Piscina,Otra vez

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Con molestia lanzó el pañuelo que ocupaba para limpiar los vehículos de la familia Hwang, que por cierto debía tratar con cuidado por su alto valor económico. Sentía que le ardía la piel, el sudor corría desde su frente hasta las mejillas pasando por cuello también. Parada estaba observando los modelos mientras jadeaba, ni siquiera si reunía todo el dinero que ganaría en su vida podría comprar uno. Podía identificarlos, aquí en el enorme garaje había un Rolle Royce, Ferrari, Lamborguini, Audi, Bugatti y un Aston Martin, eso sí ni siquiera contaba la limusina blanca y negra. Le dolía el estómago pensando en todos los millones que debía tener el señor Hwang en su cuenta, quizás si un día quería cumplir una fantasía podía bañarse en una piscina con dinero, pero no Tae, ella solo debía quedarse a mirar y limpiarlos.

Caminó hacia la piscina de la mansión (enorme por cierto como todo lo demás aquí), una de sus tareas era limpiar y le gustaba hacerlo, siempre aprovechaba de darse un baño sin que los demás se lo prohibieran. Pero llegando allí se dio cuenta que había una sirena en el agua, una mujer que sabía nadar muy bien y que parecía disfrutarla. Sí, debía ser una sirena porque se quedó absorta en su belleza hasta que ella se dio cuenta de su presencia

-¡Me asustaste! – Tiffany flotaba sin problemas- ¿Qué haces aquí?- Tae le mostró la libreta

-"Vengo a limpiar el agua de la piscina, además quien sabe, quizás te vuelves a pegar y necesitarás de mi ayuda" –Tiffany observó su cabello despeinado, las mejillas rojas producto del esfuerzo, parecía una niña que hubiese jugado con tierra y por alguna razón le causó ternura

-Ya quisieras que me ahogara, pero no, eso no sucederá –sonrió antes de seguir nadando.

Taeyeon había quedado descolocada, no era usual que la "heredera" le dedicara una sonrisa haciendo medias lunas sus ojos, una sonrisa sincera y espontánea además. Pero de pronto la muchacha se sumergió bruscamente captando su atención. Pensó que empezaría a nadar bajo el agua por toda la piscina pero no, de hecho se había quedado un minuto así y seguía sumergida inerte.
¡Santa mierda! ¡Por eso no había que escupir al cielo! Sacarse los zapatos fue todo lo que alcanzó a hacer antes de lanzarse para sacarla a flote mientras la muchacha se quejaba sorprendida. Ambas flotaban, Tae la abrazaba por la cintura con el ceño fruncido y la castaña, bueno, Tiffany estaba con los labios abiertos por el asombro

-Estaba haciendo una prueba para ver cuánto podía aguantar la respiración.... ¡Lo arruinaste! –Pero sus ojos se concentraron en el cuerpo de la bajita, llevaba la ropa puesta y de seguro en el bolsillo de su pantalón la libreta que usaba que quedó destruida- Yo.... Ah, tengo una libreta de notas que te puedo dar, no quise.... Oh mm ¿Preocuparte?

Taeyeon no sabía si sentirse estúpida o afortunada. Ambas estaban pegadas la una de la otra, las manos de la "heredera" estaban en sus brazos para sujetarse de ellos. Disimuladamente repasó el cuerpo de ella en lo que sobresalía a flote, pero solo duró un segundo porque había recordado el cuerpo que había tras ese bikini. Tiffany parpadeaba apenas, Tae era muy fuerte y a pesar de estar en la piscina podía sentir el calor que irradiaba todo su cuerpo. Sus ojos ónice eran asombrosos, tenían una historia que contar y era fácil perderse. Le sorprendía ver que los ángulos de su rostro y cuerpo en general eran muy buenos. Después de unos segundos absortas en la otra reaccionaron.

-Hoy viene a cenar mi novio –susurró- Sería bueno que por favor no le mencionaras lo del accidente del lunes.
Una sonrisa traviesa apareció en los labios de la sirvienta muda, Tiffany captó el mensaje ¡Se estaba imaginando su cuerpo sin ropa! No podía negar que tenía una dentadura muy linda y una sonrisa perfecta ¡Estaba sonriendo por primera vez! Cerca de la orilla la soltó antes de afirmarse del reborde de piedras y salir de allí con fuerza. La camiseta de manga corta se pegaba a su cuerpo y marcaba sus pechos, así también como el pantalón mojado. La morena se quedó dentro del agua hasta que Tae había desaparecido, no había sido buena idea jugar a sumergirse y aguantar la respiración porque el contacto con ese cuerpo la había descolocado, y claro, obviamente no había sido bueno lo que sintió.

"My Cinderella"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora