2.It was this type of love that destroys you, but you cannot live without

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14 años.

Harry tenía otros amigos, sabía que tarde o temprano ya no iba a ser la única.
Un día se le ocurrió llevarme a conocerlos, pero las cosas no salieron muy bien. No le solía caer muy bien a la gente.
Pero los entendía, ellos eran los más queridos en la secundaria y Harry encajaba perfecto en ese grupo, era "el chico más caliente de la secundaria" según las chicas. Yo no era nadie. Era la rara allí, no encajaba.
Comenzaba a ver las diferencias, pero Harry era indiferentes a ellas.
-No les hagas caso- me solía decir constantemente-Solo están celosos-.


15 años.

Tomé mi móvil y marqué su número de memoria.
-Scar, ¿a qué se debe tu llamado?-dijo él, como modo de saludo.
-Me preguntaba si querías acompañarme a una cena familiar con mis abuelos, ellos están encantados contigo-dije cruzando los dedos.
-Claro, en una hora estoy allí, a eso de las cuatro-.
Corté y decidí cambiar mi ropa cotidiana por algo más formal.

Harry comenzaba a salir con chicas, cada semana cambiaba de novia y se descargaba en mí, contándome cada una de sus experiencias. Un recuerdo se me vino a la mente.

-Que tontas son las chicas, no las entiendo-negaba con la cabeza y el ceño fruncido.
-Uhm, olvidas el hecho de que yo soy una chica también-señalé.
-Scar, tu eres especial-.
Cada vez que pronunciaba cosas como aquellas mi corazón se aceleraba de forma extraña y no entendía el por qué, mis mejillas se coloreaban de un rosa pálido. Odiaba sentirme así de vulnerable-tú no eres para nada como el tipo de chica que salgo-terminó y sentí que toda esa vulnerabilidad se hizo dolorosa.
Él por su parte, ni lo notaba. Pero yo, comenzaba a sentir más que amistad por él pero por el momento, no lo quería admitir.

Miré el reloj y vi que ya era la hora de que Harry pasara por mi, me pareció extraño que no hubiese llegado aún, ya que era muy puntual.
Pasaron diez minutos, treinta, una hora y media, hasta que el reloj marco las seis. Dos horas.
Marqué su número, un poco confundida y asustada, tal vez le había pasado algo en el camino.
Luego de varios pitidos, por fin atendieron.
-Harry, ¿qué sucedió? Ya pasaron dos horas y n-hablé pero alguien me corto enseguida.
-Lo siento, Harry está ocupado en cosas más importantes en este momento como para atender a una niña-contestó la voz chillona de una chica, con una risa patética.
Corté enojada y bajé indignada las escaleras para pedir una camioneta que me llevara hasta la casa de mis abuelos, sola.
Luego de eso, lo ignoré por una semana.

16 años.

Alguien se tiró encima de mi, despertándome.
-Harry, quítate de arriba mio-.
-¡Hoy es un día muy especial! Sal afuera y ven a ver el coche que me obsequiaron mis padres por mis 16 años-gritó emocionado.
Salí de la cama y lo abracé fuerte. Felicitándolo por su día.
Salimos y vi un auto descapotable allí. Todavía no podía creer que le hubiesen regalado tal cosa.
-Wow, Harry, ¡que auto! ¿Me llevarás a pasear en esta hermosura?-dije apreciandolo.
-Claro, cuando quieras-contestó.
-¿Qué tal si salimos hoy por la noche, para festejar tus 16 años?-propuse.
-Lo siento Scar, hoy saldré con mis amigos-respondió.
-Está bien, saldremos otro día-dije un poco más apagada, pero su rostro se veía radiante.
-¿Recuerdas a la chica de la que te hable el otro día?-.
-Harry, me hablas de muchas chicas-dije rodando los ojos.
-Supongo que tienes razón. Bueno la cosa es que la chica de la que te hablo, aceptó salir conmigo. Hoy se las presentaré a mis amigos y saldremos todos juntos-.
-Me alegro por ti-le dije, ignorando la punzada directa de mi corazón. Sonreí falsamente, a pesar de la angustia generada.
Luego de que Harry se marchara, sentí un vacío enorme y me recosté en mi cama todo el día.


Cumpleaños número 17.

Harry me invitó a que pasara el día en su casa. Acepté encantada, total mis padres no lo recordarían, mi falta no les llamaría la atención.
Salí apresurada, sin avisar y me dirigí hacia su casa que se encontraba a unas cuadras de la mía.
Toqué el timbre y me atendió su sirvienta. Me hizo pasar y me felicitó por mis cumpleaños. Le agradecí y subí rápidamente hacia la habitación de Harry.

Dos puertas antes, comencé a escuchar sonidos guturales, provenientes de allí. Me acerqué más y pegué mi oído en la puerta.
Oh, sabía exactamente lo que estaba pasando. Estaban teniendo relaciones allí adentro.
Espere unos minutos, pero luego al ver que la situación continuaba, tome mi móvil y marque su número.
-¿Si?-.
-Harry, estoy yendo hacía tu hogar, ¿recuerdas que íbamos a salir?-.
-Scar, por supuesto que lo recuerdo, lo siento, lo tendremos que posponer para otro día, en este momento estoy en una reunión muy importante con mis padres-dijo muy seguro, las mentiras salían de él como si fuera totalmente natural.
-No te preocupes, lo dejamos para otro día-solté sin más y corte.

-¿Quién era amor?-escuché la voz de la chica.
-Nadie importante, solo una chica que está empecinada con que acepte salir con ella, pero no hablemos de esto, ¿en qué estábamos?-cambio de tema, con voz seductora.
Me deje caer por la puerta, derrumbada y esperé unos pocos minutos hasta que mi respiración se acompasara.
Corrí escaleras abajo, con cuidado de no tropezarme, ya que mi vista se comenzaba a nublar y salí disparada por la puerta.

Llegue a mi hogar pero me desvié por el enorme bosque que lo rodeaba.
Recordaba cada camino que yo misma había hecho a lo largo de los años.
Llegue hasta el centro de él, en donde un enorme árbol se alzaba y me senté en una de sus enormes raíces que sobresalía.
Y fue allí en donde me derrumbé completamente, y lloré por horas, odiando cada año en el cual iba sintiendo cada vez más como Harry se iba alejando de mi vida. Aquí nadie podía escucharme y mis sollozos quedaban sosegados por el susurro del viento rozando las ramas.
Me había enamorado como una ridícula, me sentía débil. La debilidad es para tontos.
Quería arrancar este dolor de mi. Y allí fue cuando decidí cerrarme ante las emociones y alejarme de las personas. Esa fue la última vez que hablamos. Rompí todo contacto con la gente que me rodeaba-la poca gente-. No quería que nadie más me lastimara, me volví fría y opacada. Jamás volví a llorar.  


Stuck In Love {Harry Styles}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora