Vecinos ↝Oh Sehun exo

06

Sehun

Introducí el código y entré en el apartamento de Soomin. Ésta vez con una gorra, el cubrebocas y unos tápers con comida.

- Con permiso~ - dije mientras cerraba la puerta.

Soomin estaba sentada tomando un bubble tea, y nada más verme lo escupió entero hacia su televisión.

- Yo no pienso limpiar eso - le dije mientras señalaba a la televisión ahora manchada de bubble tea.

- ¡¿Al final viniste?! - dijo ella casi en un grito y empezó a reírse - estás loco, estás completamente loco.

Comimos juntos hablando de temas varios. Decidí venir a encargarme de Soomin, a parte de porque era por mi culpa, también porque me cayó realmente bien desde el principio. Era fácil hablar con ella, cómo si nos conociéramos de toda la vida. No creo que llegue a volverse loca incluso si acaba reconociendome.

Soomin

- ¿Entonces no me vas a decir tu nombre?

- No - dijo como si nada mientras tomaba mi ultimo bubble tea.

Mis ojos se abrieron en sorpresa ¿iba en serio?

- ¿Qué? - dije, a lo que él simplemente se encogió de hombros

- ¡Encima que te doy el honor de tomarte mí último bubble tea no me dices ni tu nombre! - dije indignada - ¡Devuélvemelo!

- No - dijo él mientras se intentaba levantar

Enseguida me abalancé sobre él a por mi bubble tea. Cayó de espaldas al sofá casi derramando esa preciosa bebida, por suerte yo logré sujetarla antes.

- Qué crees que haces? - dijo mientras que se levantó acercándose a mi por la bebida.

Aunque me doliera, podía hacer algunos movimientos y eso fue lo que aproveché para ir retrocediendo mientras que él se acercaba. Sus ojos tenían un brillo divertido y se iban achicando ¿estaba sonriendo? Es un misterio que nunca averiguaremos, porque justo entonces llegué al borde del sofá. Mi mano cayó y con ella todo mi cuerpo, por suerte mi amigo sin nombre llegó a agarrarme antes de caer del todo.

Lo tenía abrazando mi cintura y con sus manos sujetando mi espalda.

- P-perdón - dijo tartamudeando, espera ¿eso es un sonrojo? Como si pudiera haberme oído, se tapó con la gorra.

- Voy a limpiarlo - dijo y se levantó.

-•-

- ¿Sin nombre? - grité por la casa

Habíamos decidido jugar al escondite, si, al escondite con una chica que no se podía mover.
Rodé por el pasillo llegando a mi habitación.

Debajo de la cama no estaba, rodé hacia el armario. Allí tampoco.
Salí de mi habitación, en el despacho no estaba, en la cocina tampoco, ni en el baño... ¿Dónde entonces?

Cuando de repente vi algo moverse sobre la encimera - ¿que demonios?

Me volví a sentar en el sofá y sobre la encimera de la cocina le vi a él hecho una bolita.

- ¿Me estás tomando el pelo?

- Sólo aprovecho mis ventajas - dijo bajando de la encimera.

- No, ¡te estás aprovechando de mis desventajas! Debería compararme una silla de ruedas para poder ver más que hasta la altura de los pies de la gente.

Él se río fuertemente.

- Cuando estés mejor jugaremos de nuevo - dijo guiñando un ojo

- Cuando estés mejor jugaremos de nuevo, bla bla bla - dije burlándome de él. A lo que él sólo afiló su mirada.

- Por mí - dijo mientras picaba la pared detrás de mi, acercándose peligrosamente a mi cara.

¿Me estaba retando?

- ¡No vale, ni siquiera me sé tú nombre! ¿Cómo iba a hacerte perder?

- Hasta mañana, Soomin - dijo mientras recogía su chaqueta

- ¡Siempre te vas cuando hablo de este tema! - dije indignada.

Me hizo un signo de victoria mientras sonreía y abría a puerta para irse, cretino.

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Me voy durante unos días de convivencias así que a lo mejor hay un parón de una semana...
De todos modos muchas gracias por sus votos y por leer este fanfic, me hacen muy feliz! :')