14. Titanium

58 5 0
                                    

Es la hora de comer y he venido con Piero a un restaurante de la Plaza Mayor. Dijo que invitaba él,- ¿cómo iba yo a rechazar una propuesta como esa? Nada tuvo que ver que fuese un "fanático de lo sensual" en toda regla-.

- ¿Cuánto tiempo te quedarás aquí?- le pregunto interesada.

- Pues en lo que término la comida- me dice mientras corta un pedazo de su filete.

- ¡Já! Pero mira que eres gracioso- digo haciéndole burla y él sonríe.

Quién me diría que uno de los jefes-jefísimos sería una persona tan agradable y divertida. Hemos congeniado bastante bien.

- Pues no sé hasta cuándo estaré en la ciudad. Hasta que alguien no la cague en otro sitio no tengo porqué irme- me explica.

- ¿Has estado más veces en la delegación de Madrid?

- Sí, pero pocas. Normalmente quien se encarga de Madrid es mi socio, pero esta vez le han surgido unos inconvenientes y no ha podido venir.

- ¿El Señor Frei?- supongo que con "socio" se referirá a él.

- El mismo.

- Qué raro- quería decir eso para mis adentros pero sin darme cuenta lo digo en voz alta.

- ¿El qué?

- Nunca he visto al Señor Frei.

- Puede ser. Si tu departamento hace las cosas bien, ¿para qué va a necesitar ir a veros?- me pregunta guiñándole un ojo.

Este hombre no para de ponerme nerviosa. Yo me encojo de hombros respondiendo a lo que me ha dicho.

- Cambiando de tema,- dice y yo levanto mi vista del plato para mirar sus oscuros ojos,- ya que no conozco la ciudad, podrías hacerme un tour. Más o menos... ¿Esta noche?- yo suelto una carcajada.

- Mira que no eres listo ni na'- le digo negando con la cabeza- Un lunes, ¿salir?

- ¿Qué más da lunes que martes si el alma es joven?- me pregunta teatralmente y yo no puedo no reír.

Se nota que este hombre se lleva a las mujeres de calle. Listo, guapo, con mucha labia... ¿Quién en su sano juicio lograría resistir a sus encantos? Cada vez me cae mejor.

- Nada, si quieres un tour, ya que supongo que tour para ti será conocer bares y discotecas madrileñas,- comienza a reír-, entonces tendrás que esperar al viernes.

- Bueno, la espera merecerá la pena- dice alzando varias veces las cejas.

- Sí- le digo coqueteando para seguirle el juego.- Tú, yo... ¡Y todos mis amigos! Te caerán bien, ya lo verás- su sonrisa decayó pero de pronto comienza a reír a carcajada limpia.

- Mira que eres difícil, Rocío- yo sonrío negando con la cabeza y continuando con mi comida.

°°°

Llego a mi casa cansada del trabajo. Luck me recibe contento- debo recordar invitar a un café a Nacho por quedarse con él-, pienso.

Empiezo a desvestirme para entrar en la ducha. Enciendo la televisión y pongo las noticias- cada día más deprimentes-. Justo en ese momento, mi teléfono.

- ¿Diga?

- ¿Te has olvidado ya de mí?- pregunta una voz en inglés al otro lado del teléfono y yo sonrío.

- ¿Cómo poder hacerlo?

- Ya, ya... Pero desde que te fuiste no me has llamado.

- Lo siento, Emily. He estado muy liada estos días- me excuso.

Rocío Y Sus Novios Donde viven las historias. Descúbrelo ahora