"My Cinderella"

plan arruinado

Todas las personas estaban con sus ojos puestos en la nueva modelo de Kim Taeyeon. En este momento estaba siendo silenciosamente juzgada, para bien o para mal todos empezaban a armarse una opinión de ella. Sin decir nada, Taeyeon la acercó a un grupo de personas muy elegantes que la esperaban con una sonrisa, miró rápido hacia atrás para hacerle una seña a Yoona que debía esperarla.

-"Bonjour" –dijo Taeyeon- Quería presentarles personalmente a la mujer que trabajará conmigo y posará con ustedes... -miró a Tiffany, la seguía sujetando de la cintura para darle seguridad y mostrarle a los demás que había confianza entre ambas (aunque en realidad aquello no fuese tan cierto)- Ellos son representantes de la revista Vogue

-Me gustaría que sepas, Tiffany, que usualmente no andamos visitando modelo por modelo que posa en nuestra revista, sin embargo para nosotros es importante saber y conocer a la primera modelo que trabajará personalmente con Kim Taeyeon, su marca S&H está ganando poder y queríamos cubrir aquello – dijo uno de los representantes de dicha revista, Tiffany agachó la cabeza con cortesía, tenía modales y los sacaría a relucir en todo su esplendor

-Para mí es un honor trabajar a su lado y con ustedes, soy periodista pero me manejo todo el tiempo con esto de la imagen personal

-Taeyeon y tú posarán para la versión norteamericana de Vogue, esa generalmente tiene más impacto que el resto de las otras versiones, ya se imaginarán porqué

Tiffany miró disimuladamente de reojo hacia las demás personas de la cena en aquel salón, muchas tenían los ojos puestos en ella y no pudo evitar sentirse "exclusiva" por estar al lado de Kim Taeyeon. Esto realmente era una mierda, sí, un sentimiento que no debía existir porque antes se hubiera sentido orgullosa de estar a su lado por el solo hecho de ser suya y todo lo que implicaba el amor pero ahora ¿Se sentía orgullosa porque las modelos la envidiaban? Con culpa intentó soltarse del agarre de Taeyeon pero esta volvió a presionarla a su lado.

-La cena va a empezar –susurró Taeyeon a su oído- Tu puesto con el de tu secretaria están en la misma mesa que él mío, vamos...

Kim Taeyeon era una mujer con modales desde que la conocía, de todas formas le sorprendió que cuando se fue a sentar, ella corrió su silla hacia atrás permitiendo que se apoyara. ¿Lo hacía solo para quedar bien frente a los demás? Miró a las personas que estaban sentadas a la mesa, allí se encontraba Seung Hyun justo al lado derecho de Taeyeon, al otro lado estaba Hayeon, Taeyeon y la representante de Vogue, luego ella y Yoona. Le dio una mirada significativa a la castaña, nada de esto hubiera pasado si no hubiese sembrado la semilla en ella, estando aquí sentada prometió a sí misma dar todo para no fallarle y demostrarle que realmente lo sentía, eso sí, la lucha más fuerte para el perdón sería definitivamente con Jessica y Sunny.
El primer plato que sirvieron fue almejas cubiertas por un fino queso francés y especias exóticas que, acompañadas de una copa de vino la hacían irresistibles.

-Taeyeon ¿Qué viste en Tiffany que no tuvieron las demás modelos? –dijo el representante de la revista

-Pasión –la rubia lo dijo de inmediato- Hubo mucha pasión en su mirada y la forma en la que posaba, más allá del físico es lo que Tiffany puede transmitir –mientras nombrara más cosas buenas de ella, la pelinegra tendría la confianza suficiente para hacer el trabajo bien, porque juraba a sí misma que no le perdonaría si arruinaba esto.
Continuaron una charla tranquila sobre cualquier tema, aunque sin dudarlo Tiffany y Yoona se desenvolvieron increíblemente con la información, no le sorprendía, ambas trabajaban en los medios periodísticos y tenían suficiente argumentos con los que rebatir.
El segundo plato fue "Quinche Lorraine" que consistía en una especie de masa en forma de platillo rellena con queso gruyere, bacon ahumado, huevos, pimienta entre otros.
Aunque era exquisita su porción era adecuada para ser llamada cocina gourmet, Taeyeon tuvo la necesidad de levantar sus ojos a los de la pelinegra, allí se dio cuenta que Tiffany miraba su plato con decepción porque quizás las almejas habían abierto su apetito y una porción tan "fina" no iba a satisfacer nada. Quiso reír ¡Quizás su modelo comía como un cerdo! Estaba convencida que debía tener una conversación sobre eso, tenía que mantenerla en un mismo peso para que no arruinara el vestido que le haría a la medida