La Guardaespaldas

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Frank me había mostrado cada rincón de esa hermosa mansión, al único que no había visto era al dueño, Michael 'el engreido', después me había presentado a cada una de las personas que trabajaban ahí. Al terminar todo el recorrido que nos tomó casi dos horas, pedí permiso para ir a reportarme ya que si no lo hacía iba tener serios problemas, cuando frank me dio permiso salí de Neverland y tome un taxi hasta el centro de Los Angeles donde se encontraba una sede especial del servicio secreto, ya había ido a ese lugar una dos veces así que recordaba el camino. Al llegar y reportarme con el presidente de la sede este me cedió un auto para poder transportarme cuando sea necesario, me había sorprendido su reacción amable ya que el nunca fue amable conmigo desde la ultima ves que lo insulte "-cree que por que soy mujer, soy menor cosa? Llevo poniendo esfuerzo y trabajo desde los 19 años señor, e dado mi vida entera en el servicio secreto y e arriesgado mi vida y asumir las consecuencias al cuidar al hombre mas importante de Los Estados Unidos, cree que soy menor cosa? Usted es un imbécil que se la pasa haciendo nada sentado atrás de un escritorio y porque esta toda esta gente conmigo se salva de que le de una buena golpiza"
Rei para mi misma saliendo de la oficina, ese día estaba muy molesta ya que el mismo hombre con el que acabo de hablar se burlaba de mi y decía que no merecía este trabajo porque era una mujer, ese mismo días horas antes de la discucion me habían disparado en el pecho, en el chaleco antibalas pero me tuvieron que llevar al medico ya que no me entraba oxigeno, nos habían mandado en busca de un traficante de armas, había recibido muchas veces balasos en el pecho con el chaleco, en los entrenamientos era obligatorio pero nunca me había faltado el aire a tal punto de que me tuvieran que llevar al hospital.

Al salir de la sede ya con mi nuevo auto prestado temporalmente, me dispuse a volver a Neverland, me gustaba de alguna forma el nombre del lugar, me hacía volver a mi infancia cuando pasaba horas leyendo el libro de Peter Pan. Me detuve en un semaforo y mire hacia el cielo, estaba nublado, que increíble cambio de clima hace dos horas atrás había un sol que te cegaba y ahora parecía que el él cielo estaba a punto de caer en pleno Junio. El semáforo se puso en verde y acelere, empezó a caer la lluvia.
-Diablos!! Que le pasa a esta ciudad? -dije frustrada ya que la lluvia empezaba a caer con fuerza, mire mi reloj 4:05 tenia que llegar a Neverland antes de que anochezca porque luego oscurecía y se pondría difícil conducir bajo la lluvia por la carretera 'o será que tienes miedo' ok si le temía un poco, a las tormentas y al ver al cielo una ves mas parecía que una sé acercaba.
5:37 estaba aparcando en la entrada y tuve que bajar para que el de seguridad me abriera, el imbécil no me quería abrir, al entrar después de mostrarle mi placa y decirle quien era ya empapada estacione el auto al lado de lo que supuse era el auto en el cual frank me trajo, bajé del auto bajo la lluvia y cuando estuve a punto de entrar veo a una niña de blanco a lo lejos al costado de un árbol, estaba lloviendo con furia que hacía una pequeña bajo la lluvia, mire la puerta y luego volví árbol mirar hacia donde estaba la pequeña esta seguía en el mismo lugar, se giro y se fue alejando, estaba oscureciendo.
-No lo hagas _____! -me dije a mi misma, tarde ya había ido en busca de esa pequeña - porque lo haces? joder-
Corrí hacia donde se había ido la pequeña pero no había nadie, me detuve al costado del árbol donde la visto y mire para todos lados en su busca pero no la vi por ningún lado. Me dispuse a volver algo confundida bajo la lluvia, estaba toda empapada, al llegar entre a la casa y me quede parada en la puerta pensando lo que había ocurrido, tal vez mi mente me jugo una broma, tal vez sólo la imaginé, tal vez... Ella... Ella, era la niña de la foto..

-Quien eres?-curioso-
-reaccione- am...yo...a mm 'diablos!'-no me salia palabra alguna, me distraje, lo que tenia en frente, jamás había visto una mirada así, unos ojos tan penetrantes, no lograba prosesar las cosas en mi cabeza mi corazón se aceleró y no podía dejar de mirarlo, era un hombre tes morena, con cabello ondulado que lo llevaba en una coleta mal echa y caían algunos mechones sobre su frente, algo delgado y con una mirada curiosa esperando mi respuesta de quien era yo.

-am, te encuentras bien? -pregunto algo preocupado el moreno-
-am... si...-Dije dije sin dejar de mirarlo-
-me vas a decir quien eres?-pregunto algo divertido? Si, al parecer le divertía mi reacción-
-yo!-reacione- yo 'diablos,diablos reacciona joder' soy ______ Swan, y quien eres tu? Trabajas aquí? -pregunté al moreno, ya que no tenia idea de quien era aunque me hacía cara conocida-
-jajaja jajajajaja - río divertido 'de que carajo se ríe este imbécil? '
- O.o ?-
-jajaja... lo siento -agachó la mirada y volvió a mirarme- lindo nombre, y no, no trabajo aqui... Soy el dueño de esta casa -me dijo timido- Soy Michael Jackson -estrecho su mano hacia mi-
-oh dios -dije en vos baja, eres una imbécil, como no vas a reconocer al engreido al cual vas a cuidarle el trasero, idiota me dije a mi misma en mi mente- Disculpe señor Jackson, yo no, yo no lo reconocí -dije agachado la mirada apenada-
-el frunció el ceño y me miró por unos segundo sin decir nada- No me re conociste? Jajaa soy muy famoso, como no me re conociste? -mirándome con una sonrisa-
- am disculpe de nuevo, no estoy al pendiente de los famosos y olvide leer la información que me mandaron de usted-
-oh entiendo, aunque no se que haces aquí, no me has dicho- mirándome confundido e intrigado-
-oh si! Soy del servicio secreto, me enviaron para cuidarlo, ya que me informaron de sus amenazas, voy a ser su guardaespaldas hasta que encontremos al sospechoso- dije firme-
-oh ya veo, con razón el atuendo -mirándome de arriba y deteniendose en mis zapatos- cuantos años tienes? -pregunto mirándome intrigado-
-'idiota' pensé - tengo 23 años señor Jackson-
-sorprendido- oh... de acuerdo, ya deja de decirme señor, me haces sentir como un viejo y no lo soy jajaja- sonrindome-
-oh disculpe no suelo tutear en mi trabajo, se que me ve como una joven pero tomó mi trabajo muy enserio- dije amable pero mirándolo seria-
-pero puedes hacer una escepcion, podemos llevarnos bien además vamos a tener un buen timpo juntos- dijo sonriendo amable- oye estas mojada ve a secarte, no quiero que tomes un resfrío -dijo muy dulce- si me necesitas nos dudes en llamarme, frank no está y vuelve mañana, voy a estar en la biblioteca-
-si, de acuerdo, gracias-
-ok - me sonrió y se dio la vuelta para irse-
-apa, lindo moreno- dije en vos muy baja para que no me oyera, tenia lindo trasero- que? ______ le miraste el trasero? Dios! Que te sucede? -me dije a mi misma en vos baja mientras iba a mi habitación-