Capítulo 12

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El gran salón está vacío y oscuro, David se encuentra de espaldas a mí, en el otro extremo del lugar. Mi voz apenas es audible, lo llamo una y otra vez pero no parece percatarse de mi presencia. El incomodo y largo vestido de novia que traigo puesto me entorpece al caminar, siento que me muevo rápido, pero aún así no logro llegar a él.

- ¡David! - Grité.

Continúo mi camino. Al alzar la mirada nuevamente y dirigirla hasta donde permanece mi prometido, me sorprendo al descubrir que ya no se encuentra sólo. Habla con una mujer a la cual no logro distinguir, no puedo visualizar su rostro, debido a la penumbra que se acentúa en todo el lugar.

- ¡David! - Repito.

Pero él parece no escucharme. La mujer rodea el cuello de David con sus manos y se acerca a su oído, él sonríen encantado. Siento que mis viseras se retuercen cuando veo que posa sus manos en la espalda de la mujer y bajaron hasta el trasero, para luego acercarla a su cuerpo y devorarla con un beso. Mi corazón pretende salir del pecho y mis mejillas comienzan a humedecerse debido a las lágrimas que empiezan a deslizarse, me falta el oxígeno.

- ¿Quién traicionó a quién?. - Preguntó Harry, cuando apareció de pronto a mi lado.

Su ceño está fruncido y sus facciones tensas. Me observa por un instante y luego dirige su vista hasta su hermano, yo la sigo y siento como mi corazón se va rompiendo de a poco al observar la escena. Lo único que deseo es desaparecer.

- ¡Eileen! ¡despierta!. - Escuché la voz de David a lo lejos.

- ¡Despierta Eileen!. - Lo escucho nuevamente.

Ahora está mucho más cerca. Al abrir los ojos siento que el alma regresa a mi cuerpo, ya que todo ha sido una pesadilla. David se encuentra a mi lado y luce preocupado.

- ¿Estás bien?. - Me pregunta.

- Si. Ahora si. - Respondí.

- Solo fue una pesadilla. - Dice él y me rodea con sus brazos. - Todo está bien.

Instintivamente busco su cuello para esconder mi rostro allí. Claramente las palabras de Harry han calado en mi subconsciente, llevándome a aquel lugar fantasmagórico, donde he tenido que presenciar esa escena tan dolorosa. Con todas mis fuerzas trato de borrar todo eso de mi mente, gracias al cielo todo ha sido una muy desagradable pesadilla.

- ¿Mejor?. - Pregunta David.

- ¿Me amas?. - Pregunté de pronto.

Necesito escucharlo para sentirme mejor y poder pasar la página.

- Por supuesto que te amo. - Responde.

Con tiernos besos comienza a distraer mi mente, pero luego de un rato nuestros cuerpos están a punto de fusionarse para ser uno solo. Respondo a su urgencia de la misma manera, sus manos recorren todo mi cuerpo, besa mi cuello y baja hasta mis senos, el contacto de su lengua sobre mi piel es delicioso. Mientras juega con mis pezones, una de sus manos masajea mi clítoris, el torbellino de sensaciones que se desprenden de ese punto de mi cuerpo, me estremece y me pierdo en ellos.

- Te amo. - Dice antes de introducirse en mi interior.

Me dejo llevar por todo lo que David despierta en mí. Entre besos, carias y movimientos rítmicos, desemboco en un liberador y espectacular orgasmo.

********

Después de ese mal sueño, David ha mejorado mi mañana como solo él lo sabe hacer, pero la felicidad no duró como quisiera ya que ha tenido que marcharse a su oficina. No se había ido aún, cuando ya empezaba a extrañarlo.

BELLA TRAICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora