Vecinos ↝Oh Sehun exo

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Soo Min

Bubble me contó que volvía a trabajar, cosa que me alegraba ya que la primera vez que le pregunté por eso no me respondió nada. Además yo volvía a la universidad por lo que me alegraba no tener que dejarlo sin hacer nada a partir de ahora.

Se creó un corto silencio y Bubble ya quería irse. Entonces recordé lo que me dijo Yoora, hoy debía preguntarle.

- Bubble - lo llamé. Dios, podía notar como mis manos empezaban a sudar, mi respiración también se aceleró. Él se paró y se giró a ver qué quería - Esto... Nos hemos besado ya dos veces. Yo... - hice una pausa para tragar saliva, se había creado un nudo en mi garganta - Q-quiero saber qué somos.

Bubble quedó callado por unos segundos, hasta que al fin contestó.

- Nosotros... - hizo una corta pausa - No somos nada.

Sus ojos no expresaban absolutamente nada, estaban totalmente vacíos mirándome. También su tono de voz era frío.

Mis ojos empezaban a cristalizarse, por mucho que intentara no llorar ante él.

Quería hablar, preguntarle por qué pero mi voz no salía.

Bubble cerró los ojos y se colocó bien la gorra. Cómo si estuviera molesto.

Entonces dió media vuelta y entró a su apartamento.

Las primeras lágrimas cayeron sobre el mármol del pasillo. Miré al suelo, seguían cayendo y cayendo.

Claro que no somos nada, tiene sentido. Nunca he visto su cara, yo le he contado todos mis secretos como una estúpida y él nunca me ha contado nada de su vida.

Entré a mi apartamento y cerré la puerta detrás de mi.

Las veces que me besó fueron por compasión o para callarme. Nunca hubo nada más. Sólo me cuidó por que se sentía culpable.

Jamás tuvo interés en mí y yo fui tonta al creer que sentía algo.

Lavé mi cara en el baño, me vestí y me maquillé. Hoy iba a ser mi primer día en la universidad desde que me herí y no podía estar más ansiosa por salir de éste lugar.

Mi móvil sonó.

- ¿Quien es? - pregunté.

- Ahh Soomin te estamos esperando todos - dijo Yoora a través del aparato.
- Ya bajo - colgué y cogí mi mochila.

Salí del apartamento y corrí al ascensor para bajar a la planta baja.

Saludé al portero y pasé por delante de la multitud de fans que esperaban a no sé quién.

Crucé hasta llegar lejos de la multitud, ahí vi a mis amigos.

Yoora y su novio MinKi, Yuri, JongBin y ChungHee. Ellos cinco eran mis amigos más cercanos. Tampoco era una antisocial en la universidad, pero siempre que podía me juntaba con ellos.

- Ya era hora - se quejó Yoora - ¡Vamos a llegar tarde por tu culpa!

Todos se giraron en mi dirección y me sonrieron

- ¡Min! - Yuri corrió a abrazarme - Eres una horrible persona, en todo éste tiempo no has hablado conmigo. Me he tenido que enterar de todo por Yoora - dijo haciendo un puchero.

- ¿Ya estás mejor? - preguntó MinKi, a lo que yo respondí asintiendo.

- Vamos que se nos hace tarde - dijo Yuri.

Empezamos a caminar por el camino que tomábamos siempre desde estos últimos dos años.

- Yoora nos contó que ibas a ser modelo - dijo JongBin subiendo y bajando las cejas, haciéndome reír.

- Ni idea de si aun me quieren por ahí, la vez que intenté ir casi me quedo paralítica - dije mirando a Yoora esperando que ella supiera algo.

- Ohh si, sí que te quieren ahí. No han parado de enviarme correos preguntando por cómo estabas y que estaban impacientes por verte.

- Wow Min, cuando seas famosa me llevaras a conocer chicos guapos ¿verdad? - dijo Yuri

- Ni siquiera sé si eso se me dará bien - dije dudosa

- Eres guapa Min, puedes estar tranquila. Todas las empresas querían contratarte - habló por primera vez ChungHee, aunque no me miró en ningún instante y sólo se tapó más con el cuello de su chaqueta.

- Gracias... - dije en casi un susurro.

Seguimos caminando hacia nuestra universidad. Hacía dos años que los conocí, cuando empecé la carrera de psicología, a la que ellos también iban.

A Yoora ya la conocía de antes, pero al resto no.
JongBin era un chico bastante alto con cabello marrón, a él lo conocí gracias a MinKi. Nos hicimos rápido amigos y lo seguimos siendo.

La forma en la que conocí a Yuri no fue igual de buena. La primera vez que la conocí fue por una "pelea" que tuvimos, por lo que al principio pensé que era una perra amargada. Ella también lo pensaba de mí, normal.
Pero después de poco tiempo nos hicimos amigas y ahora es más que una hermana para mi. Ella tenia el cabello teñido de una especie de naranja claro y es de las chicas más guapas y con el ego más grande que he conocido nunca.

ChungHee se hizo amigo nuestro casi al mismo tiempo. Lo conocí en una de las clases en las que no estaba con el resto. No habla mucho, o el menos no conmigo pero siempre me ha cuidado desde que le conocí. De alguna forma me siento segura con él, aunque suene tonto.

Después de 20 minutos caminando llegamos por fin a la universidad, dónde pasamos todo el día de aula en aula.

-•-

- Adiós - me despedí de todos con la mano.
Ya habíamos acabado todas las clases por lo que me volvía a casa. Había aguantado el día entero sin llorar y sin hacer sospechar a nadie pero, joder.

El problema con Bubble no estaba solucionado, los sentimientos seguían dentro de mí y todo lo que quería era estar sola para poder llorar y engordar a base de helado.

- Espera - dijo ChungHee mientras se acercaba a mi - Te acompaño a casa - me sonrió y cogió mi bolso para llevarlo él.

- Gracias - susurré y empezamos el camino hacia mi apartamento.
Siempre que estaba con él me entraba algún tipo de vergüenza extraña, por lo que casi nunca hablábamos.

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Hiiiii, por fin actualicé. Pero traigo buenas noticias, porque creo que ya sé qué camino tomará el fanfic así que ahora es más fácil pillar inspiración y eso :D

Lo que se vienen se lo imagina nadie, así que estad bien atentas ò-ó