Sin Buscarte. © [EDITANDO]

14.Mejor imposible

3 a.m:

-Shhhhh! Estoy intentando dormir.-Decía Lorena mientras saltaba en el colchón donde ella y Sofía dormían.

-Venga dormilona, guerra de almohadas.-Le dije tirándole un cojín a la cabeza.

-Deja de saltar ya, que se va a marear mi bebé.-Me dijo Manuel cogiendome de la cintura.

-No se marea, tranquilo, no tiene cabeza todavía.-Dije, riendome.

Lorena se levantó corriendo y empezó a darme en la espalda con su almohada, sin que yo pudiera defenderme, ya que Manuel seguía agarrándome.

-¿No querías pelea?

Me soltó Manuel y empezamos Lorena y yo a hacer movimientos de pressing catch, que a ella siempre le ha gustado.

-Lorena! ¿Eres tonta? Que le haces daño!-Gritaba Sofía.

-Dios mio, estoy embarazada, no enferma, no me va a matar. -Dije, hice un puchero y me senté en la cama cruzandome de brazos.

-Perdoname, perdoname, no te estreses!-Dijo Sofía abrazándome, siempre ha sido una exagerada.

Pasamos casi toda la noche jugando a pressing catch y con los cojines, hasta que me dio sueño. Entonces se acabó la fiesta. Me encantaba que hicieran lo que yo decía, aunque más bien. Me encantaba que estuvieran siempre pendientes de mi, y con la excusa del embarazo, me iban a hacer mucho mas caso.
Sofía y Lorena durmieron en un colchon grandecito que les puso mi madre en el suelo, y yo dormí en mi cama mientras Manuel me abrazaba y podía notar su respiración en mi cuello.
Me encantaba todo de el.

-Mi dormilona...-Manuel me despertó dándome un beso en la mejilla.

-Mi niño.-Le conteste con un beso en la boca.

-Shh! Estas dos siguen dormidas, vamos a despertarlas...

Me llevó a la cocina de la mano y cogió una jarra que había lavado mi madre la noche anterior. Abrió el grifo para no hacer mucho ruido y, poco a poco, lo llenó de agua fría. De nuevo me cogió la mano, me la besó y me llevo al cuarto. Alumbrándose con el móvil se dirigió hacia donde dormían Lorena y Sofía, y haciendo un gesto para que no hiciera ruido, les volcó la jarra encima.
No pude aguantarme mientras las escuchaba gritar a las dos, casi me meo encima. Tuve que salir corriendo al cuarto de baño.
Salí y estaban las dos de pie súper enfadadas. Me reí, y vinieron a abrazarme, mojandome a mi también la camiseta. Nos miramos las tres y fuimos a abrazar a Manuel y lo pusimos chorreando.

-Pobrecito mio.-Le dije riendome de el.

Después de reírnos un rato, les di una camiseta a Lorena, otra a Sofía, y Manuel se la quitó y la puso a secar. Después de todo esto se levantó mi madre y me dijo que se iba a la casa de su amiga a pasar el día y a lo mejor a dormir, que no la esperara despierta. Me dijo que si querían mis amigas, que se quedaran y nos hacíamos de comer, que había cosas en la cocina para hacernos algo.
Fuimos Lorena y yo a hacer el desayuno, ya que ya no nos podíamos dormir otra vez. Hicimos tostadas para una docena de personas, y gastamos dos kilos de naranjas para hacer cuatro vasos de zumo. Valió la pena, estaba buenisimo. Sofía y Lorena fueron un momento a sus casas a ducharse y coger ropa para pasar el dia conmigo, y como tardarían un poco, Manuel y yo apagamos la luz ...
Estábamos en mi cama tumbados, mirándonos fijamente hasta que me dió un beso en el cuello y ya me encendí. Serian las hormonas por el embarazo, o porque llevábamos ya una semana a dos velas. Me puso encima de el agarrándome de la cintura, e intenté ponerme debajo de el, como a mi me gusta, pero Manuel se apartó corriendo. Me quede mirándolo con cara extraña, y el, preocupado, me dijo:

-¿Y si le hago daño al bebé?

-No te preocupes, mi vida.

Lo besé en la boca y se pegó a mi lo máximo posible, le bajé el pantalón y nos pusimos en marcha.