blanca algo arrugada después de haber pasado toda la noche en el piso de la habitación.

-No me ha pasado nada.

-Anoche me has dejado dormir, ¿Por qué?

-No lo sé, impulso de idiotez tal vez.

No pienso mis palabras y escupo con veneno, realmente no quería decir eso, Seung baja la mirada y recoge el reloj que yace sobre la cómoda para ponérselo.

-Déjame guiarte a la salida, si el jefe te ve tendré problemas.

-Vale.

Se sienta en la cama y espera pacientemente a que me vista, sin mirarme, sin tocarme, lo deseo, si pudiera hacerlo con él ahora mismo podría morir feliz, me arregle y trate de calmar la erección que quería levantarse entre mis pantalones.

Caminamos fuera de la habitación con sumo cuidado, lo bueno es que no había rastro de Tae ni de nadie, la recepción vacía, el reloj marcaba las 8 de la mañana, demasiado temprano aún, abro la puerta principal sin decir nada, y él me mira esperando.

-¿Qué es lo que esperas?

Suelta un risa irónica bufando y se va, cierro la puerta tras de él y me tiro de espaldas contra ella, hago mis dos manos puños y tiro las llaves, estoy enojado, enojado por dejarle ir sin siquiera decirle que me había encantado la noche anterior, que volviera, que me diera su número, que me buscara, pero a la vez me doy cuenta de lo patético que se escucha y de que él no es más que un simple cliente y yo la misma zorra que se acuesta por unos dólares para vivir, a veces odio ser lo que soy, pero este es el camino que he elegido, y estaba en el peor de los momentos, pues él me había hecho el amor y yo solo lo había echado sin siquiera darle las gracias, Taeyang apareció frente mío.