Al día siguiente, volví a levantarme con mareos.
Fui a la escuela y de nuevo tuve que salir corriendo al cuarto de baño a vomitar. Parece que ya no era por algo que había comido. Vomité, me lavé la cara y entre al WC para aflojarme el sujetador, pues me molestaba de una manera insoportable. Me lave las manos y volví a clase. No había ningún maestro, porque nos tocaba tecnología y la maestra se había puesto mala.-¿Otra vez, tía? -Me dice Lorena.
-Si...
-Tía, ¿y si te pasa algo? Vamos al médico luego, cuando se valla tu madre a trabajar, si quiere Manuel que venga.
-No seas exagerada.
-¿Y si es un virus?
-No importa.
-A las 5 en tu casa.
Lorena no me dejo hablar más del tema, se había empeñado en ir al médico, y cuando Lorena se empeñaba en algo, nadie podía quitárselo de la cabeza. No importa, si de esa manera sr iba a callar...
Llegué a mi casa, no comí, claro. Tenía un dolor de estomago increíble. Llevaba ya dos días sin comer, era lo único que me preocupaba. Tocaron al timbre, joder, me había quedado dormida. Subió Lorena a mi casa con una bolsa del pull & bear en la mano. Me traía el traje que le pedí, unos vaqueros negros, una camisa roja de cuadros roja y una camiseta básica blanca de tirantes. Me puse mis airmax blancas y fui a mi cuarto con Lorena a que me ayudara a peinarme, pero al final me dejé el pelo suelto porque me dolía la cabeza. Me pintó un poquito la raya del ojo y me puso rímel. Entonces Manuel tocó al timbre y le abrí. Subió, iba en chándal, como no. Metí el móvil y dinero en el bolso, y nos fuimos los tres.2 horas mas tarde...
No, no puede ser. Esto es imposible. Imposible. No podía parar de llorar, era imposible. Tras pensarlo un rato, me di cuenta de que si podía ser posible. Madre mía. ¿Que iba a hacer ahora? ¿Como se lo diría a mi madre? Manuel estaba esperándome en la sala de espera, y el todavía no sabia nada. ¿Que iba a decirle? ¿Como iba a reaccionar? Preguntas... Y todas ellas sin respuesta. ¿Y mis estudios? ¿Y mis amigas? ¿Y mi vida? No, no podía creermelo, seguía pensando lo mismo, que era imposible. No podía dejar de llorar, parecía una niña pequeña y lo peor de todo, es que no podía hacer nada para remediarlo. Estaba embarazada. Nos fuimos del hospital para no llamar mucho la atención, sin decirle nada a Manuel todavia. Fuimos a mi casa, que todavia no habia nadie, y nos sentamos los tres en el sillón, yo en medio, y ellos dos intentando consolarme. No podía parar de llorar, el rímel había acabado derramado en mis mejillas, y Manuel no hacia nas que preguntarme que qué es lo que me pasaba, pero yo no sabía si decírselo, o dejarlo y abortar.
-Me hicieron una prueba de sangre.-Dije, entre sollozos.
-¿Y?
-Nada.
-Si no te pasara nada, no estarías así.-Me decía, dándome besos para que dejara de llorar.
-Manuel, estoy embarazada. -Dije, llorando mas fuerte al decírselo.
Se quedó en shock. Pensaba que iba a salir corriendo, que iba a desaparecer o algo. Me daba miedo su reacción, después de 20 segundos sin hablar ni decir nada, me creía que se había quedado sin respiración o algo por el estilo. Madre mía, por qué. Me miraba y poco a poco se le iban poniendo los ojos brillantes. De repente, se agachó y se echó las manos a la cabeza, aunque se le escuchaba llorar. Lorena fue a mi cuarto a por un pijama para ponermelo, y cuando se fue, Manuel me sonrió con esa sonrisa perfecta con sus preciosos ojos verdes llenos de lágrimas, me abrazó y me dijo "Pues bienvenido sea". Lorena salió de mi cuarto con mi pijama y me ayudó a ponermelo, ya que yo seguía llorando y sin ganas de nada.
-Tía ¿Y qué vas a hacer con él ?-Dijo, señalando mi barriga.
-Se lo va a quedar.-Dijo Manuel.
-Bueno, hagas lo que hagas, yo voy a estar siempre para lo que quieras, yo y Cristián.. Que ya es oficialmente tu cuñado.
-¿Enserio? Me alegro un montón por los dos!-Le dije, intentando sonreír.
-Sientate anda, no hagas esfuerzos en tu estado.-Me dijo Lorena riéndose.
-No tiene gracia.-En realidad, si tenia gracia, pero no quería reírme.
Lo único que yo queria en ese momento era llorar y que nadie me viera.
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Sin Buscarte. © [EDITANDO]
Romance" Mis piernas temblaban exageradamente del frío, y enseguida se dió cuenta Manuel y me abrazó de una manera... Tierna. Me encantó, porque sentí algo diferente. ¿Cariño? ¿Amor? No lo sabía, ni me lo podía imaginar."